Ante el fracaso en mi primera historia de mejorar al Borussia Mönchengladbach en el football manager 2012, vuelvo a retomar de nuevo, con las pilas renovadas, la intención de volver a hacer de este equipo un grande de Europa. Para ello, Rainer Bonhof dejará su cargo de vicepresidente y será el nuevo entrenador del equipo.

Aquel centrocampista que brilló en los 70, de gran calidad técnica y temible disparo, sería el nuevo encargado de devolver ese espíritu de lucha a sus nuevos pupilos. Algunos de sus ex- compañeros como Simonsen, Jensen y Heynckes se apresuraron a darle la enhorabuena por su nuevo cargo, deseándole lo mejor en su nueva aventura. En el fondo sabían que la empresa de Bonhof entrañaba una gran dificultad, pero anhelaban que el Mönchengladbach resurgiera de sus cenizas como el ave fénix. Su ex- compañero y gran amigo, Günter Netzer, irradiaba felicidad ante la noticia, y le transmitió un bello mensaje: "Devuélvenos al fútbol de antes. Haz que esta nueva generación de seguidores vaya cada semana a los estadios con la esperanza de ver un gran espectáculo".

Esos años de gloria, de levantar títulos nacionales e internacionales con un espíritu de lucha y voluntad, parecían ya los rescoldos de un radiante sueño. Solo los aficionados más mayores recordaban aquellas gestas de su equipo. Y una idea rondaba en la mente de Bonhof: "Me dejaré la piel y trabajaré como el que más para que aquel entrañable recuerdo brote de nuevo en forma de realidad".

Camino de su casa, pensaba en la frase de Netzer. Se dijo: "Ojalá que los más pequeños puedan emocionarse viendo cómo juega el Gladbach". Tras ello, una imagen acudió a su cabeza: aquella final de la Copa de Europa de 1977 perdida ante el Liverpool, en la que un fuerte disparo suyo pegó en el palo y pudo haber cambiado la historia. Aquel equipo había logrado en una década cinco ligas y dos Copas de la Uefa. La única espina clavada era aquella final perdida de la Copa de Europa. ¿Podría lograr Bonhof, paso a paso, tan increíble hazaña? Solo pensarlo era descabellado. Antes de entrar en su casa a descansar, contempló en el horizonte el brillo del sol en un hermoso atardecer. ¿Sería una premonición?

Al día siguiente, Rainer Bonhof pudo comprobar a través de la prensa e internet la poca divulgación que su nombramiento como nuevo manager del Mönchengladbach había tenido. La ilusión había dejado de formar parte del equipo desde hacía tiempo. El último título del equipo había sido la copa alemana en 1995.

Era el primer día de un trabajo que afrontaba con ansia. Al reunirse con su presidente, Rolf Königs, le comunicó que su idea era hacer una revolución paulatina en el equipo. Conocía la delicada situación económica del club, por tanto, todos los fichajes que realizara deberían de ser baratos y de calidad (difícil pero no imposible combinación). Le dijo a su presidente que apostaría por una mezcla de jóvenes talentos en formación y jugadores veteranos, todos ellos con un espíritu de lucha y voluntad. La perspectiva era un proyecto de futuro en el que el equipo debía de ir mejorando poco a poco, tanto en sus cualidades como en sus calidades. El presidente le preguntó si se veía con fuerzas para luchar por alcanzar al menos la tabla media en la liga, y Bonhof respondió: "Esas son mis mínimas aspiraciones. Mi interés se centra sobre todo en que el equipo despliegue un fútbol de entrega, esfuerzo y sacrificio que sea atractivo para el espectador". El presidente no pudo menos que esbozar una sonrisa.

Su primer objetivo fue analizar el staff técnico del que disponía. Desde la directiva le avisaron de que debía rescindir el contrato por mutuo acuerdo de varios fisios y de un segundo entrenador. Así lo hizo, y además contrató a un nuevo ojeador, a tres preparadores y a tres preparadores del primer equipo.

Decidió rescindir el contrato de los dos segundos entrenadores y contratar para el puesto a un ex- compañero de equipo en el Mönchengladbach, que tantas tardes de gloria vivió con él: el belga Herbert Wimmer, próximo a cumplir los 67 años.

Así quedó configurada la lista de empleados del equipo:

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Al dirigirse al Borussia- Park (el estadio del Gladbach), se dio cuenta de que ese recinto tampoco sintió aquellos días de esplendor del equipo. Solo vivió esas hazañas el antiguo Böckelberg. Pensó que ya era hora de que el nuevo estadio vibrara como el anterior, e imaginó el campo repleto con su hinchada coreando feliz el nombre del equipo y celebrando cada gol.

Con semblante serio y una mirada que no dejaba traslucir lo que sentía (probablemente una gran felicidad que disimulaba), se dirigió Rainer Bonhof a la rueda de prensa que le esperaba expectante. Después de las amables palabras y adulaciones hacia su persona con las que se había expresado el presidente Rolf Königs, llegaba el turno de las preguntas al nuevo míster.

-Buenas tardes, señor Bonhof. Vuelve de nuevo a dirigir al equipo de su vida después de haberlo entrenado en la temporada 98/99. Fue una experiencia desafortunada en que el equipo acabó descendiendo. También ha dirigido anteriormente a la selección B alemana y a la sub-21. Después de estar en el club de su vida, entrenó al Sporting de Kuwait y muchos años a la sub-21 de Escocia. Aunque su currículum como manager no ha sido tan grandioso como el que tuvo como jugador, ¿se ve con fuerzas para llevar al éxito al club de su vida?

-Mi visión del fútbol no es tan resultadista como la suya. Llevo toda mi vida siguiendo a este club. Supongo que para usted el éxito son solo los títulos. Para mí, lo primordial es que el equipo luche con todas sus fuerzas en cada partido. Que se esfuerce y se sacrifique por cada balón, y que todos juntos den un bello espectáculo al espectador. Si esto sucede, el equipo crecerá poco a poco. No voy a presionarles con títulos. Ante todo, lo primero es el espíritu de darlo todo en cada partido.

-Señor Bonhof, no es normal en el mundo del fútbol que un vicepresidente se convierta en el entrenador del equipo. ¿Qué le llevó a tomar esta decisión?

-Amo mucho a este equipo. Aunque lleva muchísimo tiempo sin estar entre los grandes, siento que este equipo podría aspirar a mucho más. Tengo un sueño: que este equipo se parezca al menos en la entrega, el sacrificio, la voluntad y la lucha a aquel del que disfruté como jugador. Pienso que hay mimbres suficientes como para hacer de todo esto una realidad. Solo por eso, estoy hoy aquí.

-No obstante, su equipo es un clarísimo candidato a luchar por la permanencia. ¿No cree que lo que pretende es demasiado idealista?

-Voy a trabajar hasta la extenuación para transmitirle a mis jugadores todo lo que siento. A mis aficionados solo les digo que se preparen para disfrutar. Hasta el día de hoy dirán que es un sueño. Pero los sueños a veces se convierten en realidad.

(Esta respuesta dejó sorprendido a muchos de los periodistas presentes en la rueda de prensa. Tras un breve silencio, continuó la rueda de prensa).

-¿Qué objetivos tiene a largo plazo?

-Quiero devolver a este equipo al lugar del que nunca debió de bajar, quiero devolverle a la élite. Para conseguirlo, lo primero es implantar a corto plazo en el equipo los valores que comenté anteriormente. Quiero un equipo con ambición y hambre de títulos. Si eso se consigue, ganar títulos a largo plazo podrá ser una realidad.

-¿En qué consistirá su planteamiento táctico?

-No quiero para mi equipo un sistema fijo. Los planteamientos tácticos variarán según el rival y según cómo vaya transcurriendo el partido. Mi trabajo es investigar las fortalezas del rival para ponerle remedio, y hacer hincapié en sus debilidades. Me moveré con varios sistemas tácticos porque mi equipo debe ser impredecible. Lo único fijo será el espíritu de lucha en cada partido.

-Imagino que en un equipo que en los últimos años lucha por la salvación, la clave es empezar por conservar a los buenos jugadores del equipo, como Marco Reus, Dante, Ter Stegen...

-Así es. No me cabe duda del compromiso de estos jugadores con el equipo. Conocen mi proyecto y les entusiasma. Confío en que todos ellos continuarán en el equipo.

-¿Tiene ya una idea de los jugadores que necesita en el mercado de fichajes?

-Las fuertes deudas del equipo me mueven a buscar básicamente a jugadores jóvenes con talento y ganas de triunfar. Esa idea de ambición y ganas de triunfar es justo lo que busco. ¿Cuántos serán? Aún lo desconozco. Hay tiempo también para que algunos jugadores de la plantilla me convenzan.

-Señor Bonhof, si quiere conservar a los buenos jugadores del equipo, y al mismo tiempo afirma que el club está en una delicada situación económica, ¿cómo piensa solventarla?

-La mejora económica provendrá de aplicar austeridad en los sueldos y en el precio de los fichajes, y evidentemente serán necesarias algunas ventas para que la situación no se desnivele. Soy consciente de que el club necesitará éxitos deportivos que le lleven a aumentar los ingresos. Con lo que expliqué anteriormente sobre las características que tendrá mi equipo, pretendo llegar a ello.

-¿Va a haber cambios en el equipo técnico?

-El cuerpo técnico contaba con dos segundos entrenadores. Uno de ellos no seguirá en el club, y el hombre que me acompañará en esta nueva aventura y que tiene todos los requisitos que busco en un segundo entrenador será Frank Geideck.

Se da por concluida la rueda de prensa. Bonhof se levantó y se marchó con tranquilidad. Un murmullo escéptico recorrió la sala. Por los muchos años sin éxito del club casi nadie cree en un milagro, y piensan que será una temporada muy sufrida. Como ya Bonhof había dirigido anteriormente al equipo y la temporada fue nefasta, piensan que esta se moverá por los mismos derroteros. ¿En esta segunda oportunidad en el club de sus amores se cumplirá por fin el sueño de Bonhof?

Rainer Bonhof, gran conocedor del fútbol alemán, se acomodó en su despacho y se dedicó durante horas a repasar vídeos de jugadores promesas de su liga y de otras ligas. Ya tenía en mente los posibles descartes de su propio equipo. Recordó por un momento a su ex-entrenador Weisweiler y pensó que ojalá él pudiese tener al menos la mitad de éxito que tuvo Hennes en el Mönchengladbach.

En la izquierda: Wolfgang Kleff. En el centro: Weisweiler. En la derecha: Bonhof

Lo primero que anotó en su lista fueron los objetivos que se marcaba: era necesario que el equipo acabase como mínimo en la tabla media para ir escalando posiciones en el futuro. No contemplaba luchar de nuevo por la salvación. Desde luego, concebía como un gran éxito terminar la temporada jugando la UEFA o la Champions. En el horizonte tenía a nivel personal, aunque se avergonzaba con solo pensarlo, lograr que el equipo levantase la Champions tan ansiada, para borrar de una vez por todas aquella triste tarde contra el Liverpool y su desafortunado disparo al palo.

Conocía la delicada situación económica del club. Lo primero que hizo una vez hubo visualizado los vídeos, fue anotar los nombres de los jugadores que le interesaban, y que probablemente se podrían fichar a buen precio. Sabía también que eran necesarias algunas ventas para nivelar las diferencias económicas. Esta fue, finalmente, la lista de altas y bajas del equipo:

Con 18 altas (una de ellas llega en el mercado de invierno) y 13 bajas, Bonhof espera que la plantilla mejore su nivel. La prensa está preocupada porque piensa que el equipo necesitará mucho tiempo para adaptarse con tantas caras nuevas. Al entrenador no le preocupa demasiado, y piensa que era algo necesario para que el club sea cada vez más competitivo. A pesar del mayor número de altas, el equipo ha obtenido un pequeño beneficio gracias a que algunas de las incorporaciones fueron o muy baratas o gratuitas.

Sistema táctico:

Después de haber analizado el sistema táctico empleado por los entrenadores de la primera división alemana, y de haber estudiado previamente la conjunción de su plantilla, Bonhof ha decidido que jugará con tres sistemas distintos: el 4-3-3 al estilo de Cruyff , el 4-2-3-1 o 4-5-1 en función del rival y el 4-2-4 al estilo de Brasil del 70.

!Comienza la pretemporada!

2-3

Klaus (26), Moras (53) Emanuel Villa (60, 81), Luis Herrera (67)

0-5

Kachunga (9, 26, 33), Acker (p.p 36), Klinger (p.p 40)

2-1

Grimaldi (49), Lambertz (54) Reus (44)

3-1

Ter Stegen (p.p 27), Armand (79), Bottone (87) Vukusic (12)

1-2

Engelbrecht (90) Vukusic (25), Reus (49)

A pesar del saldo negativo de tres derrotas y dos victorias en los amistosos, Bonhof no está demasiado preocupado. Ha contado bastante con los jugadores del filial para estos partidos, y estos no serán los protagonistas del campeonato. Aun así, el manager quiere que su equipo acabe asimilando sus tácticas y que la desarrollen con el espíritu de lucha, entrega y sacrificio, incluso dando espectáculo a la afición. piensa que es cuestión de tiempo que el equipo acabe asimilando los distintos sistemas, y que poco a poco vaya creciendo. Comprende que por los muchos fichajes realizados, los jugadores tienen que adaptarse a su nuevo equipo. Prepara con seriedad su presentación en sociedad con la disputa de la primera ronda de la copa de Alemania ante el equipo semiprofesional Meuselwitz. Para Bonhof no hay lugar para la confianza, por muy modesto que el rival sea.

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Dios, menuda remodelación, qué barbaridad. No sé hasta qué punto hay ciertos jugadores vendidos que podían ser de utilidad al equipo: Neustädter, Hanke, Stranzl, Jantschke, Wendt (¿por qué cedido?). No sé, más fácil que fichar a un jugador y esperar a que se adapte y dé el nivel, es mejor para un manager intentar sacar el máximo partido de los jugadores que tiene disponibles. Es lo más barato y eficaz. Además, la mayoría de bajas son "malvendidas", es decir, jugadores siempre bastante por debajo de su valor.

Sobre las altas, mucho jugador desconocido de ligas extranjeras y mucha pero que mucha apuesta de futuro. Quizás la jugada nos salga bien, pero habría que pensar más a largo plazo que a corto plazo, donde puede que haya una pequeña catástrofe. Anele es buen jugador, interesante, a ver cómo lo utilizas.

Pues nada, esperemos que tengas suerte en este segundo intento, veo que te has decidido por ciertas soluciones bastante radicales, ojalá te salga bien. De momento, en pretemporada, no ha habido mucho brillo, pero bueno, son los partidos oficiales los que importan...

¡Saludos!

El debut oficial de Rainer Bonhof

No podía estar más ansioso el manager Bonhof en su debut oficial en copa frente al Meuselwitz, de la cuarta división alemana. Llegaba la hora de la verdad y el equipo tenía que mejorar mucho su imagen. El rival en cuestión es muy débil, pero Bonhof sabía por experiencia que los enfrentamientos a un único partido serían inquietantes, fuese quien fuese el rival.

29 de Julio de 2011. Primera ronda de la DFB Pokal

0- 3

Mate Bilic (pen 4, pen 24, 47)

Nadie más feliz que el croata Mate Bilic, recién fichado del Sporting de Gijón, después de su hat-trick. Tras el dominio claro de la primera parte, en el que se marcaron los tres goles del partido, sobró la segunda. A los cuatro minutos, Bilic mandó un pase cruzado raso al segundo palo, y Ferl toca el balón con la mano. El colegiado no duda en señalar la pena máxima, que el propio Bilic materializaría en gol. En el minuto 24, el mediapunta noruego Wolf Eikrem bota un saque de esquina y el centrocampista noruego Nordtveit fue empujado por Oswald dentro del área. Segundo penalty y segundo tanto para Bilic. A falta de un minuto para el descanso, el centrocampista sudafricano Khuboni envia un pase raso dentro del área para Bilic, que regatea al central Brendel y manda el balón al fondo de las mallas después de golpear en el poste. Era el 0-3 con el que finalizó el partido.

El delantero Mate Bilic, en una imagen con la selección croata.

Primer partido oficial de Bonhof y primera victoria. No es para presumir porque el rival era de poca entidad, pero es probable que le dé fuerzas al equipo de cara al inicio de temporada. Bilic, sin duda, el más contento por su debut oficial goleador.

Karma23 La verdad es que es una apuesta bastante arriesgada la de Bonhof porque siempre es difícil hacer jugar bien a tantas caras nuevas. Espero que esta vez cambie la suerte. Todos los jugadores que nombras son para ser tenidos en cuenta, y con todos tuve la duda de si tenerlos una temporada o venderlos. Me decidí por lo segundo y a ver qué pasa. En cuanto a Wendt, que también podría haber contado con él, mi intención era venderlo pero al ser su primera temporada solo pude cederlo. !Gracias por desearme suerte! Veremos a ver qué pasa

!Comienza la Bundesliga!

El primer enfrentamiento será como visitante ante el Hamburgo. Después de estudiar al equipo rival, Bonhof usará el 4-2-4 al estilo de Brasil del 70, pero con ligeras variaciones. Dos de los mediocampistas: Vanden Borre y Khuboni, jugarán como centrocampistas defensivos para dificultar la labor del mediapunta Skjelbred, y dos jugadores en la posición de mediapunta: Eikrem y Prica tendrán superioridad numérica y podrán poner en más de un apuro al centrocampista defensivo Jarolim. Los dos laterales: Anele y Zimmermann, intentarán que sus dos extremos: Jansen e Ilicevic, creen por las bandas el menor peligro posible, y los centrales Moras y Dante, tratarán de frenar las incursiones al área de sus dos delanteros: Guerrero y Petric.

2-6

Petric (32,74) Drobny (p.p 24), Dante (42), Eikrem (47), Vukusic (51, 57), Prica (66)

Aquí os dejo los datos de lo que aconteció en el encuentro:

Nº S Nombre Inf. Pas Bue Imp Cen Bue Ent Gan Imp Cab Gan Imp Int BAt BRe BDs TiP Des Fdj F.C F.R Asi Dis T.P Distancia Con Cal Goles Enc 14 Plamen Iliev 23 11 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 1 1 1 0 0 0 0 0 0 0 0 3.6 km 99% 7.3 2 20 Anele 33 28 1 2 1 7 6 0 1 0 0 4 0 0 0 1 0 0 2 1 0 0 0 8.3 km 75% 7.5 19 Vangelis Moras sus 62 19 10 0 0 0 2 2 0 7 5 1 6 0 0 0 0 0 0 0 0 0 1 0 4.4 km 94% 7.6 31 Dante © 32 18 0 0 0 0 0 0 6 5 4 5 0 0 0 0 0 0 0 0 0 2 1 6.5 km 88% 8.4 1 2 Matthias Zimmermann 30 20 0 1 1 8 7 0 2 1 0 7 0 0 0 1 1 0 0 2 0 0 0 7.5 km 71% 7.5 24 Thanduyise Khuboni sus 80 25 23 0 0 0 4 3 0 0 0 0 2 0 0 0 0 0 0 1 1 0 0 0 6.8 km 78% 7.5 49 Anthony Vanden Borre 19 16 0 0 0 3 2 0 2 2 0 4 0 0 0 0 0 0 1 0 0 0 0 7.6 km 75% 7.5 11 Marco Reus 16 14 5 12 5 2 1 0 1 0 0 0 0 0 0 0 4 0 0 2 4 1 0 8.2 km 78% 9.4 10 Rade Prica 40 30 0 0 0 3 2 0 1 1 0 1 0 0 0 0 0 0 0 0 0 4 3 7.7 km 80% 8.1 1 51 Magnus Wolff Eikrem sus 86 34 28 3 0 0 3 2 0 2 1 0 1 0 0 0 0 1 0 0 1 1 2 1 7.3 km 79% 9.2 1 13 Ante Vukusic 26 25 1 1 0 3 0 0 7 1 0 0 0 0 0 0 0 1 2 3 0 3 2 7.3 km 81% 9.1 2 39 Andreas Hinkel 16 Håvard Nordtveit 4 Miika Koppinen ent 62 8 7 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 2.1 km 98% 6.3 53 Johannes Geis ent 80 5 5 0 0 0 1 1 0 1 0 0 2 0 0 0 0 0 0 0 1 0 0 0 1.2 km 96% 52 Jóhann Berg Guðmundsson 50 Felix Klaus ent 86 7 4 1 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 2 0 0 0 0 0 0 0.8 km 98% 9 Mate Bilic

!Gran potencial ofensivo en el debut liguero!

Los 6 goles marcados por el Gladbach en campo del Hamburgo fueron un festival ofensivo y de juego. En el minuto 24 un centro templado de Reus es introducido en su propia portería por su portero Drobny. En el minuto 32 un córner preciso del Hamburgo sirve a Petric para igualar el partido. En el minuto 42 el Gladbach responde con la misma moneda. Reus toma carrera para sacar un córner y Dante de un inapelable cabezazo vuelve a poner a su equipo por delante: 1-2. En el último minuto del primer tiempo: minuto 47, Reus manda un balón en horizontal desde la derecha y el mediapunta Eikrem le pega cerca del área para establecer el 1-3 con el que se llega al descanso. En el minuto 51 Prica le pasa el balón al asistente de la noche, Marco Reus, que lo cuelga para que el delantero Vukusic se lo acomode, avance un poco dentro del área y bata al guardameta rival: 1-4. Tan solo 6 minutos después, en el 57, Eikrem le pone por el centro un gran pase a Vukusic, que en una posición peligrosa bate de nuevo al Hamburgo: 1-5 y el guardameta rival no deja de persignarse ante las continuas llegadas del Gladbach. Nueve minutos después, en el 66, Reus lanza un córner que es interceptado por el defensa Diekmeier, pero Prica anda rápido, le roba el balón y solo ante el portero tiene que empujarla para poner el 1-6. !Y aún quedaban 24 minutos de juego! El portero Drobny ya quería irse a dormir A partir de ahí, el Gladbach bajó el ritmo y no atacaba tanto, aunque siguió asediando la portería rival. En el 74, Petric de nuevo marca el gol del orgullo tras un gran pase de Jarolim que le deja solo. El marcador ya no se movería más, pero Reus en el 84 a punto está de establecer el séptimo: Geis le da un gran pase a Vukusic, que dentro del área se la deja al alemán para acabar disparando al palo.

Después del partido, Bonhof se mostró muy sorprendido del gran nivel mostrado por su equipo. "Me ha sorprendido gratamente el gran nivel de juego que ha desarrollado mi equipo. Marcamos 6 goles, pero pudieron ser 14 perfectamente. He vivido casi todo el encuentro más tranquilo de lo que esperaba. Sin duda, este es el nivel de compromiso que el equipo debe de mantener. Aún es pronto para echar las campanas al vuelo, pero les he recalcado que si esta entrega y ambición se mantienen el equipo podría estar llamado a hacer grandes cosas durante la temporada".

Se rumorea en tono jocoso que el guardameta Drobny, con cada llegada del Gladbach, solo atinaba a decir con tono asustado: !Que disparan!

Nota: Antes que nada, mis disculpas a los lectores por cómo ha salido las estadísticas de los jugadores del Gladbach en el primer partido de liga. Me fue imposible la captura de la imagen, y de forma manual me salió un desastre. Espero poder remediarlo en los próximos partidos.

!Debutamos en nuestro campo!

El Hannover 96 sería el primer encargado de jugar como visitante en el Borussia- Park. Se presentaba tácticamente con un 4-4-2. Bonhof presentó el mismo sistema del anterior partido, pero con variaciones. Intentó hacer daño con el mediapunta Eikrem, y los extremos Pudil y Reus surtirían con sus centros al delantero Bilic. Vanden Borre y Geis intentarían obstaculizar el peligro de los centrocampistas Pinto y Schulz con sus pases al área, mientras que los centrales Nordtveit y Dante debían frenar a los delanteros Ya Konan y Abdellaoue. Los laterales Hinkel y Kopplin marcarían a los extremos Royer y Stindl.

0-0

Datos del partido:

Fue un contraste con respecto al primer partido

El debut en casa fue para olvidar. Partido de mucho centrocampismo y aburrido, con muy pocos disparos a puerta por parte de los dos equipos. Parecía que se tenían demasiado respeto. El Hannover, sabedor de los 6 goles del primer encuentro, estuvo muy bien ordenado tácticamente y sin correr riesgos. En cambio, la imagen ofrecida por el Borussia fue completamente distinta a la del primer partido, creando pocas ocasiones y contagiándose del rival. Ante un partido gris, el único rasgo positivo fue sumar un punto. Cuatro puntos en dos partidos, y a evitar relajarse para el próximo.