Si!, al fín lo tengo. Después de mucho tiempo y trabajo lograba la herramienta final para cumplir el sueño de ser entrenador. Ante mí un difícil reto…buscar un equipo profesional en el que empezar a crecer.

“Sin padrinos no vas a ningún lado”, es la frase que más había oído durante este año de curso. Esas charlas con los managers del mañana en los descansos entre clase y clase. Yo, el más joven de toda la promoción, era quizás el que más pájaros en la cabeza tenía. Soñando con una buena oportunidad para demostrar que el trabajo es lo que logra objetivos. Padrinos…

Todos los allí presentes a las afueras del edificio portaban sus títulos orgullosos. Enseñándoselos unos a otros, contentos, “como si no fueran todos iguales” me decía. La única diferencia era el nombre que figuraba en ellos. Risas y proyectos, bromas y miedos. En las sonrisas de algunos se intuía el pánico al fracaso, o al no tener la oportunidad soñada. En la de otros la seguridad del que ya tiene algo apalabrado. De todos era sabido que allí había gente que ya tenía algo con alguien. En cambio yo no mostraba ninguna emoción, al menos de puertas para afuera. Quizás fuera por que nadie había hablado conmigo sobre trabajo, quizás porque esa gente no terminó nunca de caerme bien…el caso es que me mostraba frio como el hielo.

Al cabo de una hora de poner caras a los que me miraban moviendo el famoso papelito como si la lotería les hubiera cubierto de dinero, decidí buscar a la gente a la que realmente quería mostrarles mi entusiasmo. Sin despedidas, sabía el camino hacia el aparcamiento y no necesitaba decir adiós.

Justo en el instante en el que habría la puerta de mi coche, me pareció que alguien se dirigía hacía mi.

-Espera!!, te vas ya?

-Quien yo?

-Si claro. Te marchas ya?

-Si, la verdad es que me marchaba ya. Se me olvida firmar algún papel o documen…

-No no, soy Fernando. Encantado.

-Sergio, lo mismo digo.

Apretón de manos de cortesía, y revisión de arriba abajo por parte de ambos.

-Así que tu eres el famosos “niño” que se acaba de sacar el carnet de entrenador?

-Supongo que seré yo. Le dije con sonrisa asustada.

-Verás llevamos cierto tiempo observando el progreso de tu aprendizaje.

-Perdón?

-Si! Bueno alguien en la federación nos advirtió que tenían un alumno joven que podía interesarnos.

¡Ya esta!, aquí viene mi oportunidad pensé de inmediato. Que sea un amigo de Mourinho, que sea que sea…mi mente inventaba sin parar. En esos instantes, milésimas, me dio tiempo a verme trabajando al lado de los más grandes.

-Represento a la U.D San Sebastián de los Reyes.

Ah! Mierda pensé en un principio. Mantuve esa charla conmigo mismo, en la que mi cabeza me decía, que esperabas?? Y yo le contestaba, nada nada solo que ya me veía Valdebebas y claro, de primeras…pues es un bajón de calidad importante.

-Sergio?

-Si si perdona. Continúa.

-Te decía que represento a la U.D San Sebastián de los Reyes y estábamos interesados en que te incorporaras al cuadro técnico del club. Los informes de tus profesores son mas que buenos y no es la primera vez que trabajamos de esta manera.

-Me ofrecen un trabajo como entrenador?

-No exactamente. En un principio lo que queremos es que hagas el trabajo de segundo. Es un puesto que debemos cubrir, y nuestro actual entrenador esta de acuerdo en que seas tú el que le acompañe.

-Me halaga el interés. Y me gustaría pensar en…

-No hay problema. Por supuesto sabemos que no será la única oferta que tengas y tal vez quieras valorar las otras opciones. En estos momentos sé que es difícil decidir. Que te parece si mañana por la tarde hablamos y ya me cuentas que te parece nuestra idea?

-Perfecto. Aquí tienes mi número de teléfono. Mañana hablamos y vemos si se puede hacer todo.

-OK. Mañana hablamos. Ah! Y enhorabuena por el título.

-Gracias. Hasta mañana.

Confuso y a la vez alegre. Joder, la gente habla de mi bien a mis espaldas. A quien no le gusta eso?. Donde esta mi maldito móvil? Lo olvidé en el coche por las prisas…Otras ofertas dice…jajajaja. Ilusos…Aquí esta! Llamada perdida… + 311809851930. Esto que es? Una centralita? El prefijo me es familiar pero no tengo ni idea de quien puede ser.

Arranque el coche y partí para mi casa. Una oferta, no paraba de pensar. No es de entrenador, pero bueno, por algo habrá que empezar. Lo que no entiendo es esta sensación de intranquilidad. Si acabo de conseguir una oportunidad que puede ser interesante, no se quizás el café de antes que me ha alterado…subí la música y busque relajarme.

Lo que era incapaz de comprender era que lo que me tenía nervioso era aquel extraño número de teléfono.

QUERIA TRABAJAR CON MOURINHO !!!!!!!!!! JAJAJAJAJA

buena historia

Segundo entrenador…me dejarán tomar decisiones importantes o simplemente seré un títere de un tipo al que le importará más bien poco lo que tengo que decir. Aparqué el coche, dándole vueltas al asunto.

Al abrir la puerta de mi casa me di cuenta de que no habría nadie. Doble vuelta. Vaya! ahora que tenía ganas de hablar con alguien…bueno…bebo un poco de agua y me voy a dar una vuelta. A lo mejor encuentro la motivación a esta oferta. Eso de segundo entrenador…que difícil es esto. Si al menos hubiera venido el Madrid con esta misma oferta…me valía con el Atlético. Pero cuanto de buena es esta oferta? Y si no me llama nadie más? Tendría que buscar por mi cuenta y…por donde empiezo?

Salí de mi casa y me puse a andar sin rumbo fijo. Al menos sería un trabajo cerca de casa. Pero mi trabajo se vería siendo segundo? Cierto es que hoy el fútbol me ha demostrado que si se hacen bien las cosas se habla bien de ti. Pero claro destacar en una clase no es lo mismo que en la vida real. Por muchas clases prácticas y teóricas que haya tenido. Pero que hago pensando si aceptarla o no? Se me ha subido lo de “tendrás otras ofertas”? Si no tengo alternativas.

Mire el reloj. 20min de paseo y parecía que estaba convencido de saber que hacer. Diré sí a esta oferta. Al fin y al cabo tengo 26 años. Que más puedo pedir?

De repente algo invade mis pensamientos. Me tambalea mentalmente. Detengo mi caminar. La llamada esa? Quien sería? La conversación con aquel tipo hizo que me olvidara de ella, pero por contra sentía un alivio al volver a concentrar mis pensamientos sobre aquel número. A sí que esto era. Por esto notaba yo que no había resuelto mis inquietudes de hoy. Tengo que saber de donde viene esa llamada. Era un número raro, y si era alguien de una telefonía con noticias sobre cuanto dinero puedo llegar a ahorrarme si contrataba sus servicios? Seguramente, pero sé que hasta que no sepa de donde es, tranquilo no conseguiré quedarme. Para casa, internet solucionará mi duda.

Pare a comprar un refresco, hacía calor y aquel trago de agua en casa no consiguió calmar mi sed. Mi primer trago se vio interrumpido por una llamada a mi móvil…coño que me atraganto, pensé. Genial! El extraño número otra vez. No hacía falta ir a casa, la duda quedaría resuelta ahora mismo.

-Quién? (respondo así siempre que llama un número largo desde que recibí un mail diciendo que las telefónicas trucan las llamadas para cambiarte de compañía. Y la palabra sí, era la que se debía evitar a toda costa)

-Eh! Puto!

Perplejo. Una persona con un marcado acento extranjero se dirige a mi como eh puto?

-Quieeen?, pregunto pasmado.

-No sabes quién soy?, preguntó en inglés.

-No, lo siento. No se quien eres.

-Soy Luc!, increíble que no me recuerdes. Ya no te acuerdas de tus amigos holandeses?

Blanco. Con postura cheposa intentando que mi último trago de refresco no se me salga de la boca. Era Luc, mi jefe durante mi estancia en Holanda. Estuve trabajando allí un año, llegue para hacer unas prácticas, pero finalmente me quede una corta temporada, tras una propuesta por su parte para alagarlas un poco más.

-Si!, si que me acuerdo de ti, como olvidarte.

-Que tal todo? Sigues desempleado?

-Si, ya sabes como están las cosas por aquí.

-Por eso te llamo, para hablar de trabajo.

-Que?

En una mañana la vida me pone a prueba. Puedo pasar de tener decidido aceptar un inicio en el mundo del fútbol, o volver a mi oficina en Holanda, en donde por que no decirlo, fui muy feliz.

Editado Septiembre 10, 201212 años por Polichinela

Me gusta como empezo, veremos como sigue, abrazo.

Bueno, un buen comienzo, de pasar a jugar en el San Sebastián de los Reyes a entrenar en Holanda, y quién sabe a qué equipo entrenarás...

Te sigo. Saludos!

yo tmb te sigo esto tiene buena pinta , no te vayas a amsterdam que te perviertes

Sentado en el sofá de mi casa esperando una llamada de mi antiguo trabajo. Nervioso, con ganas de aclarar muchas de las dudas que me asaltaban.

Me dijo que llamaría después de comer. Es la una…les queda un cuarto de hora para terminar la hora de comida. Volver a Holanda era algo con lo que había soñado mucho tiempo. La situación de empleo es difícil y allí tenía independencia total, con un buen sueldo y totalmente acoplado a la ciudad. Por lo que una nueva proposición no me desagradaba del todo. Por contra estaba la posibilidad de empezar en el mundo del fútbol. Algo con lo que siempre soñé, pero la oportunidad que se me plantea no terminaba de satisfacerme. Decisiones… … … ….

-Luc?

-Sergio, que tal? Ya podemos hablar tranquilos.

-Estaba esperando ansioso tu llamada.

-Ya era hora de hablar, nos hemos tirado mucho tiempo escribiéndonos mails y hacia mucho que no nos escuchábamos.

-Si, si que es verdad.

-Bueno, no quiero andarme con rodeos, ya sabes lo ocupados que estamos aquí y seré claro. Tengo trabajo para ti.

-Vaya! Es una gran noticia siempre me ha apetecido volver. Estaba muy a gusto en la empresa y con todos vosotros.

-Que? En la empresa? No, no tenía pensado hablar acerca de eso. Creo que esto te va a hacer mucha más ilusión.

-Pues entonces tú dirás porque me tienes un poco desconcertado.

-La última vez que nos escribimos fue hace unos dos-tres meses. Entonces me comentaste que estabas a punto de concluir el curso de entrenador. Es cierto?

-Si, de hecho ya tengo el titulo. Pero aunque sé de que me hablas sigo sin seguirte del todo.

-Cuantas charlas de fútbol hemos tenido? La cantidad de partidos que vimos en el campo…

-Bufffff. Todos, los que jugamos como locales, y alguna visita cercana.

-Si si, la verdad es que te hiciste rápido un seguidor del equipo. Vivías los partidos como uno más. Que mal jugamos ese año…al menos estabas tu para calmarme JAJAJA, te acuerdas, todos eran unos paquetes para mi.

-Si, la verdad es que eres un hooligan cuando sales del trabajo.

-Bueno, que me voy del tema. No se si te hable algún día de mi amigo Mark?

-Me has hablado de tantas cosas que ya ni me acuerdo.

-Mark, el directivo que te dije que conocía.

-Mmm, algo recuerdo, por?

-Pues el otro día estuve con el. Hablando del equipo. Intentado que me contara algo que me hiciera ilusionar para esta temporada. Me comento que necesitaban un entrenador, que no encontraban el adecuado. Y les hable de ti.

-Yo? JAJAJAJA, no tengo nivel para entrenar al…

-JAJAJAJA, no te emociones. Necesitaban un entrenador joven, para el equipo juvenil. Recordé nuestros mails, y todas tus charlas que me dabas de fútbol sin parar. Yo soy seguidor del equipo desde que nací, y note que supiste sacar la esencia de lo que representaba este equipo. Lo que los aficionados sienten y quieren. Y pensé que hablarle de ti, de tus opiniones, quizás pudiera salir algo bueno de esto. Eres el único entrenador que conozco, que cumpla con lo que pueden pedir. Seguirás con tu sentimiento JAJAJAJA.

-No lo dudes. No me he perdido ningún partido de liga desde entonces. Soy un aficionado más, que se alegra y sufre. Últimamente sufro mucho, pero me imagino que sabes de lo que hablo.

-Sabía que la ciudad había calado hondo en ti. Y que con lo futbolero que eres…hicimos bien regalándote esa camiseta. Me la consiguió este amigo del que te hablo, Mark.

-Bien bien. Pero entenderás que esto es un poco abstracto. No puedo ni tan siquiera ilusionarme con la idea de hacerme con el equipo juvenil, ya que parece una utópica idea que salió de tu cabeza. Pero de ahí a que llegue a hacerse…

-No te preocupes, tu solo tienes que venir aquí. Ya sabes lo buen vendedor que soy, si tu quieres volver aquí, te puedo asegurar que tienes un 90% de posibilidades de hacerte con el cargo. Soy tu valedor. Sin una ayuda es difícil que encuentres algo, bueno pues yo te ofrezco esta posibilidad. Te ilusiona??

-Ni te imaginas las ganas que tengo de trabajar allí.

-Estupendo, cógete el primer vuelo disponible. No te preocupes por el dinero, corre de mi cuenta. Confío en ti.

-Muchas gracias Luc. Me tendrás mañana en la ciudad.

Lo primero que se me vino a la mente nada más colgar el teléfono…“Sin padrinos no vas a ningún lado”, bueno pues…aquí esta el mio.

Editado Septiembre 10, 201212 años por Polichinela

bueno que equipo es nos tienes qui nerviosos a todos ?

Aeropuerto de Schipol, 11:28h. Llegue con mi maleta de mano, sin el coñazo de facturar. Ya conocía este aeropuerto, sabía hacia donde ir. Hasta las 18:30h no vería a Luc, tenía mucho tiempo para malgastar. Pero aquí no. Amsterdam esta bien, pero no es aquí donde quiero estar. De modo que me dirigí a la estación de trenes de Schipol. Quería llegar cuanto antes al hotel, de modo que cogí el Fyra (tren de alta velocidad holandés) en media hora estaría en mi destino.

Precioso. La N naranja, símbolo de un gran banco holandés me recibía de nuevo. La estación central estaba preciosa. Las obras que en ella se realizaban cuando me despedí, estaban a punto de acabar. Lucía imponente. Ese olor de nuevo, ese viento frio, esas calles repletas de bicicletas. Mi viejo barrio seguía igual. “Comeré algo y haré tiempo”. La cita era a las 18:30h, en el restaurante Las Palmas.

Tranvía y un agradable paseo. El edificio de la KPN iluminado con sus leds creando formas en movimiento. El Erasmusbrug conectando el norte con el sur de la ciudad, y al fondo el imponente Euromaast. Maldita torre que malos momentos he pasado por mi vértigo en aquel ascensor. Cerca del primer edificio estaba la entrada al restaurtante.

Luc me esperaba en la puerta. Puntual, como la mayoría de los holandeses.

-Vamos, nos están esperando.

-Estoy algo nervioso.

-Tranquilo, solo tienes que hablar de fútbol con esta gente. Tu comenta todo aquello que me dijiste a mi en aquellas mañanas de partido.

-Hablaremos en inglés, te acordarás de que mi nivel de holandés no es el mejor, no he hablado desde que me fui de aquí. Pase poco más de un año en la ciudad, pero reconozco que se me ha olvidado mucho de lo que tanto me costó aprender.

-No hay problema, ellos saben que te defiendes en el idioma, pero hablaremos en inglés.

-A ver que les has contado a esta gente…

Entramos en el restaurante. Una decoración vistosa y singular. El metre nos indica que debemos ir al reservado. En una mesa amplia, dos hombres trajeados, estaban sentados. Fumando uno de ellos, con cara de intriga sobre la persona que venía a verles desde España.

-Sergio, este es Mark Koevermans, director comercial.

-Encantado.

-Y este es Martin van Geel, director técnico.

-Un placer.

Allí estaba ya. Dos directivos me examinarían para ver si lo que Luc, les había contado sobre mi era cierto. El miedo inicial fue desapareciendo poco a poco. A cada minuto que pasaba me veía con más confianza para convencer a aquellos tipos de que merecía trabajar para el Feyenoord de Rotterdam.

Salí del restaurante con un sentimiento de prudencia. Les habré gustado? No les vi convencidos al principio, pero si que me habían hecho miles de preguntas, como si quisieran seguir escuchándome.

Luc salió unos minutos después. Me dio un golpecito en el hombro y me dijo…

-Bien muchacho, les has gustado. Hay que mejorar en algunas cosas, como aprender holandés cuanto antes. Quieren notar ilusión por tu parte, que te integres para que no haya problemas externos. Yo te conozco bien, y les he dicho que viniste para tres meses de prácticas y acabaste quedándote un año, gracias en parte, a tu trabajo y aclimatamiento al país, a la ciudad y a la cultura de aquí. En cuanto al plano deportivo lo que les has contado les ha convencido. Vamos a tomar algo para celebrarlo? A ti te atrae la oferta no?

-Es la mejor noticia que podía tener. Vamos a por una cerveza…o dos.

-No te excedas, que mañana por la mañana tienes que estar en la ciudad deportiva muy pronto. Yo no podré estar pero creo que te las apañarás bien solo. De todos modos si pasase algo, llámame.

-No creo que haga falta. Ya has hecho mucho por mí.

El despertador me levanta a las 7:00. Ni pizca de sueño, apenas había logrado dormir pero las ganas por ver las instalaciones y mi futuro lugar de trabajo, me tenían en un estado de excitación máxima. Una ducha para relajarme y un desayuno de campeonato. Hay que coger fuerzas.

“Debe ser este edificio”. El escudo del Feyenoord en grande, daba la bienvenida a los visitantes. Al fondo se veían los campos de entrenamiento. “Unas instalaciones muy buenas”, pensé para mi. En la entrada un mostrador pequeño, las personas que se paseaban por allí con la calma del que acaba de entrar a trabajar, me miraban extrañadas de mi presencia. De repente un tipo alto y calvo se dirigió hacia mi, con una sonrisa amable.

-Seryo?

-Si soy yo.

-Sígueme, te llevaré a la sala de reuniones.

Era un edificio moderno por dentro, con estancias divididas por cristales, se podía ver todo. Andamos por un largo pasillo, y al fondo del mismo pude ver a Martin sentado, hablando con una persona alta, vestía chándal y a juzgar por sus aspavientos no parecía muy contento.

Al llegar a la puerta de aquella sala, Martin me indicó que entrara con la mano. La persona que allí estaba con él se volteo para mirarme. Coño! Era el mismísimo Ronald Koeman. Que sin quitarme la mirada parecía estar matándome en su mente.

-Ronald, este es Sergio, el nuevo entrenador de las categorías inferiores de nuestro equipo.

Segundos de silencio. Alargue mi mano para saludar a Ronald, pero este no correspondió tal gesto. Cogió su chaqueta de chándal de la silla enfrente de Martin y se marchó sin decir una palabra. Algo me decía que este señor no quiere que esté aquí.

-Siéntate Sergio, no le hagas mucho caso. No eras tu la persona que el esperaba que ocupara tu puesto. Tranquilo, se le pasará.

Me senté asustado, mirando como Ronald Koeman, se marchaba con paso veloz del edificio.

-Bueno, revísatelo si quieres, pero aquí tienes tu contrato.

Adiós miedos…ya tendré tiempo de que me explique sus inquietudes el entrenador del primer equipo.

Editado Septiembre 10, 201212 años por Polichinela

PRIMER DÍA DE ENTRENAMIENTO.

Primer día de entrenamiento. Me levanto con los nervios típicos. Esperando que la acogida sea lo más cálida posible. Son un grupo de chavales, todos ellos menores que yo. Espero que mis ideas puedan calar pronto y sea del agrado de los chicos.

Aun viviendo en el hotel, pues las cosas han ocurrido muy rápido y no he tenido tiempo de ver ninguna casa. En el club me dijeron que se encargarían de todo. Es lo que me falta para estar del todo a gusto. Cojo mi vehículo prestado y me dirijo a los campos de entrenamiento. El trayecto es corto, pero voy repasando lo que voy a decir, y el entrenamiento que vamos a hacer hoy.

La charla parece haber sido un éxito. Este es un equipo que trabaja mucho la cantera, y la oportunidad de jugar en el primer equipo, permite a los jóvenes estar con un estado de motivación máximo en cada momento.

No tardo en darme cuenta de que a mis órdenes tengo jugadores que en breves formarán parte del primer equipo. Los que más despuntan.

Kevin Gomez Nieto. Español, lateral derecho.

Lucas Woudenberg. Holandés, leteral izquierdo.

Terence Kongolo. Holandés, defensa central.

Tony Trindade de Vilhena. Holandés, mediapunta. El que más me agrada.

Joey Sleegers. Holandés, mediapunta.

Jean Paul Böetius. Holandés, extremo derecho.

Elvis Manu. Holandés, delantero centro.

Después de 90 minutos, me quedo con una buena sensación. Aquí puedo trabajar tranquilo. Y la base del equipo parece sólida. Este será un gran año, ya lo estoy viendo.