RIVERA RESCATA UN PUNTO EN UN PARTIDO HORRIBLE Puede estar contento el West Ham del punto cosechado frente al Bayern de Múnich. Los alemanes pasaron por encima de los ingleses y solo la falta de puntería salvó a los locales de la derrota. Un gol en el minuto 90, sin posibilidad de reacción para los bávaros, deja un sabor de boca menos malo para los de Hoeness, pero con la sensación de que algo no acaba de ir bien en el juego del equipo. Lo mejor de la noche, el resultado. Hoeness era consciente de que algo no andaba bien y, ante la visita del gigante alemán, optó por volver a la 5-3-2, en busca de resguardar las espaldas de la defensa. Sin bajas en su plantilla, el entrenador local puso un once con algunas rotaciones, buscando carrileros más defensivos, con Coufal y Angeliño, y una dupla de ataque con Simeone y Jovic. El entrenador del Bayern, Unai Emery, fue valiente y alineó una 4-2-4 muy ofensiva, en busca de los tres puntos. El español no podía contar con el polivalente Geertruida, pero metía pólvora en ataque con Sané, Musiala, Gnabry y Kane. La apuesta de Hoeness era defender bien y salir al contragolpe, pero los alemanes fueron un martillo pilón desde el primer minuto, con una fuerte presión para recuperar y finalizar la jugada lo más rápido posible. A los tres minutos el primer problema, con la lesión de James Ward-Prowse al iniciar una carrera. Los de Múnich no es que dispusieran de muchas ocasiones claras, pero siempre merodeaban la meta local, con un West Ham incapaz de dar dos pases seguidos sin errar el segundo de manera infantil. Un cúmulo de errores en la salida de balón que dejaba en ventaja a los visitantes, con Zouma convertido en un apagafuegos sin descanso. Se rondaba la media hora cuando el equipo local perdía tres balones de forma consecutiva, el último era robado por Kimmich a Soucek, el lateral la enviaba al balcón del área y allí André Costa la ajustaba al palo con un gran zapatazo. Era el premio justo a lo que se veía en el campo, con un West Ham irreconocible y demasiado fallón en el pase. Hoeness miraba atónito desde la banda, dando voces de ayuda a los suyos, aunque sabiendo que debía cambiar el esquema de juego en breve. Aguantó hasta el descanso, gracias al trabajo de Zouma en la zaga Hammer. Los ingleses se marcharon al vestuario casi sin pisar área rival, sin hacer un solo disparo. Al salir de los vestuarios, Simeone ya no aparecía en el terreno de juego, y tampoco Mavropanos, dando paso a la 4-3-3 con las entradas al césped de Olise y Gerónimo Rivera. El West Ham trató de presionar a su rival pero no era su día. El Bayern salía fácil de la presión, aunque le costaba llegar con claridad a la meta rival. Por contra, el ataque local seguía siendo lento y con errores en el pase. Solo Baturina parecía poner algo de luz, aunque tampoco estaba tan bien como en otros encuentros. Kane ponía a prueba a Areola con un lanzamiento desde fuera del área y Leroy Sané, el más activo de los bávaros, también tuvo en sus botas el segundo frente al francés. Se salvaba el conjunto Hammer y Emery empezó a refrescar su equipo, pensando ya en guardar el resultado. Hoeness cambiaba a los carrileros y enviaba a sus hombres a por el empate, olvidándose de resguardar la defensa. Gerónimo Rivera empezó a desatarse y tuvo dos buenas ocasiones, topándose con un gran Neuer que le negó el gol. Tiraba más de orgullo que de juego el West Ham y así llegó el tanto del empate. Jovic bajaba un balón de cabeza para la incorporación de Baturina, el croata hacía un buen control orientado, se la devolvía al serbio y este dejaba solo a Gerónimo Rivera dentro del área, para que anotara de tiro cruzado. No hubo tiempo para mucho más y el conjunto local se llevaba un punto en un pésimo partido, quizás no tanto por las ocasiones del Bayern, sino por el juego mostrado, impreciso y casi impropio de un equipo Champions. En un partido tremendamente igualado, el Milán sorprendió al Liverpool en el segundo acto y vencía por 2-0, con goles de Taremi y Thiaw. El Chelsea hacía los deberes y ganaba a domicilio al Oporto por 1-3, con Lukaku abriendo la lata y otros goles de James y Nkunku. El Ajax daba la campanada ganando 1-0 a un Manchester City que dominó por completo pero fue incapaz de marcar. El Manchester United fue muy superior al Villarreal y venció en España por 0-3, gracias a los tantos de Bruno Fernandes, Hojlund y Maguire. El Real Madrid es el líder después de 6 partidos disputados, con 14 puntos. Le siguen a una unidad tres equipos, Liverpool, Juventus y Chelsea. A dos puntos se queda otro grupo de cuatro clubes, Sevilla, Oporto, Rangers y Milán, cerrando los puestos de pase directo a octavos de final. El West Ham se queda a las puertas, con 11 puntos, mientras que el Manchester United es 13º con los mismos puntos. La gran sorpresa hasta el momento, sería la eliminación del Manchester City, en la 27ª posición con 7 puntos tan solo, los mismos que el Villarreal, quien cerraría el acceso al playoff previo a octavos. Los de Guardiola tendrán dos partidos en su estadio para buscar la clasificación, frente a Ludogorets y Fiorentina.