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Bueno, está mas que claro que el reto de sustituir a Sir Alex es un arma de doble filo. La presión de los hinchas va a sentirse a flor de piel, y suena difícil el poder alcanzar un techo mas alto de lo que ya ha logrado el escocés, sin embargo creo que Larsson puede darnos la total y definitiva supremacía a nivel europeo, para convertirnos en el líder indiscutido del continente. Veremos como se le da al sueco a cargo de una institución con tanta historia (Que equipazo aquel de finales de los 90, por favor)

Por acá me tendrás! Abrazo :)

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@Mapashito

Bienvenido a la historia, compañero. Un placer tenerte por aquí.

Como dices, el reto de sustituir a Ferguson es ilusionante a la par que difícil. Nos enfrentamos a una transición complicada y visto lo visto el escocés no nos ha dejado la mejor base para hacerla más llevadera. Frente a equipos muy poderosos como Chelsea o Manchester City y con una plantilla inferior, no parece el mejor momento para afrontar un cambio tan grande, pero hemos de intentar hacerlo bien.

Sin duda que Fergie habrá aleccionado bien a muchos de los jugadores que han pasado por sus manos. Ya se puede ver en este final de temporada del equipo con Giggs, Butt, Scholes y Phil Neville se han hecho cargo del equipo. No tengo ninguna duda de que alguno de ellos acabará sentado en el banquillo de Old Trafford sin tratarse de un entrenador interino. Tal vez después de Van Gaal, principal candidato según los rumores a llevar el equipo la próxima temporada.

El killer noruego fue uno de los candidatos que bajaré a la hora de pensar en el nuevo entrenador. Además se habla muy bien de él en sus primeros pasos como entrenador, aunque en la vida real su desembarco en la Premier League no haya sido muy existoso tras el descenso del Cardiff City.

Elegí a Larsson por tratarse de un jugador que me encantaba, pero sobre todo tras leer varias declaraciones de Sir Alex cuando lo tuvo a su disposición. Hablaba muy bien de él, de su inteligencia, de su sacrificio. Decía que era un ejemplo para todos y que hubiese dado cualquier cosa por poder retenerlo. Me pareció una buena idea, aunque reconozco que otras muchas hubiesen sido más realistas.

Muchas gracias por tus palabras. A ver qué tal nos va.

@Tomas Morrongiello

Describes muy bien lo que será esta nueva etapa en el club. Tendremos mucha presión y en realidad será casi imposible superar lo hecho por nuestro predecesor. No es una situación ideal para coger un equipo, ciertamente.

Por ahora me conformo con intentar luchar con los equipos poderosos a los que nos tendremos que enfrentar en Inglaterra y lograr que la transición sea lo menos traumática posible.

Bienvenido!

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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (I)
EL SUEÑO DE UN EMPAQUETADOR DE FRUTA
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Manchester, 10 de Junio

La llegada de Larsson al Manchester United supone una nueva era para una afición que en el último cuarto de siglo solo ha conocido a un nombre sentado en su banquillo.
Pese a que Henrik Larsson fue un jugador reconocido mundialmente, trataremos de contar su historia para conocer un poco mejor cómo es el sucesor de Sir Alex Ferguson.
En un Especial Henrik Larsson que contará con seis partes, repasamos toda la carrera como futbolista del nuevo entrenador del Manchester United, además de sus primeros pasos en el mundo de los banquillos.
 
En este primer volumen, hablamos de la infancia de Larsson, su primer equipo, su debut con Suecia en una Copa del Mundo y el salto a la Eredivisie.
 

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El romance de Henrik Larsson con la pelota empieza desde muy pequeño. A los 16 meses de edad, su padre Francisco Rocha, de origen caboverdiano, le regala su primer balón. Pese a los problemas del pequeño Henkie para encontrar compañeros de juego, él se convierte en un gran aficionado al fútbol, hasta el punto de seguir la Premier League por televisión junto a su padre, quien también le regala un vídeo de Pelé, el cuál supone una gran inspiración para el delantero sueco según revelaría más adelante el propio jugador.
 
A los seis años de edad, Henrik empieza a jugar en un equipo de una liga menor llamado Högaborg. Larsson compagina los estudios con el fútbol hasta que a los 18 años termina la escuela y pasa a trabajar como empaquetador de frutas, a la vez que continúa jugando al fútbol en el mismo club, aunque ya con una carrera semi-profesional.
Tras cuatro años en el primer equipo del Högaborg en los que Larsson anota 23 goles en 74 partidos, el Helsingorg de la Segunda División sueca se fija en él y lo acaba fichando en 1992.
En su primer año como profesional Larsson anota 34 goles y el Helsinborg asciende de categoría. Ya en Primera División, Henrik anota 16 goles que le sirven a su equipo para lograr una posición cómoda en mitad de la tabla.
 
Su buen rendimiento llama la atención del seleccionador sueco Tommy Svensson que le convoca para un partido de clasificación frente a Finlandia. Larsson responde a la confianza del técnico y anota en su debut el primer gol de los 37 que terminaría marcando con su selección en 106 partidos.
Finalmente, Henrik acaba acudiendo a la Copa del Mundo celebrada en Estados Unidos, donde Suecia completa un magnífico torneo terminando en 3ª posición. Larsson alterna partidos de suplente con algunos de titular y termina anotando su primer gol en un Mundial frente a Bulgaria en la pelea por el tercer y cuarto puesto.
A partir de este torneo, sería titular habitual con la selección a pesar de no conseguir la clasificación para la Eurocopa de Inglaterra en 1996 ni para el Mundial de Francia en 1998.
 
A nivel de club, tras dos magníficos años en el Helsinborg, el ariete sueco ficha por el Feyenoord en 1993. Los comienzos son duros y a Larsson le cuesta adaptarse. Juega 27 partidos en su primera temporada en los que únicamente anota 6 goles.
Pese a mejorar sus registros goleadores en las temporada siguientes, la inestabilidad reina en el club y los cambios de entrenador son continúos. Por ello, y pese a ganar dos veces la Copa Holandesa, Larsson decide marcharse, no sin polémica. La petición del sueco no fue bien acatada por el Feyenoord y el asunto terminó en los juzgados a raíz de una cláusula del contrato del jugador que no estaba clara. Finalmente, Larsson gana el caso y ficha por el Celtic.
 
Es 1997 y Larsson acaba de tomar la mejor decisión de su carrera deportiva.

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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (II)
UNA PIERNA ROTA RECUPERADA A BASE DE GOLES
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Manchester, 10 de Junio

Los comienzos no fueron los mejores para Larsson en Escocia. En su debut, el Celtic perdía debido a un grave error suyo en un pase que dejaba a un jugador rival frente al portero. Unos días más tarde, en un partido europeo, Larsson marcaba un gol en su propia porteria. Lejos de venirse abajo, a partir de ese momento Henrik empezó a hacer goles hasta acabar con 18 en su primera temporada siendo el máximo goleador del club esa campaña, en la que además se proclamó campeón de Liga y Copa.
 
En su segundo año en Escocia, Larsson anota 38 goles para terminar como máximo goleador de la Premiership. Además de ese galardón, también es premiado con el trofeo a Jugador del Año y Futbolista Sueco del Año. Sin embargo, no fue un buen año a nivel colectivo ya que el Celtic no conseguía repetir título, y éste caía en las manos del Glasgow Rangers.
Llegaba su tercera temporada en el Celtic, una campaña que Larsson no iba a olvidar nunca. El delantero sueco empezó como un tiro y anotó ocho goles en los nueve primeros partidos de Liga. Parecía claro que iba a superar todos sus récords anotadores, pero en un encuentro frente al Olympique de Lyon Larsson se fracturaba la pierna. La carrera de Henrik corría serio peligro, pero finalmente tras una dura recuperación pudo regresar. El ariete del Celtic pasó ocho meses de baja, y no volvería a jugar hasta el último partido de la temporada.
 

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Tras recuperarse, Larsson asistió a la Eurocopa del 2000 en Bélgica y Holanda, pero Suecia no pasó de primera ronda. Pese a ello, el ariete mostró un buen nivel y anotó un gol en la derrota de su equipo frente a Italia.
 
De vuelta a su club y después de una lesión tan grave y un período de baja tan extenso, muchos dudaban de si Larsson podría volver a ser el mismo. Las dudas tuvieron una rápida respuesta. La llegada de Martin O'Neill en el verano del 2000 cambiaría la vida de Henrik y la irregular trayectoria del Celtic en los últimos años.
El delantero sueco no solo mantuvo el nivel previo a la lesión sino que lo superó completando así su temporada más exitosa con el cuadro escocés. Larsson anotaría 35 goles en 38 partidos de Liga siendo el máximo goleador y consiguiendo además la Bota de Oro europea, a pesar de que sus goles contaban con peor coeficiente frente a los de otras ligas más potentes. Sumando todas las competiciones, "Henkie" terminaría marcando la impresionante cifra de 53 goles.
A nivel colectivo, Larsson consiguió levantar el triplete con el Celtic al hacerse con la Copa de la Liga, la Copa de Escocia y la Premier League Escocesa. Obtuvo múltitud de trofeos a nivel personal y colectivo.
 
Al termino de esa temporada, Henrik Larsson ya es considerado uno de los mejores delanteros del mundo.

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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (III)
UNA FINAL EUROPEA Y EL FICHAJE POR EL F.C.BARCELONA
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Manchester, 10 de Junio

Tras una temporada histórica tanto en lo personal como a nivel colectivo, el Celtic y Larsson afrontaban la temporada 2001-2002 con la intención de revalidar el título de Liga y hacer un buen papel en Champions League. Se podría decir que consiguieron ambas cosas, ya que pese a caer en primera ronda, el Celtic cerró la mejor participación en fase de grupos de un equipo escocés al conseguir 9 puntos. Más tarde caerían contra el Valencia en la Copa de la UEFA.
En Escocia, el Celtic conseguía su segundo título de Liga consecutivo ayudado por los 29 goles de Larsson, de nuevo máximo goleador del torneo.
 
Tras terminar la campaña, "Henkie" disputó el Mundial de Korea y Japón con Suecia anotando tres goles, pero los suecos caían en 1/8 de Final contra Senegal, la gran sorpresa del torneo.
Después de la decepción que supuso la eliminación, Larsson anunciaba su renuncia a la Selección sueca, una noticia que causó consternación en un país que veía como su ídolo decía adiós demasiado pronto. Más adelante, el ariete sueco accedería a volver a vestirse la camiseta amarilla para disputar la Eurocopa de Portugal en 2004.
 
La temporada 2002-2003 sería muy especial para el Celtic ya que jugarían su primera final europea desde 1970. Tras un magnífico torneo en el que derrotaron a grandes equipos -entre ellos el Liverpool-, se plantaron en la final donde se enfrentarían al Porto que dirigía por aquel entonces un joven entrenador portugués llamado José Mourinho.
El Porto se adelantó en dos ocasiones, y Larsson con sendos cabezazos conseguía igualar el partido, pero en la prórroga un tanto del equipo portugués les daba el título. Henrik fue elegido como MVP de la final, pero eso no fue consuelo para él que describe ese momento como el más triste de su carrera junto a la grave lesión que había sufrido años atrás.
 

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La tristeza no se quedó ahí, ya que el Celtic también perdería la Liga en favor del Rangers por un solo gol de diferencia en el cómputo general. Una vez más, el ariete sueco fue el máximo goleador de la Premiership escocesa.
Al término de esa temporada, Larsson era elegido como el mejor futbolista sueco de los últimos 50 años.
 
En su última temporada en Escocia, el Celtic consiguió ganar los cinco derbis frente al Glasgow Rangers. Además, volvieron a a tener una meritoria participación en la Copa de la UEFA llegando hasta los 1/4 de Final derrotando por el camino al Barcelona de Frank Rijkaard. El momento de decir adiós había llegado.
 
En sus siete años en el Celtic, Larsson ganó cuatro títulos de Liga, dos Copas de Escocia y dos Copas de la Liga. Además, fue el máximo goleador en cinco ocasiones anotando 242 goles en 315 partidos en el club escocés siendo 158 de ellos en Liga, conviertiéndose así en el máximo realizador de la historia de la competición, récord de sería superado en 2009 por Kris Boyd.
 
Tras anunciar su marcha del Celtic, Larsson fue a disputar la Eurocopa de Portugal con Suecia, en la que anotó 3 goles en 4 partidos permitiendo a su selección llegar hasta los 1/4 de Final donde sería eliminada en penaltis por Holanda. Su gol frente a Bulgaria, un soberbio cabezazo, fue elegido mejor tanto del torneo.
 
Era 2004 y Larsson abandonaba el club de su vida para fichar por el FC Barcelona, donde acabaría firmando una de las páginas más brillantes e importantes de la historia del club catalán.
 
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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (IV)
LESIÓN DE RODILLA Y HÉROE EN PARÍS
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Manchester, 10 de Junio

Larsson aterrizaba en un Barcelona que había sido subcampeón el año anterior y que se había reforzado con el camerunés Samuel Eto'o y el francés Ludovic Giuly, dos hombres que con Ronaldinho estaban destinados a ocupar las tres plazas del ataque azulgrana. Sin embargo, en los comienzos de la temporada "Henkie" jugó bastante y anotó 3 goles en 12 partidos de Liga, además de un tanto en Champions League, precisamente en Celtic Park ante su ex-equipo. "Fue muy díficil para mi, no podía celebrar el gol porque he vivido grandes momentos aquí."
Días más tarde, Larsson sufría la segunda lesión grave de su carrera en un partido frente al Real Madrid, en el que se rompió el ligamento cruzado anterior y el menisco de la rodilla izquierda. Años más tarde, el propio jugador confesó que pensó en la retirada ya que no sabía si a su edad valía la pena el esfuerzo que convellaría la recuperación.
A pesar de haberse perdido la mayor parte de la temporada, el sueco ya era un ídolo para la afición y el Barça decidió ampliarle el contrato un año más.
 
En su segunda campaña en Barcelona, Larsson suma 15 goles entre todas las competiciones, pero sin duda, su partido más importante fue el de la final de la Copa de Europa en París. Con el equipo azulgrana por debajo del marcador ante el Arsenal, el delantero sueco saltó al campo en el minuto 62' y cambió el partido hasta el punto de dar las dos asistencias de gol para que el Barcelona remontase el partido y se proclamase campeón de Europa por segunda vez en su historia.
El delantero del Arsenal Thierry Henry dijo al terminar el partido que "Todo el mundo habla siempre de Ronaldinho, Eto'o, Giuly y todo eso, pero hoy no los he visto, hoy he visto a Henrik Larsson. Entró al campo y cambió el partido, es él quien lo ha decidido."
 

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Ese fue el último partido de Larsson en can Barça, ya que rechazó la ampliación de su contrato para terminar su carrera en su país natal. Sus dos años en Barcelona le habían servido para ganar dos Ligas, una Champions League y un hueco en el corazón de todos los aficionados blaugranas.
 
Pero antes de eso, Suecia debía afrontar el Mundial de Alemania y Larsson volvería a ser importante. "Henkie" marcó en el descuento del último partido de la fase de grupos ante Inglaterra, consiguiendo así la clasificación y convirtiéndose en el sexto jugador que anotaba en tres mundiales diferentes. En 1/8 de Final frente Alemania, el delantero sueco fallaría un penalti y su selección caería por 2-0.
Después de esto, Larsson se retiraba internacionalmente de la selección sueca por segunda vez. Sin embargo, volvería en 2008 para afrontar la Eurocopa de Austria y Suiza convencido por el seleccionador Lars Lagerbäck.
 
Tras ganar la Champions League, la carrera de Larsson daba sus últimos coletazos.
 
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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (V)
VUELTA A SUECIA Y CESIÓN AL MANCHESTER UNITED
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Manchester, 10 de Junio

Tras la eliminación de la Copa del Mundo, el 24 de Junio de 2006 Larsson se unía a su antiguo club, el Helsinborg, haciendo su debut unos días más tarde en un partido de la Copa de Suecia, título que terminarían ganando al final de la temporada además de una meritoria cuarta plaza que le daba acceso al club a la Copa de la UEFA.
 
Poco después del final de la Liga Sueca, “Henkie” tomaría una decisión clave para estar hoy en el banquillo del Manchester United. El killer sueco firmaba un contrato de cesión por 2 meses con los red devils, un período corto de tiempo pero muy intenso como contaremos a continuación.
Larsson consiguió anotar en su debut contra el Aston Villa en un encuentro de la FA Cup a los siete minutos de haber comenzado el encuentro. Más tarde anotaría también dos goles en Premier League.
 
Cuando el contrato de cesión llegó a su fin, sir Alex Ferguson le pidió que se quedara en el equipo, pero el killer sueco le había prometido a su familia y a su club que volvería a su país natal una vez finalizada la cesión. A pesar de ello, el preparador escocés tuvo palabras de elogio para el jugador: “Ha sido fantástico para nosotros, su profesionalismo, su actitud, todo lo que ha hecho ha sido excelente. Nos encantaría que se quedase, pero ha hecho una promesa y debemos respetar eso, pero habría hecho cualquier cosa para mantenerlo.
 
Unos días después de terminar el contrato, Larsson volvió a Old Trafford para un partido de homenaje como capitán de un XI Europeo. Al ser sustituido, el estadio entero se levantó para despedirle con una ovación atronadora.
 
Dos meses más tarde, el Manchester United se proclamaría campeón de la Premier League, y aunque Larsson no había cumplido la cuota requerida de 10 partidos de liga para tener derecho a la medalla de campeón, el club le pidió a la Premier League un permiso especial que finalmente la Federación Inglesa de Fútbol aceptó considerando a Henrik como parte del equipo campeón.
 
De esta manera terminaba una bonita historia que, años más tarde, le abre las puertas del banquillo de uno de los clubs más importantes del mundo.
 

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Después de dejar Inglaterra, Larsson reanudó su carrera en Helsinborg haciendo una gran campaña en la Copa de la UEFA, en la que cayeron en Octavos de Final contra el PSV con el delantero sueco anotando varios goles.
 
Al año siguiente, sus 14 goles en Liga –mejor marca desde su regreso a Suecia- ayudó al equipo para volver a clasificarse para la Europa League, competición que sustituía a la anterior Copa de la UEFA.
 
Tras iniciar la que iba a ser su cuarta temporada en Suecia tras su regreso, Larsson sufrió una lesión de cierta gravedad, lo que unido al reciente fallecimiento de su hermano le llevó a anunciar su retirada.
 
Era un 20 de Octubre de 2009, y ahí empezaba su carrera como entrenador.
 
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Manchester United || La vida de Henrik Larsson (VI)
UN COMIENZO PROMETEDOR EN LOS BANQUILLOS
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Manchester, 10 de Junio

Larsson dejó claro su intención de ejercer de entrenador una vez que su carrera como jugador llegó a su fin, expresando también su interés de regresar algún día al Celtic en calidad de técnico.
Sin embargo, el destino le tenía preparado un comienzo más humilde. En Diciembre de 2009 Larsson era nombrado entrenador del Landskrona, un club de la Segunda División Sueca. La noticia fue recibida con sentimientos encontrados en su nuevo club, ya que el Helsinborg, último equipo del sueco como jugador, eran sus tradicionales rivales.
 
En su primer año como mánager, Larsson comienza bien la temporada con un 4-3-3 muy agresivo y ofensivo logrando varias victorias consecutivas que le colocan en la parte alta de la clasificación peleando por el ascenso hasta final de temporada. Sin embargo, un mal final de campaña acaba con el equipo en 5ª posición. A pesar de ello, la junta directiva estaba encantada con la labor del novel mister y le renueva por una temporada más.
 
Tras varios fichajes ilusionantes, el Landskrona empieza la Liga con aspiraciones claras de ascenso. Las cosas no salen como habían pensado y el equipo acaba peleando por no perder la categoría. Era la peor temporada en años. La crisis fue tal que la directiva incluso le pidió a Larsson que formase parte del equipo como jugador, pero él no se sentía preparado físicamente. Tras la incorporación en el mercado invernal del portero Ivo Vazgec la cosa mejora y el club termina la campaña en 10ª posición, evitando el descenso, lo que le vale a “Henkie” para ganarse la renovación por un año más.
 
La mejoría en su última temporada no sería suficiente para alcanzar el play-off de ascenso finalizando en 6ª posición. Tras el último partido de Liga, Larsson anunciaba que dejaba el cargo.
 
Un año y medio más tarde llega la oportunidad de su vida. Con una carrera espléndida como futbolista y un comienzo prometedor como entrenador, el Manchester United llama a su puerta para uno de los retos más complicados a lo que podía enfrentarse. El sueco, un hombre de carácter, no se amilana. Old Trafford tiene nuevo jefe.

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Y NO TE OLVIDES DE LARSSON

Larsson era un delantero sin gilipolleces. Ante todo, metía goles. Forjado en una escuela de anotadores por instinto y minifundistas de área, a caballo entre los 80 y los 90, Larsson siempre trajo buenos números a la mesa de los clubes en los que estuvo. Sin embargo, la comparación con arietes como Inzaghi o Raúl es imperfecta cuando constatas su repertorio. El sueco no irrumpía, al modo de Ronaldo Nazario, solo para meter un gol cuando parecía que ni siquiera estaba jugando el partido, ni tampoco era un rematador de monocultivo. Antes bien, trabajaba el partido correteando con inteligencia. Abría espacios, tiraba desmarques, arrastraba centrales con su figura flacucha. Y no solo anotaba goles sino que además pasaba, y pasaba realmente bien, más como facilitador que como asistente. La noche de París lo atestigua. Larsson siempre fue un “siete” aventajado porque dominaba todas las labores del área, las bonitas y las feas, las del gol y las que lindan con él.

Debió llamarse Henrik Rocha, en virtud al apellido caboverdiano de su padre. Pero la tez morena del joven Larsson precisaba del apellido materno para hacerle parecer más sueco en un país donde las horas de sol descuentan algo de tolerancia. En Suecia Henrik vestía unas rastas largas y alegres, un atuendo pintoresco que le acompañaría hasta sus tiempos en Escocia. Allí llega en 1997 procedente del Feyenoord y no se rapa el pelo hasta en el otoño de 2000, cuando para la grada verde y blanca Henke ya es un héroe vikingo melenudo, un escandinavo carismático y letal en tierras de William Wallace. Siete temporadas en la feudal liga escocesa dejan un saldo de 221 partidos y 174 goles, cuatro ligas, dos copas, dos copas de la Liga y un brillante subcampeonato de UEFA ante el Oporto de Mourinho en Sevilla. Los años de juventud de Larsson se consumieron felizmente en tardes de fútbol frenético en las Islas y duelos soldadescos contra el Rangers, vecinos protestantes de la ciudad de Glasgow. Si tu prioridad no es sobar el brillo de las estrellas ni de las mejores ligas, Escocia puede ser una aventura fantástica.

Pero el Celtic no sería el único equipo británico para el que jugaría Larsson. En 2007 fichó por sorpresa por el Manchester United cuando ya rumiaba en Suecia su retirada inminente. Firma con Ferguson un contrato circunstancial de tres meses, una estancia a préstamo aprovechando el parón invernal en la liga nórdica. ¿Excursión turística para abrillantar la hoja de servicios? Nada de eso. Larsson juega 13 partidos con la camiseta de los diablos rojos y anota tres goles, incluido el tanto frente al Aston Villa en la FA Cup el mismo día de su debut. Ayuda al Manchester en todas las competiciones, tanto domésticas como continentales. Y allí todo el mundo queda maravillado con su trabajo, en una estancia corta pero dichosa. Es la guinda de una carrera intensa y goleadora, cuyo eje terminal, antes de Inglaterra, recoge con detalle sus dos años en Barcelona. Que fueron memorables.

Le bastaron 15 goles y 54 partidos para que el barcelonismo lo adore en pasado, presente y futuro. ¿Cómo lo consigue? Hay un hito particular que lo explica en gran parte, pero es una historia de intangibles.

Llegó gratis, como las mejores cosas en la vida. Se estrenó frente al Sevilla el 12 de septiembre de 2004 en el Camp Nou anotando el dos a cero definitivo. Marcaría algunos goles más desde su rol de delantero suplente, tanto en Liga como en Europa, a veces titular pero siempre a la zaga de Eto’o, Giuly y Ronaldinho. Sin embargo, el 20 de noviembre se rompió el ligamento cruzado frente al Madrid y el sueco causó baja el resto de la temporada. Sus 33 años cumplidos precipitaron el diagnóstico adverso de los más pesimistas, que pronosticaron que no volvería al fútbol con garantías. Pero el tiempo los equivocó. Larsson volvió justo para el último partido de Liga en casa, un encuentro intrascendente ante el Villareal con el campeonato ya ganado. Sale en el minuto 79 sustituyendo a Ludovic Giuly y la grada le aplaude como si fuera Abidal burlando a la muerte con la cuarta Champions entre las manos. De algún modo, Larsson encandila al público. Se nota en septiembre y en mayo. Callado y eficaz, aprovecha su estancia en Barcelona como una oportunidad en las postrimerías de su carrera. El día de los festejos por el título liguero es mucho más coreado que gran parte de sus compañeros, manteado incluso, siendo él solo un recién llegado con una participación bastante escueta hasta la fecha, apenas media docena de partidos ante su público. La grave lesión superada le gana cariños, es cierto, pero aquel sueco inoxidable, por alguna razón, arrastra afectos extraordinarios.

Al año siguiente se consagra de blaugrana. Larsson consigue cosas que la rodilla le negó el curso anterior. No marca un gran número de goles, 11 en todas las competiciones, pero se asienta como pieza clave en el ataque culé, habitual sexto hombre y ese primer cambio que solía protagonizar junto a Iniesta, que jugaba todos los partidos en la segunda mitad. Adicionalmente, Henke desempeñó un papel fundamental cuando Eto’o se fue a la Copa de África en enero, supliendo la abundante aportación goleadora del camerunés. A final del curso el equipo revalida el título de liga y aguarda con gran expectación el reto de la final de Champions, inédito en más de diez años para el club. Larsson no será titular en París, pero acabará jugando un papel tan importante como el deKoeman en la noche de Wembley de 1992. Y sin meter un gol.

Llovía con fuerza en el Stade de France aquella noche del 17 de mayo, pero para el Barcelona el chaparrón era otro. Sol Campbell ha adelantado al Arsenal en la primera parte tras cabecear a placer una falta de seda botada por Henry. Ahora, en la segunda mitad, los culés buscan con urgencia el empate. Valdés está salvando los muebles de un Barça que no parece poder con los gunners pese a que los ingleses están con diez hombres desde el minuto 21. A pesar de las acometidas del equipo de Wenger, Rijkaard no va a dudar en emplear toda su fuerza de ataque. Sus cambios ganarán el partido bajo una dosis considerable de riesgo. Edmilson dejará su puesto a Iniesta en el descanso, una sustitución habitual pero que no solía involucrar al mediocampista de cierre; en lo que resta de partido Andrés jugará en esa posición. Y los dos siguientes cambios son aun más decisivos. Rijkaard gana carril derecho quitando a Oleguer y poniendo a Juliano Belletti en el 72. Además, sienta a Van Bommel y pone a Henrik Larsson, que acechará portería jugando con Ronaldinho a la espalda. Son cuatro delanteros arriba más todo lo que se incorpore desde zona ancha y los costados.

En efecto, las incorporaciones electrifican el partido. Larsson da un recital posicional habilitando a Eto’o en una triangulación portentosa que viene de Iniesta y supone el empate, así como luego dándole a Belletti la asistencia de gol en el tanto de la victoria, otra combinación profunda y oportuna del sueco desde un costado, impropia de un simple rematador. El 2-1 se impone como marcador final y los culés ganan el partido con tremenda incertidumbre. Lo sucedido en París, esa remontada corajuda y fortuita, es un milagro geométrico en una situación límite que tiene un principal culpable. Henry no especula al señalarlo cuando acaba el partido: Larsson ha volteado el encuentro, nada menos que una final de Champions. Sin anotar ninguno de los dos goles posibilita la recuperación de una situación de completo jaque, con el peso histórico en las espaldas del Barcelona, clase media en Europa, la esquiva segunda “orejona” para el club de Joan Gamper. Esa noche Larsson se gana su hueco en el panteón blaugrana, artífice, nada menos, de la vuelta a la élite continental de un equipo con una nostalgia insoportable de Cruyff.

Tanto lo quieren, también, en las Islas. En 2006 la Reina Isabel II accedió bajo clamor popular a otorgarle la medalla de la Orden del Imperio Británico por sus méritos deportivos. Sobra recalcar el extraordinario peso de esta distinción, normalmente destinado a figuras británicas. Únase a este hito la Bota de Oro ganada en 2001, que lo acreditó como mejor goleador del continente con 35 dianas. Se consagraba así el olfato de uno de los grandes delanteros de los últimos 20 años, goleador fino como un juvenil hasta el mismísimo día de su retirada, esa flacura felina de la escuela holandesa. No muere con él la cantera de arietes clásicos pero sí queda a las claras la rareza actual de su estirpe, goleadores sin prosopopeya, rematadores de fundamento y genio espontáneo rodeados de talentosos impostores, extremos vitaminados, falsos nueves de turno o centrocampistas reconvertidos en llegadores. Se retiró Larsson definitivamente en 2009 cercano a la cuarentena y se acabó un poco el fútbol de los artesanos, cierto como un oficio de otro tiempo. Actor de reparto básico en el Barça ganador de Rijkaard, no se deberá olvidar el nombre del mejor sueco de la historia, héroe de París pero ajeno a su estrella y a las pasiones provocadas: “No sé por qué soy uno de los favoritos”.

Chris Charles.
*Texto escrito por Carlos Zúmer para Jot Down.

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Te quedaste a gusto con el serial Larsson no??? :biggreen

Magnífica serie de artículos esta con la que "resumiste" la carrera del, probablemente, mejor jugador sueco de la historia. A Ibrahimovic aún le queda mucho y esta claro que son polos totalmente opuestos, sobretodo en lo que a las sensaciones que han dejado después de pasar por cada uno de sus muchos equipos se refiere :biggreen.

Después de leerme todo este serial no me queda ninguna duda de que Henrik Larsson es el entrenador ideal para este nuevo proyecto que arranca en Old Trafford. Un proyecto que así de primeras promete ser emocionante y en el que esperemos que le vaya todo bien al sueco desde el inicio porque a pesar de estar apadrinado por Fergie ya sabemos que en la directiva los hilos se mueven de otra manera e igual alguno de los jefazos hubiera apostado por alguien más experimentado. Ojalá y levante de nuevo una Champions League.

Un saludo!

Qué lagrimilla provocaste con este especial Larsson compañero. Qué jugador tan increible y qué ejemplifica a la perfección lo que es para mí un jugador ideal de fútbol: individualmente talentoso o que saca máximo provecho de sus cualidades, siempre concentrado y dedicado en los esfuerzos, ambicioso, con la palabra EQUIPO grabada a fuego..Larsson fue de esos jugadores tipo Maldini, Raúl, Zanetti o para buscar uno en activo, Xabi Alonso, que siempre querría en mi equipo, por que son sinceros, son verdaderos y su fútbol es tan transparente y eficaz, tan cargado de lo que es el honor sobre un terreno de juego, que es imposible no quererlos.

Menudo reto para el gran sueco el banquillo de Old Trafford. Ansioso estoy por conocer qué decisiones tomará a partir de ahora. Seguirá con el 4-3-3 pese a la duda que genera ello para colocar a Rooney-VP en el mismo once? Explotará Chicharito bajo el amparo de un maestro del área chica?

Estaremos atentos!

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