Prólogo Carlos tienes visita. Voy mamá. Vamos date prisa llevas todo el día entre papeles y delante del ordenador, tómate un respiro, te alegrará saber quien ha venido. Siéntate a comer con nosotros Alan, ya conoces a Carlos cuando dice voy pueden pasar horas hasta que aparece. Has cocinado carcamusas María lo huelo desde aquí y sabes que no puedo rechazar semejante invitación, podemos esperar a Carlos comiendo. ¡Has dejado algo para mí Turing! Sabes que no puedo resistirme pero aún queda algo aunque si llegas a tardar cinco minutos más……¡tengo grandes noticias para ti Gauss! La semana pasada estuve con Damián y le hablé de ti, le dije que ya podías entrenar a nivel nacional que acababas de sacarte el título. Qué habrás hecho ahora Turing…. Quieren proponerte algo, come algo que has quedado a las seis y cuarto. ¡Cómo que he quedado! ¡dónde! ¡con quién! ¡Ya te lo he dicho estuve con Damián! Y ha conseguido que Joaquín se siente para escucharte. ¡escucharme a mí! ¡pero si no tengo nada que decirle! Claro que si Gauss, vas a proponerle dirigir al primer equipo. Llevas varios años aquí en Alcorcón y está muy bien pero tienes que arriesgarte un poco. ¡Pero si di mi palabra tanto a Samuel como a Javier para entrenar a los juveniles en la liga nacional! Eso también lo he arreglado, por parte de ellos no hay problema alguno, de hecho aquí tengo el informe que han elaborado para que puedas entregárselo a Joaquín. ¿Qué es esto? Tres años dirigiendo al Alcorcón C, 2 años como analista de datos, 2 años como segundo entrenador del juvenil A……. ¡Que va a ser! Tu curriculum para poder firmar con los míos. ¿con los tuyos? Sí, con los míos. No hay nadie mejor que tú. Mira Gaussito desde que te conocí en la facultad supe que harías algo grande pero es que eres muy parado y yo te voy a dar un empujoncito. ¡Y vámonos ya! que al final llegaremos tarde. Vamos en tu coche, después de la reunión nos quedamos a dormir en casa de mis padres y mañana volvemos para la hora de comer. Cariño haz caso a Alan, no tienes nada que perder. Hijo cuando tu madre trama algo no hay nada que hacer y esto huele a un plan de los de mamá, te lo digo yo que llevo más de 40 años junto a ella. Tus padres han hablado Gaussito, coge las llaves del coche que nos vamos. Mucha suerte hijo exclamaron al unísono mis padres. Mientras conducía el viejo Golf azul metalizado que me regaló mi abuelo Fede cuando comencé mi carrera de ingeniería matemática en la complutense de Madrid cientos de preguntas asaltaban mi cabeza que era incapaz de procesar tanta información. El trabajo, los entrenamientos, las clases particulares que impartía a mi hermana pequeña de manera sistemática. Para cuando quise darme cuenta ya había aparcado junto al estadio. Turing prácticamente me arrastraba hacia las oficinas del club y un recuerdo me estremeció. La primera vez que nos dirigíamos a un despacho juntos fue para presentarnos ante el Decano por un “pequeño incidente” en el campus. Fue entonces cuando nos rebautizaron, junto al Decano se encontraba Guillermo, nuestro profesor de estructuras algebraicas. ¿Sabéis quienes fueron Gauss y Turing? A pesar de estudiar matemática a ninguno nos sonaban sus nombres. Pues bien respondió Guillermo, un hombre de baja estatura con un enorme bigote negro y una voz grave que resonaba por todo el despacho. Fueron dos de los mejores matemáticos de la historia y vosotros tenéis dos opciones, tratar de acercaros a ellos o desperdiciar vuestro talento con estupideces como la de la semana pasada. Tomó la palabra el Decano un hombre de aspecto afable y voz cálida, tranquilo Guillermo entiendo tu malestar pero son jóvenes y merecen una segunda oportunidad. Si me dáis vuestra palabra de que no volverá a ocurrir nada parecido podemos olvidar “el incidente”. Por supuesto, respondimos de inmediato pero cuando nos disponíamos a abandonar el despacho….. No tan deprisa. Las palabras del Decano nos detuvieron al instante. A partir de ahora Guillermo se referirá a vosotros como Gauss y Turing, esa será vuestra pequeña penitencia. No deshonréis sus apellidos. Desde ese preciso instante todos nos conocían por nuestro apodo y tan sólo la familia y viejos conocidos se referían a nosotros por nuestro nombre de pila. Buenos días Carlos, parece que tienes representante y todo sonrió Joaquín. No, no Alan es…. Aún estaba absorto en mis pensamientos y no me había dado cuenta que estábamos en el despacho del presidente del club. Ya conozco a Alan jajaja. Siéntate por favor y tú Alan espera fuera. Me han comentado que querías hablar conmigo, bueno pues aquí estoy exclamó Joaquín. La verdad es que no sé muy bien qué decir, bueno sí, bueno no sé…. Aclárate que no tengo toda la tarde. Sin saber muy bien cómo proceder fui directo al grano; me gustaría que me diese la oportunidad de entrenar al primer equipo, creo que soy la persona indicada a pesar de mi juventud y podría devolver al club al lugar que merece. La verdad es que eres muy joven y aunque estamos buscando alguien para el puesto comprenderás que es algo que debemos discutir dentro del consejo, no es una decisión que debamos tomar a la ligera, aunque prometo que valoraremos tu propuesta y te responderemos sobre lo que decidamos. Muchas gracias por atenderme, le respondí y cuando disponía a salir por la puerta… Espera, creo que tienes algo para mí, esta mañana me ha llamado Samuel uno de los técnicos de la UD Alcorcón y me ha dicho que tenías algo para mí. Si, casi lo olvido, mis disculpas, es un informe que han elaborado sobre mí, espero que pueda serles útil a la hora de tomar una decisión. Gracias Carlos, te haremos llegar la decisión. No salí muy convencido de la reunión pero fuera esperaba Turing que todo lo veía con un positivismo que poco a poco iba calando en mí. Tras cenar en casa de sus padres caí rendido en la cama, demasiadas emociones en poco tiempo y aunque mi cabeza era una centrifugadora no tardé demasiado en conciliar el sueño. ¡Levanta holgazán! Son las 9 de la mañana. Había dormido del tirón. Un maravilloso aroma a café recién hecho inundaba la casa. Tere la madre de Turing preparaba unos desayunos excelentes siempre que me quedaba en su casa y hoy no iba a ser la excepción. Café, tostada con aguacate, zumo recién exprimido y cereales. Gracias Tere me mimas demasiado. Para nada, nadie sale de esta casa sin haber desayunado en condiciones. La receta para superar los obstáculos de cada día es un buen desayuno. Ahora conduce con cuidado y dáles un abrazo a tus padres de mi parte y de la de Juan. Su marido Juan trabajaba de mecánico en un taller de coches. Tras terminar el desayuno cogimos la A40 y en menos de una hora nos plantamos en Alcorcón. Era final de junio y el sol apretaba de lo lindo, dedicaba tres horas por la mañana a mis obligaciones laborales, la verdad es que era muy cómodo poder teletrabajar. Mis estudios y un poco de ayuda por parte de mi padre Carlos que llevaba toda la vida trabajando de electricista me permitieron acceder a un puesto en una distribuidora eléctrica para la cuál elaboraba informes sobre la optimización de redes de distribución. Después dedicaba una hora a hacer algo de ejercicio y ya por la tarde después de comer completaba la jornada laboral. Puesto que la temporada ya había finalizado no tenía que entrenar y tampoco debía impartir clases particulares a mi hermana Raquel tres años menor que yo así que bajaba al bar de Tomás con mi portátil y tomaba una cervecita con Turing mientras analizaba sistemas tácticos, entrenamientos, y todo lo relacionado con mi verdadera pasión, el fútbol. Habían pasado ya varios días desde la reunión y la esperanza empezaba a desvanecerse cuando un número desconocido sonaba en mi móvil. Sí dígame, hola Carlos soy Joaquín nos gustaría hablar contigo, ¿puedes acercarte mañana a eso de las nueve a nuestras oficinas? Nos gustaría hablar contigo una segunda vez. Por supuesto allí estaré. No pegué ojo en toda la noche y aunque el trayecto desde Alcorcón no llegaba a una hora me disponía a salir de casa a eso de las seis y media de la mañana. No había dicho nada a nadie sobre la reunión ni siquiera a mis padres y mucho menos a Turing. Llegué con mucho tiempo así que me dirigí a una cafetería cercana y aunque llevaba tiempo estudiando los datos del club y prácticamente conocía de memoría la plantilla aproveché para indagar un poco sobre su historia. Tras apurar el último sorbo de café me dirigí a las oficinas del club donde me esperaban tres hombres trajeados. Buenos días Carlos dijo Joaquín, estos son Francisco vicepresidente del área deportiva y Antonio que se encarga del tema económico. Quieren hablar contigo antes de tomar una decisión. Vamos a ser muy claros contigo Carlos dijo Joaquín, el club está en una situación delicada y nos jugamos mucho en esto. En el apartado económico hay muy poco margen para fichajes puesto que un porcentaje muy elevado lo hemos destinado a salarios con el objetivo de ascender de categoría. Imagino que habrás estudiado la plantilla así que tú dirás si ves posibilidades reales de ascender o no lo tienes claro. Tomaremos una decisión en función de si tu respuesta llega a convencernos o no. Samuel me ha hablado maravillas sobre ti, pero entiende que es una situación delicadísima en la que nos jugamos el futuro de un club histórico. Bien yo también seré claro, di un largo sorbo de agua antes de exponer mi propuesta. Tras analizar el plantel tengo claro que el sistema debe girar entorno a la figura del mejor jugador y ese no es otro que Neco Rubayo, además hay un jugador en los juveniles que destaca muchísimo y juega en la misma posición así que mataríamos dos pájaros de un tiro. Hay dos o tres canteranos muy interesantes los cuales debemos desarrollar para revalorizarlos y si llega el caso poder hacer caja con ellos. Tengo puesto el ojo en varios agentes libres jóvenes los cuales sería interesante tratar de convencer para hacer lo mismo, revalorizarlos y hacer caja para ir asentando al equipo en el ámbito económico. En lo deportivo veo suficiente nivel para abordar el ascenso aunque prefiero una plantilla algo más corta, así que será necesario ceder, vender o enviar al equipo B a varios jugadores. No quiero más de 20 jugadores en la primera plantilla. Propondría un estilo de juego muy ofensivo que conecte con la grada. Dos laterales muy ofensivos, dos mediocentros muy físicos, Rubayo con un rol libre en la mediapunta y en el puesto del nueve a Willy. Creo que debe funcionar. Joaquín, Francisco y Antonio se miraban entre sí estupefactos. Veo que has hecho los deberes exclamó Francisco. Bien ya hemos escuchado tu propuesta, te agradecemos tu tiempo, en un par de días te daremos una respuesta definitiva. Así concluyó la reunión y regresé a Alcorcón. ¿Dónde has estado hijo? Me tenías preocupada, pensé que estabas en casa pero al no escuchar nada he ido a tu habitación y he visto que no había nadie. Me ha surgido un imprevisto mamá, pero ya está arreglado. La próxima vez envíame un whatsapp y no me tengas en ascuas, ahora siéntate a comer. Me pasaba el día mirando el móvil esperando una llamada, Joaquín me dijo que me llamaría en un par de días, estáte tranquilo Carlos me decía a mi mismo, pero ya es 4 de julio y han pasado dos días ¿por qué no me llama? Como de costumbré me fui al bar de Tomás donde había quedado con Turing. Abrí mi portátil le di un sorbito a mi caña y fue entonces cuando sonó el teléfono. Hola Carlos soy Joaquín. Ya lo sabía pensé, la última vez que me llamó lo había agregado a mis contactos. Tengo buenas noticias para ti, nos gustaría que te encargases de dirigir al primer equipo esta temporada. Hemos redactado un contrato el cual quiero que estudies detenidamente y nos hagas saber tu decisión a la mayor brevedad posible ya que la pretemporada está a la vuelta de la esquina. Te esperamos mañana a las nueve en las oficinas del club. Hasta mañana Joaquín. Minutos después de colgar el teléfono apareció Turing. ¿Quieres otra? Me preguntó al ver mi vaso vacío. Vale le respondí pero sólo una que mañana tengo que madrugar. ¿madrugar? Pero si trabajas desde casa, puedes hacerlo a cualquier hora. Ya pero… tengo una videoconferencia importante con la dirección de la empresa, le mentí. Cuando llegué a casa mis padres estaban acostados así que tal y como le prometí a mi madre le dejé un mensaje en el whatsapp. Mañana tengo una reunión volveré para la hora de comer y le añadi tres emoticonoss de besitos. Al igual que la última vez llegué con tiempo pero esta vez esperé dentro del coche hasta que dio la hora. Dentro esperaban el presidente Joaquín, los consejeros Francisco, Antonio y una mujer que no conocía. Bueno a ellos ya los conoces, y ella es Rosa nuestra jurista y la encargada de dar forma legal a todos las cuestiones relacionadas con el club. Ella te presentará el contrato, cualquier duda o propuesta comunícasela a ella de cara a una posible modificación del contrato, si por el contrario estás de acuerdo en los términos establecidos tan sólo sería necesario que firmases el documento y pasarías a ser el manager del primer equipo. Procedo a leerte las condiciones, interrumpió Rosa. 6.250 € brutos mensuales, un año de duración revisable y prorrogable por un año más en caso de conseguir el ascenso. Deberás trabajar dentro del presupuesto para sueldos. Se te facilitará un piso de alquiler cerca del campo pero los gastos derivados correrán a tu cuenta. Este es tu contrato y lo que esperamos de ti es que además del ascenso hagas progresos en el apartado económico. Piénsatelo y danos una respuesta a la mayor brevedad. Ya lo he pensado respondí de inmediato. Ya tenéis manager. Nunca olvidaré esta oportunidad y espero que los resultados estén a la altura de vuestra confianza. Ven el lunes y te entregaremos las llaves y ya podrás alojarte en tu nuevo hogar, esperamos que sea de tu agrado. Vete planificando la pretemporada, los jugadores están citados el 14 de julio. Buen fin de semana a todos, nos vemos el lunes y gracias una vez más. Era la persona más feliz del mundo, mi oportunidad había llegado, mientras conducía hacia Alcorcón llamé a Turing para comunicarle la noticia. ¡Vas a entrenar a los míos gritó el bueno de Turing! Al llegar a casa me fundí en un abrazo con mis padres y pasé todo el fin de semana analizando y estudiando todos los aspectos del club. Manager del C.D.Toledo, no me lo podía creer.
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