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Bienvenidos a mi tercer intento de historia!!! Ojalá pase los 15 partidos, algo no logrado con el Palermo de Angelito Cappa ni con el Liverpool de Rush (desafío que completaré en algún momento, quizás si termino ésta como debe ser...). Espero que les guste y acepto recomendaciones, críticas constructivas, felicitaciones... Puteadas por MP por favor :facepalm:

Objetivos de la historia:

-Entretenimiento personal y de los lectores

-Lograr un estilo de juego definido en la Selección, algo ni siquiera practicado en los últimos años desde Pekerman (2006).

-Afianzar una base sólida para emparejar las desventajas de calidad con los mejores equipos del mundo.

-Tener un juego vistoso y con el que la gente se identifique más allá del resultado final.

-Volver a ser el buque insignia del continente americano.

-Ganar un Mundial.

Bueno, paso a presentarles:

Información de la partida:

*Juego: Football Manager 2012

*Versión: 12.0.3

*Base de datos: Mediana

*Ligas cargadas: Premier League (Inglaterra), Ligue 1 (Francia), Bundesliga (Alemania), Serie B y Serie A (Italia), Liga ZON Zagres (Portugal), Liga BBVA (España), Primera B Nacional y Primera División (Argentina)

TODO COMIENZA EL 16 DE JULIO DE 2011 EN SANTA FE, ESTADIO BRIGADIER GRAL. ESTANISLAO LÓPEZ

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ARGENTINA 1 (4) - URUGUAY 1 (5)

El fracaso nacional

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16-07-2011

Uruguay ganó en los penales y eliminó a la Selección en cuartos, después de haber aguantado casi todo el segundo tiempo con uno menos. Muslera sacó todo en el partido y le atajó el remate a Tevez. Adiós al sueño de ganar la Copa en nuestro país. Ni Messi nos pudo salvar... ¿Qué pasa ahora con el proyecto de Batista?

No sólo hay que echarle la culpa a Muslera. No basta con decir que el arquero de Uruguay tapó todo, que le sacó goles a Higuaín o alguno a Messi. No, la Selección no supo cómo ganarle a la Celeste y se tuvo que bancar el "un minuto de silencio para Argentina que está muerto" de los hinchas rivales. Y sí, estamos muertos, futbolísticamente hablando. Porque ésta era la Copa, éste era un momento para despegar, para armar un equipo alrededor de Messi, para soñar a futuro. Y otra vez un cachetazo, ahora en casa, contra una selección que jugó con experiencia, con confianza, sin el peso de llevar la responsabilidad. Una selección que aprovechó el penal de ventaja (el que erró Tevez en la definición) y festejó a lo grande en en Santa Fe.

Duro, durísimo el golpe al mentón, golpe de KO en cuartos de final de una Copa armada en casa. Y preocupante por lo futbolístico, porque la Selección no jugó bien a pesar de haber podido ganar. Tuvo un lapso de fútbol y posesión de pelota en el primer tiempo, después de empatar, pero sin profundidad. Y en 48 minutos con un hombre más no supo ni pudo meterle uno a un Uruguay zorro, con dos delanteros bárbaros como Forlán y Suárez (corrieron, pelearon, generaron faltas y peligro), la experiencia de Lugano y la noche lúcida de Muslera. A la Selección le faltó fútbol y mucho carácter, le faltó lucidez en ese tiempo en el que tuvo uno más. Pero ni con ese ventaja despertó.

Messi tuvo su rato en el primer tiempo, encendido en el mano a mano y con un pase de gol genial a Higuaín, otro que se las ingenió para meterla y para estar cerca del gol. Del ST en adelante, incluso en el alargue, Leo estuvo intermitente, se lo notó agotado, más allá de sus ganas y de empujar. Y Mascherano, el capitán, se hizo expulsar en una falta ¡en mitad de cancha!, ya con una amarilla encima, y hubo que terminar jugando con un medio inédito (Pastore-Biglia-Tevez).

A la Selección la complicaron las pelotas paradas. También la inteligencia de Forlán y Suárez en ofensiva, siempre generando falas peligrosas y exigiendo, desgastando. Uruguay esperó su momento, viendo que Argentina iba más por obligación que por convencimiento. Lo pudo ganar uno, lo pudo ganar el otro. Hasta que llegaron a los penales y ahí Tevez, el mismo que entró por la ventana a la Copa, el mismo que se quejó porque lo cuestionaban jugando de 11, falló al patear un penalcito.

(Tomada de Ole - 16/07/2011)

LA DANZA DE OPINIONES NO SE HIZO ESPERAR...

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SELECCION

"Si fuera Batista, me voy, me quedo en casa"

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Maradona, crítico habitual del Checho, no le tuvo piedad y dijo que debería irse solito después de la pobre Copa América. Hizo autombobo por algunos logros de su ciclo y pegó fuerte: "Este presente no pasa por los jugadores".

"No puedo hablar mucho porque no vi el partido. Cada vez que salía Argentina a la cancha, era como un puñal, volvía a retorcerme por dentro viendo a los jugadores saliendo a la cancha. No podía verlo, me iba a caminar, y contra Uruguay armé un partido de tenis. Hablé con el Kun (Agüero, su yerno), con Masche. Quise hablar con Lío (Messi) también. Esto no pasa por los jugadores. Dije un montón de cosas antes de irme, espero que la gente lo recuerde". Y reapareció Maradona, en un martes alegre para él porque a su mamá le dieron el alta. Un martes en que todos los hinchas vimos de afuera Uruguay-Perú, la semi en la que soñábamos estar.

Obviamente el tema principal de la charla con Radio Belgrano fue lo que pasó con la Selección. Y hubo críticas, claro: "Todo lo que pasó significa que las cosas no se están haciendo bien. Yo tenía todo armadito y ese gol al principio contra Alemania se hizo difícil de remontar. Yo tenía la tranquilidad de que Grondona me había ratificado en el mismo vestuario tras la derrota con los alemanes. Después vinimos acá y cambió todo. No sé qué le habrán contado o dicho, habló de cosas que nunca sucedieron, habló de la droga. Yo hace ocho años que no toco absolutamente nada".

Además de decir que Messi andaba mejor que lo que le respondió a Batista (más allá de que en el Mundial no metió ningún gol ni tampoco el 10 brilló), dijo que "acá las cosas se hacen como quiere don Julio". "Yo el lunes llegué del cumple de Granados y el que sale a hablar de todo esto es un tal Humberto Grondona. Si Don Julio no se da cuenta de que las cosas se están haciendo mal, yo no puedo hacer nada", agregó, apuntándole al mandatario de la calle Viamonte.

En este nuevo fracaso argentino, no podía quedar afuera el DT de la Selección. Y fiel a su estilo, Diego tiró con todo. Siempre fue crítico con Checho y en ésta no le tuvo piedad: "Como van las cosas, por la conferencia de prensa de Batista y después de las declaraciones que se están haciendo, no va cambiar nada. Que Dios los ayude. Si yo hubiese jugado la Copa ganando solamente un partido, me hubiese ido. Si fuera Batista me quedaría en mi casa. No puedo prenderles la mecha a jugadores que la rompen domingo a domingo”.

Continuando con su postura crítica por este presente, Maradona subrayó su miedo más grande: “Que se aburran Messi, Carlitos, el Pipa (Higuaín), Romero o Mascherano y no quieran venir a defender la camiseta”. Al ex 10 se lo notó punzante. Explayándose, a veces, se olvidó que justamente su Selección fue eliminada con una paliza histórica del Mundial. Continuando con su relato, le abrió la puerta a un regreso, hoy imposible. "Sentándome con Julio y armar definitivamente al fútbol argentino para los jguadores, sin ingredientes que los dejen boquiabiertos. Se meten personas que no tienen que hacerlo, opina gente que nunca jugó. Yo no tengo amigos, lo único que quiero es que gane la Seleccion. Yo lo dije y parece que no le gustó: si el fútbol argentino sigue de esta manera...".

Y para cerrar, hizo otro autobombazo el 10, ése que salió a respaldar a Messi después del partido contra Colombia: "Me lo dijeron, de la alegría y las ganas de cuando estábamos nosotros a este presente hay una diferencia de mil por ciento. Cuando no te sentís cómodo, no hay respuesta del que está enfrente, o porque no se digan las cosas en la cara. Más con estos jugadores que los tenés que manejar con guantes blancos. Ellos tienen adoración, pero tenés que darle el estímulo justo para que ellos puedan dejar todo dentro de la cancha. Si no lo hacés, no los enchufás, es fácil que Bolivia te haga partido, o que a Costa Rica le ganemos por dos genialidades o porque el referí no le cobró penal a Colombia. Repito, si fuera Batista me quedaria en mi casa. Le ganó a Costa Rica y nada más".

(Tomada de Olé)

Y FINALMENTE, DE ARRIBA LO BAJARON AL CHECHO

SELECCION

Sin Checho, sin técnico

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Se confirmó la salida de Batista y se anunció también que se tomarán una semana para evaluar quién lo reemplazará. ¿Bilardo? "Todos las personas relacionadas con las selecciones están en observación", dijo Cherquis Bialo. Ah, suspendieron el amistoso con Rumania.

Finalmente se confirmó el rumor que todos conocían: Sergio Batista ya no seguirá como entrenador de la Selección. Así lo anunció el vocero de la AFA, Cherquis Bialo, quien además comunicó que se suspendió el amistoso previsto con Rumania para mediados de agosto, para el cual Checho había comenzado a confeccionar una lista de posibles citados.

Cherquis además explicó que no hay urgencias para anunciar el reemplazante (sería en una semana) y que todos los integrantes que trabajan a nivel Selección, incluido Carlos Bilardo, han entrado en proceso de estudio.

“Batista no fue despedido”, repitió Bialo en dos ocasiones. El dato oficial es rescisión de contrato pero no queda clara la movida de AFA. Está claro que Checho no renunció y que, en última instancia, fue empujado a abandonar su cargo. El DT se despidió después de haber dirigido apenas 17 partidos con ocho triunfos, seis empates y tres derrotas.

Si bien todavía parece prematuro hablar de reemplazantes, los nombres que barajaría la dirigencia para tomar el puesto son los dos que se mencionaron en todos lados: Alejandro Sabella y Gerardo Martino (el jueves resolverá su futuro en la selección paraguaya).

(Tomada de Olé)

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EL DOCTOR DESPUES DE TANTOS AMAGUES, TAMBIEN AFUERA

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Un poco de historia

La selección argentina es uno de los equipos más exitosos del fútbol mundial. Fue campeona en dos oportunidades de la Copa Mundial de Fútbol (1978 y 1986) y finalista en otras dos ocasiones (1930 y 1990), en esta ultima ocasión le cobraron en contra un penal inexistente en el final del partido de la final de la Copa del Mundo.

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El equipo campeón del Mundial 1978 ganándole a la Holanda del Fútbol Total 3 a 1

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El equipo capitaneado por el mejor de todos que llevó a la Argentina nuevamente a lo más alto

Argentina es, tras Uruguay, con 15, la selección que más veces ha ganado la Copa América, lográndola en 14 ocasiones. Además es la selección que más subcampeonatos logró en la competición, en unas doce oportunidades.

En los Juegos Olímpicos la Selección Argentina obtuvo la medalla de oro en los de 2004 y en los de 2008. A su vez, ganó la medalla de plata en 1928 y en 1996.

El seleccionado juvenil Sub-20 es el máximo campeón de la Copa Mundial de la categoría, con 6 títulos en 1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007. Además fue finalista en la edición de 1983.

Grandes jugadores de la historia futbolística han pasado por esta selección, entre los cuales destacan el volante Diego Armando Maradona, considerado como uno de los mejores jugadores de la historia, siendo elegido Mejor Jugador del Siglo XX en una votación realizada en el año 2000 en el sitio web de la FIFA, el delantero Alfredo Di Stéfano, actual presidente de honor del Real Madrid y elegido como uno de los cinco Mejores Jugadores del Siglo XX por la IFFHS y también por todos los ganadores del Balón de Oro hasta 1999, Gabriel Batistuta, máximo goleador histórico de la Selección con 56 tantos en 78 encuentros, y de la Forentina, Mario Kempes, Daniel Passarella (único jugador que estuvo en ambos mundiales ganados por Argentina), Osvaldo Ardiles, Fernando Redondo, Leopoldo Jacinto Luque, Ubaldo Fillol, Jorge Valdano y muchos otros.

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Editado por jj.carp19

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LA HISTORIA SE REPITE...

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Grondona quiere a Sabella pese a que Bianchi arrasa en las encuestas

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El presidente de la AFA vetará una vez más el desembarco del "Virrey" en la Selección . El ex DT de Boca es el principal candidato de la gente, pero no cuenta con la venia de "Don Julio"

La suerte está echada para Sergio Batista como DT de la Selección: esta vez no será Julio Grondona la cara del despido, pero sí su orfebre a partir de escuchar hoy a los dirigentes que forman el Comité de la AFA, los mismos que hace 8 meses votaron casi de manera unánime por el nombramiento de "Checho" y que hoy le abrirán la puerta de salida.

El futuro no preocupa, al menos desde la toma de decisiones, porque ya está decidido que el sucesor será Alejandro Sabella, quien viajó hoy rumbo a Dubai para intentar destrabar la situación con el club Al Jazira.

En el camino quedará Gerardo Martino y tantos otros entre los que sobresale un nombre, el mismo de siempre: Carlos Bianchi. "El Virrey", ganador por humillación en cada encuesta, no cuenta con la venia de "Don Julio", y eso impide de manera automática su oportunidad en el equipo nacional.

En un relevamiento de Infobae.com que contó con la participación de 19.813 personas,15.019 de ellas votaron a Bianchi como el candidato predilecto para suceder a "Checho", mientras que Sabella fue segundo, pero con 2.243 puntos.

El resto, apenas actores secundarios: Gerardo Martino apenas superó el 5% del total, mientras que Diego Simeone y Miguel Ángel Russo no alcanzaron el 2%.

La historia de los "no" para Bianchi en la Selección comenzó allá por 1998, cuando la eliminación de la Selección en cuartos de final de la Copa del Mundo de Francia 1998 le puso fin al ciclo de Daniel Passarella.

En ese momento, Bianchi fue llamado por Grondona por sus logros en Vélez (3 campeonatos locales y 3 internacionales, incluidas una Copa Intercontinental), porque sus éxitos en Boca comenzaron después del llamado de "Don Julio" que fue rechazado por "El Virrey", en desacuerdo con el proyecto estructural establecido para el manejo de la Selección (formación de juveniles, el principal escollo) y desacuerdos con el propio titular de la AFA.

Luego llegó la etapa en Boca que confirmó al DT como uno de los mejores del mundo luego de 4 torneos locales y 5 internacionales que incluyeron 2 conquistas interamericanas.

Bianchi fue entonces candidato en cada uno de los ciclos terminados por otros entrenadores y el pedido popular por su desembarco se convirtió en clamor ante cada ciclo decepcionante del equipo argentino.

Después de la Argentina de Bielsa eliminada en primera ronda del Mundial Corea-Japón 2002, luego de la eliminación del equipo de Pekerman en cuartos de final del Mundial Alemania 2006, también fue pedido por lo hinchas tras que la Argentina de Basile perdiera la final de la Copa América de 2007 ante Brasil y, sobre todo, tras un camino tortuoso en las Eliminatorias. Llegó Maradona, revolucionó el mercado, los medios, la gente, pero el equipo siguió igual y se fue en cuartos de final de la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, situación que automáticamente volvió a catapultar al "Virrey", pero Grondona llamó a Batista, a quien hoy le dará las gracias por lo hecho, pero claro está que la caída estrepitosa de su proyecto, puesto en evidencia en la reciente Copa América (ganó un solo partido ante los juveniles de Costa Rica y se fue eliminado en cuartos de final), obligan al cambio.

Lo que no cambia es el pedido general por Bianchi. Tampoco la negativa de Grondona. Será Sabella el siguiente DT. Así lo quiere "Don Julio".

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Alejandro Sabella a un paso de ser el nuevo entrenador de la Selección Argentina.

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Todo parece indicar que el Monumental será la casa de Sabella

Sin conferencias ni presentaciones, sin fotógrafos ni curiosos en derredor, casi al pasar Julio Grondona lo hizo saber: “Puedo decir que Sabella es el elegido para ser DT de la Selección, pero debe resolver el tema con el Al-Jazira”.

Sabella todavía no rescindió el contrato que había firmado con Al Jazira (Emiratos Arabes), aunque se espera que para la semana próxima haya una resolución favorable.

Se calcula su asunción plena del cargo para la segunda semana de agosto (2011) y su debut para septiembre (gira India / Bangladesh) enfrentando a Venezuela y Nigeria.

Recibido de entrenador apenas retirado de la actividad profesional (Ferro Carril Oeste, 1988), Alejandro Sabella no ejerció sino hasta 2009.

Hasta entonces se desempeñó como ayudante de campo de Daniel Passarella al frente del Parma AC (Italia, 2001), la selección de Uruguay (2000/2001), el Monterrey (México, 2002/2003), el Corinthians (Brasil, 2005), la Selección Argentina (1994/1998) y Ríver Plate (2006/2007).

Su única experiencia como DT la hizo en Estudiantes de La Plata (15.03.2009 - 10.02.2011) donde logró la Copa Libertadores de América 2009 y el Torneo Apertura 2010 (60 PJ, 37 PG, 13 PE, 9 PP).

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“Tenemos un contrato con Sabella y hay plena confianza en que se va a cumplir”.

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El jeque dueño del Al-Jazira deja bien en claro que el contrato no se rescinde.

El jeque Mansour bin Zayed Al Nahyan habló esta mañana por el tema Sabella: ”Confiamos en él y será el entrenador de Al-Jazira en la próxima temporada. Sabemos de los rumores que lo ligaban con la Selección Argentina pero no tienen ningún asidero. Hablamos con él hoy y le hicimos saber que se quedará aquí tal cual habíamos acordado unas semanas atrás” dijo, en declaraciones a la cadena árabe Al-Jazeera.

Luego, continuó: “Firmamos un contrato por 3 años con el entrenador y en no hay ninguna cláusula que le permita salir en caso de una oferta para dirigir la Selección Argentina; de haberla habido, le desearíamos muchísimos éxitos y nos pondríamos a su disposición ante alguna necesidad.”

Aunque parece casi imposible que pueda darse, Alejandro Sabella, el propio protagonista de esta historia, se encargó de poner un poco de esperanza e ilusión a la trama: “Vamos a hablar de nuevo con el presidente del club pero esta vez va a viajar Julio para convencerlo.” ¿En qué terminará la historia?

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La voz del Hincha:

¿¿Quién tiene que ser el técnico de la Selección?? Dejá tu voto!!

Se está buscando un entrenador que tenga logros como para aspirar a uno de los bancos más complicados del mundo. En lo posible que sean técnicos con experiencia y éxitos.

Buenas, voy a darte mi voto. Supongo que estarás buscando un técnico de casa, así que... Héctor Cúper!!

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MILCIAS: Bienvenido a la Argentina!! Pensaste bien, si se pusiese un extranjero no se qué podría pasar en el país jaja ;) Ahora pongo el elegido...

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Bianchi: "Tenemos uno de los mejores planteles del mundo, está en nosotros sacar lo mejor de cada uno".

Toma a un equipo golpeado por el fracaso de la Copa América y que viene de devorar dos técnicos, ¿no le parece un gran riesgo para su imagen que pueda haber otro fracaso?

Creo que si le tuviera miedo al fracaso no habría dirigido a Boca cuando me vino a buscar Macri. Ese equipo venía mal y pudimos sacarlo adelante y ganar todo lo que ganamos.

¿Por qué esta vez sí y las anteriores no Carlos?

Citando a van Gaal: "¡Siempre negativo!" (risas generales). Las anteriores no sentía que era el momento, esta vez me vinieron a buscar y vi ganas de cambiar las cosas que no me gustaban, por eso dije que sí.

¿Lo sorprendió el llamado de la Selección después de estar tantos años sin dirigir?

Si te digo que no van a decirme soberbio, y si te digo que sí, que me llegó de regalo porque ni yo esperaba que me llamen jajaja. En seio ahora, siempre uno se ilusiona con dirigir la Selección y si me siento preparado para hacerlo creo que no es tan importante no dirigir, lo importante es estar al tanto de los avances a nivel táctico, físico, y a nivel entrenamientos. Yo intento estar lo más actualizado posible, siempre manteniendo mis convicciones.

Carlos, ¿qué piensa del equipo? ¿Va a haber algún cambio importante?

Tenemos uno de los mejores planteles del mundo, está en nosotros sacar lo mejor de cada uno. Son jugadores excepcionales, el tema es ver cómo orientarlos porque los vi muy desordenados en los partidos anteriores. Creo que con unas pautas y con práctica, las cosas van a salir muy bien.

¿Quién va a ser el capitán?

En eso no me meto, los jugadores se encargan de elegirlo a él y al sub-capitán.

(Última pregunta)

Hay muchos rumores sobre la vuelta de Riquelme, ¿qué hay de real en ellos?

Tenemos que hacer una evaluación de todos los jugadores posibles, ver a qué esquema se adaptan mejor y en base a eso convocar, no vamos a traer jugadores y después ver cómo se los puede tener a todos en la cancha. Pretendemos un equipo sólido atrás y muy efectivo adelante. Si lo logramos tendremos resultados extraordinarios, y muy buen fútbol. Muchas gracias a todos por venir.

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Bianchi en la conferencia de prensa de esta tarde.

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¿QUIEN ES CARLOS BIANCHI?

Carlos Bianchi (Buenos Aires, 26 de abril de 1949) es un entrenador y ex futbolista argentino.

Apodado «El Virrey», como jugador se destacó por su capacidad goleadora, siendo históricamente el jugador argentino que más goles ha convertido en torneos de primera división, con 385 tantos en 546 partidos (prom. 0,71), lo que lo ubica en el puesto nº 13 de la tabla de máximos goleadores de todos los tiempos de la FIFA.

En Argentina jugó en el Club Atlético Vélez Sarsfield de Buenos Aires, con el que se consagró campeón en el Nacional 1968 y goleador del torneo en el Nacional 1970, el Metropolitano 1971 y el Nacional 1981. En Francia jugó principalmente para el Stade de Reims donde fue goleador de tres campeonatos (1974, 1976 y 1977), y el Paris Saint-Germain, con el que fue máximo goleador de la liga en dos oportunidades (1977-78 y 1978-79).

Como director técnico se destacó en los clubes Vélez Sarsfield y Boca Juniors con los que obtuvo 7 títulos nacionales y 8 copas internacionales, incluyendo 3 veces la Copa Intercontinental.

Su números como futbolista

Bianchi es el máximo goleador en la historia de Vélez Sarsfield, con 206 goles, y el 10º en el fútbol argentino. Es también con sus 179 goles el 9º máximo artillero en la historia de la Liga Francesa. Tras su retiro, Bianchi es reconocido por la FIFA como el futbolista argentino más goleador en la historia de los torneos de primera de división del mundo al anotar 385 goles (206 en Argentina y 179 en Francia), superando a Di Stefano (377 goles) y Labruna (292 goles), un mérito poco reconocido, quizás opacado por su éxito como entrenador.

En 1984 se inició como director técnico en el Stade de Reims asumiendo el cargo por cuatro temporadas.

Posteriormente dirigió a OGC Nice y Paris FC.

Sus logros en Vélez Sarsfield

En 1993 volvió a su país nuevamente para dirigir al club de sus raíces. Desde la conducción técnica obtuvo lo logrado como jugador y lo superó ampliamente: ganó tres Ligas locales y se catapultó internacionalmente obteniendo una Copa Libertadores de América, una Copa Interamericana y una Copa Intercontinental, venciendo en la final al AC Milan de van Basten, Rijkaard y Baresi por 2-0.

En 1996 tuvo su emotiva despedida en el estadio José Amalfitani, colmado por 50.000 personas. Partió a la AS Roma de la Serie A italiana, donde fue destituido al no lograr una buena temporada y luego se desempeñó como comentarista deportivo en varios medios de comunicación.

Es considerado uno de los máximos ídolos en la historia centenaria del Club Atlético Vélez Sarsfield, por lo logrado como hincha, jugador y director técnico de la institución.

Su paso por Boca Juniors

En 1998 asumió la dirección técnica de Boca Juniors logrando varios torneos: ganó tres Ligas, dos copas Libertadores (tras 22 años sin ganarla por Boca) y una Copa Intercontinental, derrotando al Real Madrid. Debido a esta cantidad de éxitos se instaló en el ámbito futbolístico argentino la creencia, en broma, de que Bianchi tenía el celular de Dios.

Abandonó el club en 2001, pero volvió en la temporada 2003-2004. En ese período ganó una Liga, una Copa Libertadores y una Copa Intercontinental, imponiéndose nuevamente al AC Milan. Las dos veces que renunció en Boca Juniors fueron inmediatamente después de perder finales, en 2001 con Bayern Munich (con aviso previo) y en 2004 con Once Caldas (en este caso la explicación dada fue que "era mejor para el club", aunque fuentes cercanas argumentan que fue por la excesiva venta de jugadores por parte del club).

Regreso a Boca como Mánager

Previo paso y monumental fracaso en la conducción técnica del Atlético de Madrid de España en la temporada 2005/06, en enero de 2009 regresa al club Boca Juniors en el cargo de Manager. Ya había desempeñado este cargo en el Paris FC en 1991 y 1992.

Su labor era la de encargarse del Departamento de Fútbol del club y por ende de todas las divisiones del xeneize (Boca Juniors), ya sean amateur o profesional. Ante la renuncia de Alfio Basile, el 22 de enero de 2010, el club xeneise le propone asumir como director técnico del club. Esta propuesta fue rechazada por Carlos Bianchi; paralelamente, surge en los medios de comunicación el rumor de que Bianchi podría abandonar su puesto de Boca Juniors, a causa de los problemas personales que tiene el plantel y los resultados negativos en los partidos. Bianchi declara que su puesto como manager del club debía ser respetado y que se mantendría como manager del equipo hasta el mes de junio de 2010. Sin embargo, ante supuestas insistencias por parte de la dirigencia de Boca Juniors -incluyendo un aparente ultimátum-, Bianchi decide renunciar el 25 de enero de 2010. Su renuncia fue comunicada por el Presidente del Club, Jorge Amor Ameal.

Sus títulos como entrenador fueron: Torneos Clausura 1993 y 1996, Torneo Apertura 1995 (Vélez); Torneos Apertura 1998, 2000 y 2003, Torneo Clausura 1999 (Boca); Copa Libertadores 1994, Copa Intercontinental 1994, Copa Interamericana 1996 (Vélez); Copa Libertadores 2000, 2001 y 2003, Copa Intercontinental 2000 y 2003 (Boca).

Fue elegido Mejor entrenador de clubes del mundo en 2000 y 2003.

Editado por jj.carp19

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Boca Juniors: la era Bianchi

El 'Virrey' ganó nueve títulos para Boca Juniors: cuatro torneos locales, tres Copas Libertadores y dos Intercontinentales. Una época inolvidable para el cuadro 'xeneize'.

(Artículo publicado en el número especial de SoccerManía "Los 10 mejores equipos de la historia")

La historia del fútbol tiene varias puertas de acceso. Se puede entrar a ella desde la estética, la contundencia, la fantasía, la garra... Pero hay otra puerta, menos transitada, que permite un ingreso igualmente válido: la efectividad. Por allí se metió el Boca Juniors que Carlos Bianchi condujo entre agosto de 1998 y diciembre de 2001, con un exitoso bonus track entre enero de 2003 y julio de 2004.

Sin fútbol exquisito, con los goles justos en los momentos precisos, con una convicción a prueba de cualquier adversario y con una cuota importante de suerte a favor, ese fue el sello del período más exitoso de la historia xeneize.

Después de una serie de fracasos con nombres de primerísimo nivel como Maradona, Verón o Caniggia, y entrenadores afamados como Carlos Bilardo o el Bambino Veira, el club buscaba un rumbo definitivo para torcer varios años para el olvido. Durante el Mundial de Francia ’98 los directivos de Boca Juniors fueron a París, donde Bianchi estaba como comentarista, donde tenía su residencia, producto de años de goleador en el fútbol francés. Boca necesitaba un triunfador, y todavía estaba fresco el recuerdo de su paso por Vélez Sarsfield: allí, con lo que tenía, sin compras estelares, se convirtió en el mejor equipo de Argentina, después conquistó América y en Japón se erigió como monarca intercontinental. Eso quería Mauricio Macri, presidente del club, que en su campaña electoral había prometido un “Boca hegemónico” que ganara todo. Bianchi era la persona indicada, aunque no había sido jugador de Boca. Ese dato sería difícil de contrarrestar si la mano se presentaba torcida, pero nunca ocurrió.

Tomó el equipo y empezó a insuflar espíritu, una de sus especialidades, además de ser un profundo conocedor del fútbol. Si en Vélez convirtió a Asad y Flores en una dupla letal, en Boca lo hizo con Martín Palermo y Guillermo Barros Schelotto. Aparecieron tres colombianos no muy conocidos para el público argentino, pero que pronto se convirtieron en la columna defensiva azul y oro: el portero Oscar Córdoba, el defensor central Jorge Bermúdez y en centromedio Mauricio Serna. Tenía dos laterales incansables y con categoría: Hugo Ibarra y Rodolfo Arruabarrena, un central de altísimo nivel como Walter Samuel y tres volantes tan diferentes como útiles. Diego Cagna marcaba los tiempos, perseguía al que había que perseguir; José Horacio Basualdo cortaba y relanzaba, cortaba y relanzaba, como interpretando sin vueltas un guión pautado por Bianchi. Y tenía un 10 de lujo superlativo: Juan Román Riquelme, tan lento con las piernas como veloz con la mente.

Cada uno dio lo mejor de sí, Boca pronto se mostró como un equipo compacto, invencible, con el sello inconfundible de Carlitos Bianchi. Fecha tras fecha ganaba en solidez y así se le terminó el Apertura 98: 13 ganados, 6 empatados... ¡Campeón invicto! Lo que no habían podido conseguir ni Menotti ni Bilardo (los DT campeones del Mundo con la Selección Argentina en 1978 y 1986, respectivamente), Bianchi lo alcanzó en apenas cuatro meses. Empezó allí una historia de amor con la hinchada de Boca que nunca conoció fisuras.

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Bermudez con la Intercontinental.

Tras el receso veraniego de enero y febrero, volvió la actividad y siguieron encadenándose los triunfos. A medida que pasaban las semanas asomaba en el horizonte el récord de 39 partidos invicto que Racing supo hilvanar a fines de los años ’60. Sin proponérselo –y sin decirlo– esa cifra estaba en la mente de todos, hasta que la alcanzaron, hasta que la pasaron. Fueron 40 partidos, en una seguidilla increíble que se detuvo justo la tarde en que festejaba ser campeón del Clausura 99, con un 0-4 ante Independiente. La mente estaba en las celebraciones...

Esas campañas le dieron el derecho a participar en la Copa Libertadores 2000, a 22 años de la última conquista en el máximo torneo sudamericano. Fiel al estilo Bianchi, que ya era el estilo Boca, fue jugando de menor a mayor, en la primera fase dejó atrás a Peñarol y tomó envión: El Nacional (Ecuador); River Plate, en un superclásico caliente como pocos; América de México con hazaña en el Azteca, y una final inolvidable en Sao Paulo aguantando el 0-0 ante el Palmeiras y ganando por penales. Siguió ese festivo año 2000 con la cabeza dividida: por un lado estaba el Apertura y por el otro la Copa Intercontinental.

El 28 de noviembre venció al Real Madrid 2-1 con dos tantos fantásticos de Palermo y volvió para ganar el Apertura, con lo justo, en la última fecha. En menos de dos años y medio Carlos Bianchi había cosechado 5 títulos y amenazaba con seguir ese camino “hegemónico” que soñaba el presidente Macri. Pero la relación entre ambos era cada vez más distante y, con el escudo protector que da el éxito, siguió esquivando los intentos de interferencia del dirigente.

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El Loco celebrando uno de sus goles ante el gigante Real Madrid.

El nuevo desafío era la Copa Libertadores 2001. Aníbal Matellán y Clemente Rodríguez eran las novedades en la defensa; Traverso ahora aparecía más por el medio. Arriba, estaba el Chelo Delgado, regresado de México.

Oriente Petrolero, Cobreloa y Deportivo Cali quedaron a un lado en la fase inicial. Cuando Boca tomó envión dejó atrás a Junior de Barranquilla, aplastó al Vasco da Gama y en semifinales volvió a humillar a Palmeiras por penales, otra vez en Sao Paulo. En la final esperaba Cruz Azul, el primer club azteca en llegar a esta instancia. Delgado marcó el único tanto en el Azteca y a la vuelta La Bombonera parecía reventar de público. Y acorde al estilo Boca, tuvo que sufrir: Palencia marcó el único gol de la noche porteña y de nuevo los penales le marcaron a Boca el camino a la gloria. El arquero Córdoba ya tenía su sitial en el cielo xeneize.

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Oscar Córdoba fue la figura excluyente en la Libertadores 2001.

El título le dio una nueva chance japonesa, ante Bayern Munich, campeón europeo. Semanas antes de la cita, Bianchi se levantó de su silla durante una conferencia de prensa y dejó hablando solo al presidente Macri. Con ese desplante dijo todo: en diciembre diría adiós. La caída ante el equipo alemán fue el cierre de un ciclo.

Para 2002 llegó el uruguayo Oscar Tabárez, que había guiado a Boca a ganar el Apertura 92. Se fue Riquelme al Barcelona pero apareció Carlos Tevez. Pero se sintió la ausencia casi mística de Bianchi, ese misterio jamás develado que hacía que la suerte siempre se pusiese de su lado. Si hasta decía que en su agenda tenía el número del celular de Dios... y que de allá arriba le atendía.

Para 2003 la gente solamente pedía un nombre: Carlitos. No había lugar ni consenso para ningún otro entrenador. Y Macri, dejando de lado enfrentamientos personales, lo llamó. Bianchi aceptó y en el firmamento boquense aparecieron aún más estrellas. El objetivo del primer semestre era claro, reconquistar la Copa Libertadores, y así pasaron Colo Colo, Independiente Medellín y Barcelona de Ecuador en la primera ronda. El in crescendo iba de la mano de la heroicidad, dando vuelta un resultado increíble ante el Paysandú, en Brasil, una tierra que jamás asustó a un equipo de Bianchi. Atrás Cobreloa en cuartos, atrás un muy poderoso América de Cali (que había bailado a River en cuartos) en semis y atrás el legendario Santos de Robinho y Diego en la final. Otra vez la vuelta olímpica en Brasil, el pentacampeonato en la Libertadores, la consagración total y absoluta del técnico más ganador de la historia de Boca Juniors. Y la justa mención a los nombres nuevos, como el arquero Roberto Abbondanzieri, los centrales Rolando Schiavi y Nicolás Burdisso, el combativo Sebastian Battaglia en el medio junto a Raúl Cascini... A lo Boca.

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Tévez con la Libertadores, el Apache la rompió pese a que no era indiscutido.

El 27 de noviembre de 2003 Boca venció a Arsenal y selló un nuevo título: el Apertura 2003. Estaban Matías Donnet, el colombiano Luis Perea y el brasileño Pedro Iarley, un ídolo fugaz de la casaca azul y oro. Se festejó mucho pero rápido, porque otra vez esperaba Japón. Ahora era Yokohama en vez de Tokio, pero la performance fue la misma: el super Milan de Shevchenko, Kaká, Seedorf, Maldini, Cafú, Pirlo, Gatusso y compañía era demasiado para la calidad xeneize, pero no para la mentalidad que les convencía Bianchi: 1-1, penales y la historia de siempre, Boca Juniors campeón otra vez.

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El último título de Bianchi: la Intercontinental 2003.

Seis meses después Bianchi dirigía su último partido en el fútbol argentino, una derrota 1-0 frente a San Lorenzo en la previa de la final de la Libertadores 2004 después de dejar en el camino a River, la cual fue derrota por penales ante Once Caldas. Había dejado atrás 9 títulos para Boca Juniors: cuatro torneos locales, tres Copas Libertadores y dos intercontinentales. Hubieran podido ser más de haberse realizado los choques por la Copa Interamericana, pero eso sería una anécdota.

En la memoria de La 12 quedará esa imagen de equipo compacto y arrollador, la paternidad alevosa sobre River Plate, el archirrival de toda la vida. Pese a sus diferencias, Bianchi hizo lo que había prometido el presidente Macri: la hegemonía de Boca fue total. La “Era Bianchi” ya tiene sus páginas en la historia del fútbol.

Espero que sirva para entender mejor lo que significa Bianchi en el fútbol argentino. Encontré este gran artículo buscando imágenes y no dudé en ponerlo.

(Próximo post: Evaluación de la preselección)

Editado por jj.carp19

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PRESELECCION NACIONAL

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Este será el esquema con el que jugará la Selección. Hubiésemos preferido el viejo 4-3-1-2 pero era desperdiciar jugadores muy buenos que no se adaptarían.

Acá encontramos un 4-3-3 en el cual los laterales tendrán un papel protagónico, ya que serán la salida del fondo del equipo; ellos y los extremos deberán juntarse permanentemente para armar las jugadas de ataque, si eso falla, dependeremos de la calidad de los cracks de arriba, cosa no deseada. Luego, los del medio tienen una función interesante para analizar: el pivote defensivo va a tener que cortar como loco y distribuir, ¿poquito lo que le pedimos? Para un jugador de primer nivel internacional, sí; después tenemos al que hace un poco de todo (el viejo 8 para los amantes de las tácticas de los 70, 80) que va a ser el que ayude al 5 a recuperar y al 10 a armar (y también debería tener llegada); y bueno, llegamos al director de orquesta, al finísimo jugador que hace fácil pases imposibles, el 10, que desde tres cuartos le hará llegar la pelota por el medio al delantero. Más arriba nos encontramos con el 7 y el 11 que básicamente van a correr mucho para desbordar por las puntas y servirle la pelota al 9, pueden cada tanto intentar hacer algún gol ellos, no nos vamos a enojar. Y el 9... ¿no quedó claro qué tiene que hacer el 9? lo explico, GOLES. Está para eso el 9, para meter todo lo que generen los otros diez.

Los jugadores en observación son:

ARQUEROS

Andújar, Mariano (Catania, 27 años)

Barovero, Marcelo (Vélez, 27 años)

Marchesín, Agustín (Lanús, 23 años)

Montoya, Germán (Vélez, 28 años)

Orión, Agustín (Boca, 30 años)

Romero, Sergio (Sampdoria, 24 años)

Evaluación: El puesto está bien cubierto, si bien son arqueros muy diferentes entre sí, pero todos se destacan principalmente en el mano a mano (es decir, son más arqueros “atajadores”, buenos debajo de los tres palos). Tenemos seguridad, condiciones y madurez.

DEFENSORES CENTRALES

Milito, Gabriel (Independiente, 30 años)

Samuel, Walter (Inter, 33 años)

Campagnaro, Hugo ( Napoli, 31 años)

Demichelis, Martín (Málaga, 30 años)

Garay, Ezequiel (Benfica, 24 años)

Otamendi, Nicolás (Porto, 23 años)

Fazio, Federico (Sevilla, 24 años)

Forlín, Juan (Espanyol, 23 años)

Silvestre, Matías (Palermo, 26 años)

Maidana, Jonathan (River, 26 años)

Burdisso, Guillermo (Arsenal, 22 años)

Rodriguez, Gonzalo (Villarreal, 27 años)

Musacchio, Mateo (Villarreal, 20 años)

López, Lisandro (Arsenal, 21 años)

Burdisso, Nicolás (Roma, 30 años)

Nervo, Hugo (Arsenal, 20 años)

Dos Santos, Mauro (Banfield, 22 años)

Insaurralde, Juan Manuel (Boca, 26 años)

Roncaglia, Facundo (Boca, 24 años)

Sigali, Leonardo (Godoy Cruz, 24 años)

Galeano, Leonel (Independiente, 19 años)

Martínez, Matías (Racing, 23 años)

Cahais, Matías (Racing, 23 años)

Bottinelli, Jonathan (San Lorenzo, 26 años)

Tobio, Fernando (Vélez, 21 años)

Evaluación: Puestos que se deben ir renovando, por eso seguiremos trabajando con varios que estuvieron en ciclos anteriores, pero tenemos muchos jóvenes en vista.

LATERALES

Zanetti, Javier (Inter, 37 años)

Zabaleta, Pablo (Manchester City, 26 años)

Ansaldi, Christian (Rubin Kazan, 24 años)

Rodríguez, Clemente (Boca, 29 años)

Rojo, Marcos (Spartak Moscú, 21 años)

Tagliafico, Nicolás (Banfield, 18 años)

Pillud, Iván (Racing, 25 años)

Villagra, Christian (Metallist, 25 años)

Monzón, Fabián (Nice, 24 años)

Evaluación: Pocos y no descollan, la posición peor cubierta del equipo. No hay muy buen nivel fuera de Zanetti y Ansaldi que se perfilan como los titulares, y Tagliafico como futuro dueño de la número 3.

VOLANTES CENTRALES Y ENGANCHES

Zuculini, Franco (Zaragoza, 20 años)

Mascherano, Javier (Barcelona, 27 años)

Biglia, Lucas (Anderlecht, 25 años)

Gago, Fernando (Roma, 25 años)

Cambiasso, Esteban (Inter, 30 años)

Pizarro, Guido (Lanús, 21 años)

Yacob, Claudio (Racing, 24 años)

Banega, Ever (Valencia, 23 años)

Gonzalez, Luis (Olympique Marseille, 30 años)

Canteros, Héctor (Vélez, 22 años)

Pastore, Javier (P.S.G, 22 años)

Cirigliano, Ezequiel (River, 19 años)

Riquelme, Juan Román (Boca, 33 años)

Ruiz, Alan (G.E.L.P, 17 años)

Evaluación: Buenos jugadores en defensa, aunque no terminan de convencer demasiado. Los creativos son excelentes. Las posiciones del mediocampo están bien cubiertas.

EXTREMOS

Messi, Lionel (Barcelona, 24 años)

Di María, Ángel (Real Madrid, 23 años)

Lamela, Erik (Roma, 19 años)

Rodriguez, Maxi (Liverpool, 30 años)

Zárate, Mauro (Inter, 24 años)

Piatti, Pablo (Valencia, 22 años)

Gaitán, Nicolás (Benfica, 23 años)

Pérez, Enzo (Benfica, 25 años)

Iturbe, Juan (Porto, 18 años)

Ocampos, Lucas (River, 17 años)

Evaluación: Lo mejor del equipo. Tenemos al mejor jugador del mundo, ¿qué más podemos pedir? Mientras lo acompañen bien tenemos ventaja.

DELANTEROS

Higuaín, Gonzalo (Real Madrid, 23 años)

Osvaldo, Daniel (Roma, 25 años)

Ruben, Marco (Villarreal, 24 años)

Agüero, Sergio (Manchester City, 23 años)

Tévez, Carlos (Manchester City, 27 años)

López, Lisandro (Olympique Lyon, 28 años)

Viatri, Lucas (Boca, 24 años)

Martínez, Juan Manuel (Vélez, 25 años)

Villalva, Daniel (River, 19 años)

Araujo, Sergio (Boca, 19 años)

Ferreyra, Facundo (Banfield, 20 años)

Funes Mori, Rogelio (River, 20 años)

Correa, Javier (Instituto, 18 años)

Evaluación: Muy buenos jugadores, mucho recambio joven de buen nivel. Delanteros de todo tipo y color para jugar con 1 o 2, por el momento 1 será el elegido.

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Si bien no se definieron los titulares, el éxito de la Selección depende de tres: Messi, Pastore y Agüero

Como se puede apreciar, tengo anotados muchos jóvenes. La idea es irlos llamando de a poquito para que tomen experiencia (algunos, como Tagliafico, quizás forme parte del plantel desde el principio, dado la falta de laterales izquierdos que hay). De más está decir que se aceptan sugerencias sobre jugadores que no estén en la lista.

Editado por jj.carp19

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