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Brave Heart

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@Mapashito Pues si, una decepción, sobretodo por haber ido de más a menos y que fuera así por los motivos que fueron, esa rebelión dentro del vestuario. Porque el resultado final en sí podríamos tomarlo como bastante positivo.

Era fácil saber lo que iba a pasar, ya el año pasado habías renovado otro año en el Montrose advirtiendo que las cosas deberían cambiar en el aspecto actitudinal de la plantilla. Y cambiaron pero a peor en ese sentido. Estaba claro que con una reputación tan escasa y todavía sin haber hecho mucho dinero en este gremio, no podíamos permitirnos dilatar demasiado la firma con otro equipo. Pero realmente parece que ha valido la pena rechazar esas primeras opciones.

Aunque no pasaría nada si nos estancamos en League Two, no hay prisa por conseguir metas altas. Mackey por supuesto que quiere triunfar, aunque no a cualquier precio. Más por terco que por romántico, porque no va a cambiar su forma de hacer las cosas. Además en esta partida he estado siguiendo minuciosamente las restricciones que comenté al inicio, que hacen más complicado provocar un salto grande de calidad en la plantilla. No tenemos directores deportivos en las islas, así que yo indico a quién fichar o a quién renovar, pero luego es el presi quien lleva las negociaciones.

Brora Ranger era peor opción que la finalmente se dio, pero tampoco era mala, al menos para iniciar la temporada desde el principio y estar un añito y después decidir según las sensaciones. El Queen’s Park, claramente, no era una opción para un tipo como Mackey. En el East Fife teóricamente si damos un saltito de calidad, veremos si luego podemos cumplir con las expectativas que ello conlleva.

Hablar de ascenso en ese momento no era descartable, ya que si el equipo respondía rápido y bien al cambio obviamente la distancia en puntos a la parte alta no era inalcanzable, quedando además un número de partidos suficiente. Veamos que sucedió.

@juanfra Mackey es consciente de que tiene muchas virtudes, pero sabe que la paciencia no es una de ellas. Ya aguantó el puterío que había en el Montrose tres temporadas y de haber seguido aguantando hubiese tenido que matar a alguno en ese vestuario. Así que para no acabar mal, prefirió echarse elegantemente a un costado.

Las primeras ofertas no cuajaron y después llegó la del East Fife que hizo que no se arrepintiera de haber tenido que esperar. Pero como tu mismo dices tampoco hay que exagerar, e incluso puede ser bueno o malo, porque pese a tener estatus profesional las diferencias con el resto de equipos son mínimas y aunque tenemos algo más de estabilidad económica también tenemos gastos mayores, así como mayores exigencias.

Gracias por la suerte ;)

@Viggo Es cierto que se estuvo tirando a la mujer del jefe, pero no te confundas, eso no lo hizo para darle un impulso a su carrera de entrenador :biggreen. Qué luego vio la oportunidad y lo utilizó sin escrúpulos para intentar mejorar en su carrera, sí. Pero aunque no hubiese sido bajo esas condiciones, lo hubiese hecho igualmente encantado.

Las cosas no le fueron del todo mal a después consecución agónica de la permanencia en la primera temporada. Pero Mackey puede presumir (y es un tipo al que le gusta presumir de sí mismo) de haber llevado una trayectoria ascendente, a pesar los infortunios, rebeldías y de sus propios fallos (rotaciones y demás). Quizás nunca los admita, pero a pesar de sus maneras es un tipo inteligente que sabe que los tiene y que intentará detectarlos y corregirlos.

Pues sí, qué casualidad que antes de haber recibido la oferta del East Fife Mackey se hubiese ofrecido anteriormente justo a ese mismo equipo. Siendo como es se planteo rechazar a quién no le había aceptado previamente. Pero sabiendo lo que se jugaba en aquella entrevista y prefirió darlo por olvidado y no mostrar rencor alguno. Un Mourinho escocés? La diferencia es que Mourinho ha creado una caricatura exagerada de sí mismo, que a veces se le va de las manos y se antepone al propio Mou. Mientras que Mackey, es así tal cual. Muy acertada la comparación con el Sargento de Hierro. Porque imagina lo que sintió un tipo como Mackey, viendo que cuando las cosas empezaban a torcerse un poco y más había arrimar el hombro dentro del vestuario, de repente se subleva el capitán del equipo y se le une un grupo entre los que se encuentra un chavalín de 17 años que prometía y al que hacía poco había hecho debutar.

No veía muy razonable aceptar la oferta del Queen’s Park encarnando un perfil de entrenador como el de Mackey la verdad. Sabíamos que había riesgo de que no aparecieran muchas más ofertas esa temporada (ahora mismo solo es planteable entrenar en Escocia en la SL2 que consta únicamente de 10 equipos), pero lo asumimos y al final comprobamos que fue una decisión acertada, independientemente de cómo vayan las cosas en Methil.

Agarramos al East Fife en una situación similar a la del primer año en Montrose. Pero sabiendo que quedaba algo más de media campaña por jugarse, siendo el nivel tan igualado entre equipos y estando todo muy apretado en la clasificación, también sabíamos que no sería difícil que las cosas cambiaran radicalmente (a peor o a mejor). Incluso el Montrose que era colista tuvo tiempo para darle un giro a su situación en la SL2.

Traerse a Gallacher? De momento no ha surgido la oportunidad, pero obviamente Mackey estaría encantado, si se pone a tiro en algún momento no habrá muchas dudas al respecto.

Gracias a todos por la participación y seguimiento.

Un saludo a los tres!

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Temporada 2017/18

La llegada a un nuevo equipo nunca es fácil. Encuentras nuevos jugadores a los que has de adaptarte y conseguir que ellos se adapten también a ti, lo que en mi caso es una ardua tarea. Además hacerlo en mitad de temporada, en medio de una competición en la que se está lejos de cumplir los objetivos, hace que la dificultad aumente unos cuantos grados.

Sin embargo, no ha ido del todo mal en New Bayview (estadio del East Fife) este año. Tampoco se puede decir que mi llegada haya supuesto una revolución, pero las cosas mejoraron ostensiblemente. Hemos terminado completando una temporada bastante digna, aunque es cierto que nos costó arrancar y que hemos sido algo irregulares, pero en el cómputo global estoy satisfecho con ella.


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Logramos la victoria en mi debut, 2-0 ante Peterhead, rompiendo una racha negativa de 9 encuentros sin ganar entre partidos de liga (7) y copa (2). Pero a pesar de la inyección anímica que supondría, las bajas que acumulábamos (hasta 7 lesionados) nos lastraron en las siguientes jornadas, no permitiéndonos mantener una buena racha de resultados. Sin embargo, poco a poco iríamos a más. A mediados de enero el equipo comenzaría a funcionar, manteniendo cierta regularidad durante los meses de febrero y marzo, alcanzando un bagaje de 7 victorias, 1 empate y 3 derrotas en este periodo.

En aquel momento corría la 31ª jornada (a 5 para la conclusión del campeonato) y nos situábamos 5º clasificados con 45 puntos. Nos encontrábamos solo 1 punto de la 4ª plaza que daba acceso a jugar el playoff (que ocupaba mi ex equipo Montrose) y a 7 del 2º, aunque a mucha distancia del líder destacado Berwick. Sin embargo, una inesperada y abultada derrota, 4-0 a continuación en campo del Albion Rovers, nos dejaría muy tocados de cara a afrontar la recta final. Volveríamos a perder el siguiente encuentro en casa y aunque lograríamos una victoria a continuación, perderíamos nuevamente en la penúltima jornada.

A pesar de todo, nuestras opciones de alcanzar los playoff seguirían vivas en la última jornada del campeonato. Precisábamos ganar al Montrose al que empataríamos a puntos, pero al que superaríamos gracias a nuestro mejor diferencial de goles (que es el primer factor que se toma en cuenta en caso de empate a puntos en la Scottish League Two). Además necesitaríamos que el Annan perdiese su partido en campo del Brora Rangers, que no se jugaba nada (también nos valdría un empate entre ambos, siempre que nosotros ganásemos por 9 goles o más, pero no contábamos con ello).

Finalmente no lo conseguiríamos. Cumplimos nuestra parte ganando al Montrose 2-0, por lo que por otro lado me alegré, ya que suponía adelantarles en la clasificación final además de dejarles también fuera del playoff, pero el Annan pudo rascar un empate en su partido. Finalmente lograríamos escalar con aquella victoria un puesto en la clasificación, obteniendo una 5ª posición final que sabe bastante bien teniendo en cuenta cómo estaban las cosas cuando me hice cargo del East Fife.


Scottish League Two

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Nada que destacar de las copas en las que no llegué a participar puesto que el equipo estaba ya eliminado de todas cuando hice posesión de mi cargo. Respecto al rendimiento de los jugadores destacar el año del central Johnny Brown, cuya vuelta al equipo se hizo notar tras recuperarse de la lesión que sufría a mi llegada. Fue el tercer mejor jugador de la categoría y el único del East Fife incluido en el once ideal de la temporada.

También fueron importantes nuestros delanteros Austin y Lander, a los que alternamos, ya que hemos implantado el 4-1-2-3 que utilicé en mis temporadas con el Montrose, jugando con un solo punta arriba. Lander seguramente sea mejor jugador y fue titular indiscutible hasta entrar en una racha negativa de goles que fue bien aprovechada por Austin en su turno. Contamos con dos buenos delanteros, aunque nos ha faltado gol en líneas generales.

Por otro lado, advertir la llegada en el mercado de invierno del joven centrocampista Ben Allan, firmado antes de mi contratación, además de la incorporación al staff del ojeador Tony McParland, hombre de mi confianza con el que coincidí en mi anterior equipo.


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Seguramente haya que reforzarse y bien la próxima temporada, puesto que disfrutábamos en esta con 4 cedidos de nuestro club mecenas Dundee. Además la mayoría de jugadores de la plantilla terminan contrato este año y no sabemos si podremos renovar a todos los que deseamos, pues actualmente estamos al límite nuestro tope salarial.

Mientras que la economía, aunque permanece estable y contamos aún con unos pocos miles de libras en caja, no está tampoco como para ir desperdiciando, dado que el presidente ha tenido incluso que aportar algo de pasta de su bolsillo en estos meses para poder cerrar el ejercicio en positivo. Ese gesto de la directiva es algo de lo que me congratulo. Parece que hay buen entendimiento, al menos de momento.



 

Iniciábamos nuestro papel en el East Fife rompiendo una mala racha y eso siempre es comenzar con buen pie. El tipico dicho de que con el cambio de entrenador, victoria segura. Costó, con lesiones mediante, agarrar velocidad de crucero y lograr que el equipo comenzara a asimilar las directrices de Mackey, agarrando el cenit en ese mes de Febrero que nos dio la vida.

A todo eso qué cerquita anduvieron los play off, con esa final de temporada ajustadísimo, peleándonos las alcachofas con nuestro viejo amigo el Montrose ( que todo hay que decirlo, pedazo de remontada se marcaron en la temporada) y quedando a las puertas de pelear por algo más. Qué penita ver cómo se desvaneció entre los dedos la última oportunidad.

Ahora, con la nueva temporada que se avecina ( la primera completa) se complica la cosa con el importante éxodo que podemos sufrir en el club entre cedidos, finalizaciones de contrato y demás. Vamos a intentar ampliar las cesiones de dichos jugadores o apostaremos para dar oportunidades a jugadores de la casa?

A todo esto, intuyo que al menos ha sido un año tranquilo para el bueno de Mackey en cuanto a gestión de la plantilla?

Para la directiva, cuál es la exigencia del próximo año?

Y para Mackey? Los play off son un objetivo real?

Buena temporada en general con el East Fife, si bien tuviste una racha importante de lesiones, el equipo logró acomodarse a la táctica al cabo de un tiempo, logrando esa quinta colocación, que si no fuera por la diferencia de goles, en estos momentos estaríamos peleando en el playoff de ascenso. Una lástima en ese sentido, pero bueno, a veces no se puede pedir todo. Un gran arranque.

Rendimiento parejo de los delanteros, que si bien marcaron varios goles, bien pudieron marcar más para mejorar la posición del equipo, pero hay que ver claro su calidad y potencial.

Ahora viene un momento crucial: el gasto salarial esta a tope y toca renovar a todo el plantel que termina contrato. Veremos quienes siguen, quienes vienen.

Suerte en tu nueva temporada y ojalá podamos pelear por el ascenso :thumbsup:

El calvo empieza a engordar CV en la SL2 y estar medio año en paro realmente es muy poco tiempo, el cambio se puede decir que valió la pena tanto para tí (que estás más a gusto en el nuevo destino) como para el Montrose (que han firmado una buena actuación sin el cáncer de Mackey dirigiendo la nave).

Aún te queda mucho pico y pala para hacerte un nombre en las inferiores de Escocia, de momento no has empatado con nadie, aunque tener tan cerca el playoff ha dejado ilusionada a la parroquia, que incluso puede ver en tí a un semi-entrenador.

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@Viggo Cuando te haces con un equipo que viene de una mala racha, no es difícil hacerlo mejor que tu antecesor, lo complicado es después mantener esa línea y en ese sentido estoy satisfecho con el trabajo que realizamos teniendo una progresión lenta pero ascendente.

Los playoff quedaron cerquita, pero es algo anecdótico porque de haber llegado no veía al equipo con una regularidad ni un estado de forma suficiente como para afrontarlos con garantías. Aunque quién sabe, en un par de eliminatorias todo podía haber pasado. Sorprendió lo del Montrose, sí y además es un equipo que como veremos también ha dado mucha guerra en esta siguiente temporada. Aunque no podría decirse que Mackey se arrepienta de haberse marchado de allí tal y como sucedió todo.

Ha habido muchas bajas con anticipas, pero ha sido un mal menor, porque casi la totalidad de la plantilla finalizaba contrato y finalmente pudimos retener algo así como a la mitad de los jugadores. Además encontramos sustitutos que nos daban ciertas garantías y tampoco todos los que se fueron eran jugadores con los que nos hubiera gustado contar.

No hemos intentado ampliar esas cesiones. Principalmente porque vemos las cesiones como parche no como solución y puestos a tener cedidos, preferiblemente deben ser de nuestro club mecenas (Dundee) que para algo noes está pagando una cuota mensual. Ninguno de los equipo procedía de allí, así que no nos lo planteamos.

Si en ese sentido en este equipo ha habido de momento paz en el vestuario. Alguna queja puntual sin relevancia y solo un caso de cierta gravedad ya en esta nueva temporada, que fue atajado apresuradamente y que no tuvo mayores repercusiones.

La directiva nos pedía estos dos años entrar en playoff sin más. Este anterior año no se consiguió, pero entiendo que era el objetivo del antiguo manager y que bastante hicimos nosotros con casi conseguirlo habiendo llegado en la situación en la que llegamos.

Para Mackey el objetivo es el mismo, pero con un matiz. Hemos de entrar en playoff, pero con contundencia. Estando la mayor parte de la temporada en la parte alta y a poder ser estando en la pelea por el primer puesto. No conseguir el ascenso no sería un fracaso, pero entrar en los playoff sufriendo o medio de rebote no sería cumplir el objetivo.

@juanfra Una buena temporada, las sensaciones al menos así lo fueron, porque el equipo fue yendo poca poco a más. No fue suficiente para alcanzar los playoff, pero estamos satisfechos porque tampoco anduvieron muy lejos, con ese empate a puntos (y peor golaveraje) que el 4º clasificado.

Pues respecto a nuestros 2 delanteros Lander-Austin, a los que alternamos (ya que jugamos con 1 solo punta), decir que Lander fue más titular, gustó más, pero sus malas rachas fueron siempre bien aprovechadas por su compañero. Esta temporada como verás la cosa cambió, pues Lander sufrió una lesión de larga duración y Austin se ha hecho totalmente con el puesto tras marcarse un temporadón.

Como podrás comprobar si hubieron bastantes cambios dentro de la plantilla. La directiva acabaría elevando el tope salarial en la posterior temporada, pero para entonces era ya tarde para la renovación de varios contratos. No obstante, pudimos buscar sustitutos de garantías con cierta comodidad y la economía no se ha resentido en ningún momento, gracias en gran medida a las inversiones personales realizadas del presidente. Así que contentos también en ese sentido.

Gracias por la suerte, ahora verás que si estuvimos metidos en la pelea por el ascenso.

@pheenix41 Estoy totalmente de acuerdo en todo lo que expones, pero noto cierta animadversión hacia Mackey en tus palabras que no acabo de entender la verdad xD. Lo cierto es que sí parece (y más aún viendo los resultados de este último curso) que las cosas han sido mejor para ambas partes, tanto para el Montrose como para el propio Mackey. Pero éste tiene claro que, si las cosas van mejor ahora por allí, es porque él le dejó el terreno allanado a su sucesor, tras haber sentado las bases del nuevo proyecto.

Queda mucho para crecer en Escocia, Mackey lo tiene claro. Pero además de buen entrenador e irresistible para las féminas (incluidas las esposas de sus presidentes), es un tío persistente, terco dirían algunos envidiosos, y sabe que solo la paciencia le hará salir de la cenagosas inferiores escocesas.

Saludos a todos!

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Temporada 2018/19

En mi primera pretemporada dirigiendo al East Fife, pues llegué al equipo en mitad del pasado curso, había dos aspectos fundamentales en los que quería centrar todos mis esfuerzos. Por una parte, cerrar cuanto antes la confección de la plantilla. Por otra, realizar una buena planificación del trabajo físico y el entrenamiento general de la temporada.

Había mucho trabajo que hacer en lo que a fichajes se refiere al haber sufrido un considerable número de bajas en el primer equipo. Entre los 4 jugadores que finalizaban cesión, los 7 que no renovaron y los 2 traspasos a coste cero que realizamos, perdimos hasta 13 miembros que habían formado parte de la primera plantilla. Tratamos de paliar las bajas con 11 nuevas incorporaciones, de las cuales 8 fueron fichajes de jugadores libres, 2 cesiones de nuestro afiliado Dundee y el ascenso del mediocentro Stevie McIntyre desde el equipo sub-20. Cabe señalar que la idea inicial era la de contar con una plantilla algo más reducida, quizás con un para de fichajes menos. Pero dos lesiones de larga duración –Kyle Lander (4 meses) y David Wilson (3 meses)– sufridas antes del cierre del mercado, provocaron que acabásemos ampliando ligeramente su tamaño.

Otra parte de la pretemporada en la que íbamos a poner especial empeño fue la preparación física de los jugadores. En mi experiencia anterior, había notado siempre un bajón del rendimiento de mis equipos en las segundas vueltas, además de un notable cansancio en ese tramo de la temporada y un excesivo número de lesiones musculares. Estas sensaciones unidas a los nuevos conocimientos, adquiridos tras haber estudiado esta campaña para obtener la Licencia Continental C, hicieron que me replanteara si estábamos haciendo las cosas bien. También hemos probado satisfactoriamente durante este curso a reducir la carga de trabajo físico general durante todo el año. Porque a pesar de que mis equipos por el estilo de juego que practican necesiten estar físicamente bien trabajados, he comprobado que sobrecargar a los jugadores en este área quizás sea contraproducente.

Con estos conceptos aclarados y a efectos de sacar un mayor partido de los entrenamientos decidí también renovar el staff técnico casi al completo. Solo mantuvimos al ojeador Tony McParland que había traído conmigo anteriormente del Montrose. El resto de trabajadores eran legados por el anterior manager, no había ninguno que fuese una eminencia en el East Fife y todos finalizaban contrato, por lo que no hubo escrúpulos a realizar una limpia absoluta entre los empleados del club.


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Las previsiones nos situaban 3º, una posición acorde a nuestro objetivo de como mínimo alcanzar los playoff de ascenso y una posición también bastante acorde al rendimiento que el equipo ha demostrado esta temporada como veremos a continuación.

Aunque no arrancamos la temporada demasiado bien. Antes de iniciarse el campeonato de la SL2 ya habíamos sido eliminados en 1ª ronda en 2 de las 3 competiciones de copa que disputamos, Training Cup y Scottish League Cup, aunque ante rivales de categoría superior. Mientras que no tardamos en hacer lo propio tampoco en la Scottish Cup, un par de meses más tarde, esta vez de manera mucho más bochornosa cayendo frente a un humilde de divisiones inferiores.

El inicio del campeonato regular tampoco sería especialmente halagüeño. Después de 6 jornadas habíamos logrado sumar solo 8 puntos fruto de 2 victorias, 2 empates y 2 derrotas que nos situaban 5º (lo que realmente supone mitad de tabla en una competición de 10 participantes) fuera de posiciones de playoff. Pero podían sacarse algunas conclusiones positivas. Una de las derrotas había sido por la mínima ante un recién descendido y la otra a domicilio. Además habíamos sido el único equipo capaz de ganarle al que en ese momento era el sorprendente líder, mi anterior equipo, el Montrose.

Así que no nos desanimamos y en octubre comenzamos una sensacional racha que nos llevaría a permanecer posteriormente 11 jornadas invicto, merced a 6 victorias y 5 empates. Todas esas victorias fueron por diferencia de un gol, muy ajustadas, a excepción de una de ellas. Dispusimos de un esquema 4-1-2-3, mismo que mantengo desde mis inicios. Pero fuimos un equipo muy sorprendente sobre el terreno, imprevisible en el buen sentido, al plantear siempre partidos muy distintos, escandalosamente ofensivos en algunas ocasiones y descaradamente defensivos en otras. En ese momento éramos 2º clasificado por detrás del Montrose que nos sacaba 2 puntos y que se había mantenido en la parte alta, pese a que jornadas atrás habíamos logrado arrebatarle el liderato momentáneamente durante aquella buena racha de partidos.

Sin embargo, en el ecuador de la temporada perderíamos finalmente 3-2 en campo del Annan, un equipo que en ese momento transitaba la zona media. Empezó entonces un periodo algo dubitativo para nosotros, alternando a pesar de todo permanentemente los tres primeros puestos. Aquella etapa concluiría con una nueva derrota ante el propio Annan (recordemos que en la SL2 se juegan 4 vueltas), equipo que disfrutó de un ascenso meteórico en la segunda mitad del campeonato y que con esa victoria se situaría líder. Corría entonces la jornada 27ª y la situación estaba realmente apretada en la parte de arriba, con Annan y Montrose empatados a 48 puntos, solo uno más que nosotros que con 47 ocupábamos la 3ª plaza.


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Hasta que 5 jornadas más tarde logramos una victoria ante el Montrose que resultaría de vital importancia. Aquel triunfo 1-2 ante mi ex equipo no solo nos situaba líderes después de que Annan empatara su partido. También nos permitía aventajar al Montrose en 6 puntos (habían llegado a aquella jornada 3º, 3 puntos por debajo nuestra tras una mala racha) y nos aseguraba matemáticamente disputar la fase de playoff. Pero además nos ponía en bandeja conseguir ganar el campeonato (y por extensión ascender de forma directa), ya que quedábamos empatados en la tabla con el Annan (con el golaveraje favorable) al que nos mediríamos en su campo en la última de las 4 jornadas que quedaban por disputarse.

En los siguientes tres encuentros sumamos 6 puntos después de perder en campo del Brechin. Pero afortunadamente fueron más que los que consiguió el Annan que se iba a dejar puntos en una derrota ante el Elgin City y un empate con el Montrose (3º aunque ya descolgado de las dos primeras posiciones). Todo se decidiría por lo tanto en la última jornada. Teníamos una ventaja de 2 sobre el Annan, por lo que solo les valía la victoria en nuestro enfrentamiento directo del último partido de SL2, aunque iban a contar con el factor campo de su lado.

Recuerdo el entrenamiento el día antes de aquel transcendental partido. Una vez terminado tocaba charla y todavía puedo sentir el nerviosismo en el rostro de mis jugadores en aquel momento. Supongo que ya conociéndome imaginaban las duras palabras que estaban a punto de salir por mi boca, haciéndoles ver la importancia del partido, lo mucho que se jugaban y la que les esperaría sino obtenían un resultado positivo. Pero no era el momento para eso. Nuestro objetivo inicial era llegar a los playoff y eso ya lo habíamos cumplido con creces. Además no cuento una plantilla con una personalidad excesivamente ambiciosa y soy consciente de que no todos tienen mi misma capacidad para soportar la presión. Tocaba calmar la situación y aliviar tensiones. Dudé en contratar a unas “señoritas” para tal faena, pero por ahorrar dinero finalmente opté por otra alternativa mucho más barata.

Cambié el discurso, mandando un mensaje tranquilizador a mis jugadores: “no hay presión señores”. Y mi idea funcionó. Salimos a aquel encuentro encunadísimos desde el primer minuto y aunque nos valía un empate, en la primera parte nos íbamos al descanso con 1-4 favorable en el marcador. En la segunda no habría mucha más tela que cortar, un golito más para nuestro casillero y 1-5 final. Habíamos ganado la Scottish League Two, seguramente el primer título como entrenador de una larga lista en mi futuro historial. Tras el partido los jugadores me miraron asombrados cuando les confesé que aquella charla calmada solo había sido pura estrategia, pero alabaron mi pericia sabiendo dominar la situación. Como diría aquel “me encanta que los planes salgan bien”.


Scottish League Two

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Una temporada fabulosa, muy peleada y con altibajos. Desarrollando sobre el césped conceptos de fútbol muy diferentes, sabiéndonos amoldar a cada situación en cada momento. Con un nivel defensivo muy alto, 3º equipo menos goleado, y un nivel ofensivo abrumador, siendo los máximos goleadores de la competición. El rendimiento de los jugadores estuvo también a la altura de las circunstancias, con hasta 6 de ellos en el equipo del año y varios ocupado los primeros puestos de las estadísticas de la SL2, así como también lo estuvo el comportamiento de la plantilla salvo alguna excepción.

La única nota discordante la protagonizaría el joven centrocampista Max Ashmore. Tras quejarse por la falta de minutos y enfurruñarse ante mi negativa de concederle más. Fue apartado y traspasado con celeridad en el mercado de invierno, dejando su hueco a un jugador que ha dejado muy buenas sensaciones en lo poquito que ha jugado, el extremo Archie Campbell.

En el ámbito institucional destacar que la directiva aumentó en pretemporada un presupuesto para sueldos que no cubrimos inicialmente, pero que tras la llegada de más fichajes se fue acercando peligrosamente al límite. Hemos ido acumulando ligeras pérdidas mensuales, que han sido atenuadas con alguna inyección de líquido por parte de la directiva. Por el momento la situación no es preocupante pero soy consciente de que sin la generosidad del presidente Liam Anderson otro gallo hubiese cantado. Esperemos que con el cambio de categoría el club genere más ingresos y el presidente pueda dejar de poner de su bolsillo (aunque no tengo queja de ello).

Por último hay que hacer mención a mi continuidad en el banquillo del New Bayview y es que este año finalizaba mi contrato con el East Fife. Me ofrecieron sentarnos a negociar antes de terminar la temporada, pero acordamos posponer las negociaciones viendo como estaba el panorama. Para poder así centrarme en mi trabajo con todo lo que nos jugábamos y porque sabía que consiguiendo el ascenso estaría en disposición de elevar mis pretensiones. Aunque no he podido finalmente alcanzarlas hasta donde hubiese deseado y es que el Señor Anderson se cerró en banda a aceptar las condiciones que le propuse.

Quería 2 años para poder plantearme un proyecto a largo plazo, algo a lo que se negó tajantemente ofreciéndome únicamente 1 desde el minuto cero. Por otra parte, hasta ahora venía cobrando 21.500£ anuales, teniendo una cláusula de un aumento del 25% por ascenso. Ya que mi contrato tocaba a su fin esta cláusula no sería efectiva, pero de serlo hubiese pasado a cobrar 27.000 anuales. Por lo tanto, mi idea era conseguir un merecido aumento de sueldo por encima de esos 27.000 que me corresponderían por decreto. Y bueno, digamos que lo he conseguido a medias. Después de varios días de negociaciones, la directiva me dio un ultimátum para que firmara por un año y 27.500£ anuales. Finalmente he aceptado a regañadientes y aunque estoy en parte conforme, este desplante me lo apunto… y no lo olvido.


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Luego de la buena experiencia en el Montrose conseguimos el título demostrando que apostamos bien al haber cambiado el rumbo de la carrera del calvo. A pesar de los resultados la tensión con la directiva nos demuestra que aún el barbudo este no logra ser más que un clavo en sus equipos. La directiva ni se sentó a negociar y renovó por un año en los mismos valores que con el contrato actual. En cuanto a lo deportivo fuimos un equipo camaleón al adaptarnos al entorno de cada partido manejando diferentes libretos para alcanzar el título.

En fin felicitaciones y a planificar lo que viene que debe ser aún mejor.

Saludos

Bueno desde ya sigo tus andanzas por Escocia con el East Fife, después de dos temporadas con un Montrose en claro ascenso de nivel mostrado por la plantilla, decidimos venirnos a entrenar a otro rival de división como el East Fife y qué pasó, que conseguiríamos hacer una buena temporada quedándonos cerca del PO de Ascenso, sin embargo ya a la temporada siguiente no especulamos y nos llevamos el título de la División, primer título para Jason Mackey que estoy seguro de que viendo como está haciéndolo con sus equipos no tardarán en llegar más.

Saludos y suerte para la próxima campaña.

Me uno también a esta interesante historia, en unas ligas que se me hacen familiares, aunque no demasiado.

Vaya que me parece un buen comienzo el que tuvo en Montrose, sin embargo para Mackey hay que llegar a cotas más altas, un equipo como el East Fife de seguro es un adecuado salto a mejor posición, de dicho equipo recuerdo a un excelente defensa central español que hacía vida en dicho club, pero tal parece que ya se había retirado del equipo a la llegada de Mackey, sin embargo, parece que el equipo se las arreglo sin él y con Mackey ha logrado ascender de división, ahora viene un nuevo desafio, una liga nueva para Mackey con un equipo que parece no darle todo su apoyo, creo que le tocará afrontar una difícil temporada de bienvenida.

Al final, cuando uno tiene en el punto de mira el play off, caer eliminado de forma prematura en las Copas es un mal menor e incluso una ventaja. La carga de partidos se hace insorportable para mantener un nivel físico óptimo del plantel y esas jornadas de descanso siempre vienen bien.

Veo además que hubo cambios en la planificación de los entrenamientos y también en el staff, quizá una tabula rasa necesaria para un equipo que necesitaba cierta reinvención para dar el salto cualitativo necesario. Y quizá ese cambio fue menos dramático en cuanto a que también la plantilla cambió notablemente como ya presagiábamos a final de temporada.

Y esa pretemporada tardó en dar sus frutos pero hizo que el equipo alcanzara su velocidad de crucero en Octubre. Por suerte, en estas ligas la irregularidad o la ley de cualquiera puede perder con cualquiera está a la orden del día y hace que, encadenando dos o tres victorias, pases de temer por una caída a pelear por el liderato. Y vaya pelea que tuvimos con el Montrose ( venga, en su fuero interno Mackey debe partirse de risa, imbatido como está ante su equipo) y el Annan con el que nos jugamos todo en la úiltima jornada de campeonato.

Excelente charla en el que hasta seguro que Mackey soltó eso de " a divertirse" para aligerar la presión de sus jugadores y no veas qué demostración hicieron en la primera parte. Palizón en toda regla y campeones. Seguro que las putillas hicieron acto de presencia no antes, sino después de tamaño triunfo. Y bien merecido que lo tuvieron.

Espectacular temporada del tal Nathan Austin, gran aportación ofensiva de nuestros hombres de banda ( hubo mucho aportación de la segunda línea) y de nuestros laterales, con un buen número de asistencias cada uno. Laterales-carrileros?

Por otro lado notable intensidad defensiva, desde el tal Fraser Mullen como Johny Brown o Liam Gordon, con altos porcentajes de entradas por partido. Agresividad defensiva, ataque demoledor. No hay mejor receta.

Y cuando toca recoger lo sembrado, nos encontramos con la Directiva. Con la Iglesia hemos topado Sancho!!

A mí más que la pasta, que siempre jode, me fastidia lo de los 2 años. Me parece una falta de respeto y de valoración a lo que habíamos conseguido y ciertamente entiendo que Mackey se tome el año que viene como una bonita publicidad personal.

Ese me apunto pero no olvido está claro y tengo seguro que estamos ante el último año del calvo de mirada fija y penetrante en el East Fife.

Por cierto, veo que fueron bien las clases de psicología de gestión de equipos para mejorar la licencia.

PD: El presidente del East Fife no tiene mujer o hija a la que conocer personal y profundamente?

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