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  Capítulo 1
  Una canción desde el norte
  
  

Mientras apuraba las últimas caladas de mi pitillo, viendo como el humo difuminaba la visión de aquel atardecer en el puerto de Grimsby, la soledad y el pelo eran las dos únicas cosas que revoloteaban en mi cabeza. La suave brisa me acercaba los sonidos de los barcos que volvían a casa después de la jornada, de los que descenderían marineros deseosos de terminar el día con una pinta o el culo de su esposa en la mano. Para un recién llegado como yo, aquel pequeño pueblo de mar resultaba extraño y tétrico, pero tranquilo a la vez., aunque acustumbrado a los tonos grises del aire de Manchester, en el fondo de mi corazón, o lo que sea que tengo donde este debería estar, me adaptaría rápido.

Con las manos en los bolsillos de mi abrigo negro, abotonado hasta el cuello a pesar de estar en pleno mes de Junio, seguí mirando al horizonte, absorto en el vaivén cansino y pesado de las olas, las botellas vacías sin mensaje y algún que otro trozo de madera que poblaban el sucio mar de Grimsby. Era tarde, así que me saqué los guantes y eché un último vistazo al periódico del día, especialmente a la sección de deportes, releyendo la noticia...

Steve Callaghan firma con el Grimsby...

Ese era yo. El exiliado que llega al norte, el hombre cuya patria se esconde detrás del humo de las fábricas y se evapora en vapor de agua, el mismo que ha dejado atrás su vida en Manchester para ver el fútbol desde el mar.

- Debería volver al hotel pensé, así que me encaminé lentamente hacia el espigón. Tiré la colilla en la arena, la pisé y con un gesto rápido la apagué. Miré al mar por última vez, la última vez del día...

Subí hasta Greenwood St, la calle paralela al paseo del puerto, en la que estaba el Chelsea Hotel, y en él mi poco equipaje. Ya se había hecho de noche pero encontré el sitio a la primera, no tenía mucha pérdida. El barrio era tranquilo, quizás algún vagabundo esperando a que se quedasen libres los bancos del paseo o alguna pareja buscando confidencialidad con la oscuridad de la noche para hacer de su intimidad una estufa, pero poco más. Sin embargo algo raro me hizo erizar la piel. Era en uno de los callejones cercanos. Dos hombres, de mediana edad, discutían entre susurros, pero con fuerza. Uno de ellos, en un momento dado sacó un arma, probablemente una navaja, un cuchillo, o algo así, y propinó una puñalada a su compañero. Este se desplomó en el suelo como si se tratase de un gran saco lleno, mientras el otro salió corriendo, entre las sombras, evitando las farolas. Me debatí entre auxiliar al herido o perseguir al agresor, así que entré en la recepción del hotel y hablé con el botones

Chico, llama a la policía...o a una ambulancia...haz algo! acaban de apuñalar a un hombre!

Eh...si...en seguida señor...pero...qué ha pasado? - Dijo él

Déjate de preguntar y llama. !Venga¡

Después de mirarle lo suficientemente mal como para que, aunque solo fuese por miedo, llamase a la policía inmediatamente, salí corriendo intentando buscar al misterioso hombre escapado. Callejeé sin mucho sentido, ya que apenas conocía el barrio. Doblé cada esquina con sigilo, a sabiendas de que aquel tipo era peligroso, pero no encontré nada, así que me paré, tomé aliento, miré al suelo resignado y me marché.

Al levantar la mirada y darme la vuelta, vi algo, vi una sombra que se movía con rapidez, con el abrigo subido hasta la cabeza a forma de capucha para evitar ser reconocido, y con manchas de sangre en la pernera del pantalón. Era él. Estaba seguro. Así que lo seguí, pero era demasiado tarde. Saltó una verja y le perdí la pista. Al acercarme, al lado de la verja, bajo una farola, se podía leer: Welcome to Blundell Park, house of The Mariners. Grimsby Town FC. Era el estadio del Grimsby, mi lugar de trabajo a partir de mañana. Genial forma de empezar en el puesto.

Bievenidos a mi nueva historia. Esta vez encarnaré el papel de Steve Callaghan, un inglés natural de Manchester, de unos 35 años, que acaba de llegar al Grimsby Town FC de la Coca-Cola League 2 inglesa. Los que me conozcais sabeis lo que esperar de mis historias...regularidad aleatoria, continuidad desconocida, etc... Mezclaré Football Manager con historia paralela y poco más. Me guiaré por el sentido común en cuanto a fichajes y selección de futuros trabajos. Por lo demás, lo ireis descubriendo a medida que avance la historia. Un saludo.

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  Capítulo 2
  La sombra de un suspiro
  
  

Grimsby es una ciudad tranquila. Te despiertas por la mañana y por tu ventana se cuelan los chillidos de las gaviotas y los gritos de los trabajadores del puerto, donde se centra casi toda la actividad a lo largo de la mañana. Era mi primera día como entrenador del equipo local, pero en la cabeza tenía otras cosas. La noche anterior había sido demasiado movida y extraña para lo que esperaba de ella: tranquilidad y muchas horas de sueño. Me vestí con traje negro, y a pesar de que el día era gris, me puse las gafas de sol. No quería que en el primer día de trabajo, los jugadores me perdieran el respeto al ver las ojeras que resumian la locura de hacía apenas unas horas.

Bajé a la recepción, y vi al botones dialogando con un policía. En cuanto asomé por las estrechas escaleras empecé a escuchar la conversación, al fijarme que ambos miraban hacia mí, y Terry, el botones, me señalaba.

Este es el hombre del que le hablé - Dijo con la voz temblorosa y chillona, mientras me señalaba con su dedo meñique, el único de los 2 que le quedaban en la mano izquierda tras un accidente de coche, años atrás, como me había contado cuando subió mis maletas hacía apenas 24 horas.

Entonces el policía sedirigió hacia mi, mirándome fijamente a los ojos y extendiendo su mano.

Buenos días. Mi nombre es Elliot Lewis, Sargento Elliot Lewis. Terry dice que usted es el único testigo del asesinato ocurrido anoche.

Asesinato? No sabía que aquel hombre había muerto. Qué tragedia.

Si, se desangró como un cerdo mientras nadie acudía en su ayuda, pero supongo que usted no sabrá nada de ese asunto. Que hizo ayer después de decirle a Terry que llamase a la policía?

Salí a la calle a perseguir al agresor. Le perdí la pista pero finalmente le vi saltando las vallas del estadio. No pude ver más ni recuerdo su aspecto. Lo siento.

Curioso, ya que el fallecido trabaja allí. Más concretamente era el ayudante del anterior entrenador, Collin Farrow. Es interesante saber que en vez de auxiliarle, usted salió a dar un paseo, y que nadie le haya visto. Muy interesante, si... - Dijo con una media sonrisa socarrona

Está insinuando algo, sargento?

Yo no insinúo, señor...

Callaghan, Steve Callaghan.

...Callaghan. Yo solo digo que nadie le conoce, y ya se ha visto involucrado en un asesinato. No le quitaré ojo. Nos volveremos a ver, téngalo por seguro.

Dió media vuelta y, sin despedirse, salió por la puerta. Comentó algo a su compañero de patrulla, miraron hacia mí, apuntó algo en su bloc de notas y se fué en su viejo coche de policía. No me gustaba todo aquello, se estaba complicando demasiado y si vine aquí era especialmente para dejar los problemas y la oscuridad atrás. Los suspiros seguían cubriendome de sombras. No tenía ganas de ir al entrenamiento, pero no me quedaba otro remedio si quería seguir comiendo al menos durante este mes.

Editado Enero 3, 201015 años por Xabi

intrigante... ajaj

te sigo