Tras dos años no pueden presentar este juego. Es un paso atrás en muchas cosas que iban bien y un paso adelante en algunas cosas por las que la mayoría no nos quejábamos. Lo único que me parece una novedad profunda y que merece la pena dedicarle tiempo es el apartado táctico. La interfaz me pareció horrible, llegando por momentos a abrumarme. Y el motor gráfico nada reseñable, ni necesario bajo mi punto de vista. Acabé quitando el juego al poco de empezar. Le daré más oportunidades en estos días, pero nunca había tenido esta sensación de juego en caída libre, y lo compro todos los años desde que era Championship Manager, que ya ha llovido.