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Flower of Scotland

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Publicado

» FLOWER OF SCOTLAND.-

•» MLB.

24 de Junio de 2014.-

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Land of my high endeavour,
Land of the shining rivers,
Land of my heart for ever,
Scotland the brave.

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Muchas veces uno se emociona con eso de irse lejos de casa a ganarse la vida como a uno le gusta, se ilusiona con un camino lleno de rosas hasta aquello que nos hace felices, aquello que le da sentido a nuestros sueños. No son muchos los que pueden cumplir ese deseo, y soy consciente de que muy probablemente fracase en el intento, pero he decidido dejar de ser un puto esclavo del sistema y perseguir mis ambiciones. Lamentablemente, esto no es una película y los finales felices se cuentan con los dedos.

Haciendo las maletas me di cuenta de lo mucho que iba a extrañar mi familia, mis amigos, mi ciudad. Aberdeen. Siempre pensé que extrañaría mucho a mis seres queridos, pero nunca imaginé ponerme nostálgico a la hora de abandonar lo que hoy puedo confirmar como mi lugar en el mundo. Estarán por siempre en mi retina aquellas tardes ayudando a mi padre en el pesquero, seguidas de noches de locura por Union St., lugar de mis primeras borracheras y cuna de infinitas anécdotas.
Igualmente, tenía muy claro desde un principio que había un lugar de esta ruidosa localidad que iba a extrañar más que a nada en esta ciudad: Pittodrie.
Mi padre era un fanático del fútbol, algo tradicional en estas islas, y lógicamente, me lo inculcó desde pequeño. Llegué a este mundo en los años de oro del Aberdeen FC, cuando dirigidos por el mítico Sir Alex Ferguson, conquistábamos tres ligas (1980, 1984 y 1985), y dos títulos europeos (Recopa y Supercopa 1983). La ciudad estaba volcada con el equipo y yo, que era todavía muy pequeño para darme cuenta de lo que estaba ocurriendo a mi alrededor, empezaba a nutrirme con esas camisetas rojas.
Mis primeras épocas concurriendo a Pittodrie no fueron las mejores -incluso cuando era un adolescente estuvimos a punto de bajar a Championship-, ya había pasado el momento más glorioso de la historia del club, pero son recuerdos que tampoco voy a borrar jamás.
A pesar del cariño especial que tenía por los Dons tenía claro que, para mí, la pelota era más importante que cualquier color. Entonces empecé a desarrollar un pensamiento analítico del fútbol, a estudiar los partidos en lugar de insultar jugadores, entrenadores y árbitros. La pasión que me despertaba ese esférico rodando -o intentando rodar- por el barro de algún suburbio de Aberdeen, el sentimiento que desprendían por el balón esos chicos que jugaban el partido como si fuera una final de Champions League, era tanta como aquel éxtasis de gritar un gol en Pittodrie contra el Dundee.
Lamentablemente, aunque lo intenté, nunca fui un virtuoso jugando al fútbol, así que lo que solía hacer era reventar la pelota cada vez que estaba cerca mío -con un gran porcentaje de pifias- y tratar de ordenar al equipo.
Al darme cuenta de que no aportaba demasiado en el campo de juego -plantearme esto último fue algo muy frustrante para mi -, pasé a ayudar al entrenador preparando análisis sobre rivales, algo que al principio despertaba risas en un club que era muy amateur, pero que me hacía mucha ilusión hacer: recorrer Aberdeen con un cuaderno viendo a nuestros rivales, anotar sus fortalezas y debilidades, descubrir sus mejores jugadores... resumiendo, un muy preciado hobbie de mi adolescencia -aunque me lo tomaba con la seriedad de un trabajo-, ligado a lo que más quería en esta vida.
Cuando Stevie dejó el club para marcharse a trabajar a Glasgow, tomé las riendas del equipo. Estuve varios años en el club barrial donde crecí como jugador y como entrenador, para luego recibir una "oferta" para entrenar a la selección de la Universidad de Aberdeen (benditos contactos), con la cual participamos en varios torneos regionales -incluso ganando algunos de ellos-.
Por cuestiones de trabajo y de proyectar mi vida (erróneamente), tuve que alejarme un poco del fútbol. Pero en los últimos años no dejé de soñar con la idea de mandar todo a la mierda y probar suerte en el mundo de los banquillos nuevamente, con la utopía presente de llegar algún día al banquillo de los Dons y superar los éxitos de Sir Alex. Me levanté un día y salí de casa decidido a ir a la universidad, pero me desvíe en el camino y me anoté en un curso para sacar la licencia de entrenador de fútbol profesional. Pude haber arruinado mi futuro en todo sentido, pero no me importa: quiero la gloria, quiero sentir ese aroma a césped, quiero oír a las tribunas rugir, corear mi nombre. Salir del túnel en una noche de Champions League y sentir la piel de gallina al escuchar ese mítico himno. Deseos que muy probablemente queden en eso, en deseos que nunca cumpliré, pero quién sabe, nunca se puede dejar de intentarlo.
Anoche recibí un llamado que puede ser el comienzo de algo importante o simplemente algo que quedará como anecdótico en mi vida. Nos vamos a vivir un poco más abajo, al centro-sur de este hermoso país, a Falkirk.
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  • Autor

-Reservado-

Buen comienzo para esta MLB en un lugar tan tradicional como lo es Escocia. Creo que es tu primera MLB si mal no me equivoco no? o al menos nunca te vi por estos lados.

Mucha suerte en este reto que te planteas, harto complicado emular los logros conseguidos por el gran sir Alex Fergusson, pero bueno, hay que intentarlo.

Pensas quedarte en Escocia y hacer carrera ahí para tratar de llegar al Aberdeen, o tratarás de moverte por otros paises?

Saludos :thumbsup:

  • Autor
» EAST STIRLINGSHIRE FC.-
• » LA LLEGADA A FALKIRK.
25 de Junio de 2014.-
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Falkirk, mi nuevo hogar.
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El equipo con el cual comienza mi aventura es el East Stirlingshire FC, un equipo con una interesante historia, no por su cantidad de títulos (vitrinas vacías; aunque disputó varios años la SPL), si no por una leyenda que pasó por su banquillo: curiosamente, el señor Alex Ferguson dirigió al club en 1974: su primer trabajo como entrenador fue con el mismo buzo que me voy a calzar yo. Solamente duró cuatro meses, de junio a octubre, cuando vino el St. Mirren y se lo llevó -luego de pasar por el club de Paisley, llegó a Aberdeen, donde comenzó a escribir las páginas doradas de su intachable carrera-.
A pesar de este bonito recuerdo, el club hoy en día está en las catacumbas del fútbol escocés y según la prensa pronto estaremos incluso más abajo (lo que significaría la desafiliación de la SFL). Dato interesante: nos colocan incluso por debajo de un equipo formado por jugadores amateur, es decir, tipos que juegan únicamente por amor al fútbol (Queens Park).
Esto explica el porqué de mi contratación: no es que sea el nuevo Alex Ferguson para el inglés que maneja el club (a lo mejor es hincha del United), el tema es que nadie debe querer agarrar un club que se va empujando solito al precipicio. Este desafío, lógicamente, motiva más a esmerarse: tenemos que sacar adelante un club que está al borde del abismo, al borde del olvido.
Tuve la oportunidad de atender una videoconferencia con Tony Ford, presidente del Shire, antes de llegar a Falkirk, en la cual charlamos (apurados y resumidamente, ya que claramente no era el lugar ideal para hablar de los intereses de un equipo de fútbol largo y tendido -los ronquidos del muchacho de al lado mío despertaron la admiración de todo el tren-) sobre las ambiciones que tendría el club en este primer año, entre otros temas que profundizamos luego.
Me quedé anonadado cuando me pidió que seamos competitivos. ¡¡SER COMPETITIVOS!!
Podíamos perder las treinta y seis jornadas por un gol que el presidente se iría contento.
Claramente, no deje atrás mi ciudad para tener derrotas dignas: me planteo, mínimamente, conseguir salvarnos del descenso de manera tranquila, sin sufrir demasiado. Tiene que existir un proyecto en el club, no podemos ir a la deriva "compitiendo" contra los temibles gigantes de la cuarta división de Escocia.
No obstante, no todo son ambiciones en la vida: hace falta trabajar mucho, viendo de reojo el plantel es evidente que necesitamos reforzar sin falta algunas posiciones, pero eso lo voy a plasmar detalladamente más adelante.
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En la cantera no hay demasiado destacable: puros jugadores que tendrían futuro en Scottish League 2. Si formamos jugadores con el objetivo de que tengan calidad para la cuarta división de este bendito país, mal vamos. Habrá que realizar una profunda limpieza de los equipos juveniles e intentar mejorar las instalaciones del club, pero cuando eso sea viable creo que voy a estar muerto o pescando camarones en Aberdeen con Forrest Gump.
Los empleados que me presentó Ford no me desagradan, al menos la mayoría de ellos. Eso es bueno; si no me agradaran, tendría que trabajar con ellos igual. Mi poder ahora mismo en el club está únicamente concentrado en los entrenamientos y en la 'pizarra'.
Si me gustaría contar con un nuevo ojeador, así que ya le comenté al presidente que ponga anuncios en los postes de Falkirk y alrededores. Y en internet. Vamos a ver cuántos vagabundos, borrachos u oportunistas se nos presentan a la entrevista, pero no tenemos dinero para ir a robar empleados a otros clubes.
La economía no es alentadora tampoco. Si todo sigue así, terminaríamos la temporada debiendo 148m£. Para el East Stirlingshire, mis queridos amigos, eso es muchísimo dinero. Más de lo que pagamos en salarios. Así que, si no mejora la economía, el año que viene nuestros jugadores van a tener que jugar por el whisky post partido -si los rivales se prenden-, porque dinero no vamos a tener nada. Será prioritario tener un obsesivo control salarial (tenemos que establecer un tope para cada situación en la plantilla), y tendremos que dejar marchar a los futbolistas -en caso de que lleguen ofertas, que con la nómina actual, lo dudo- por los cuales recibamos ofertas mínimamente jugosas. No podemos correr el riesgo de renegociar y que nos terminen dando un portazo en la cara, dejándonos con el jugador descontento y las arcas vacías.
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Para colmo, el estadio no es propio: 10m£ al año a nuestros rivales del Stenhousemuir para que nos alquilen su casa: Ochilview Park. El único punto positivo en este caso, es que no le damos una sola libra de la recaudación. Lo malo de este punto es que no esperamos recaudar mucho, la verdad.
En resumen: tengo mucho, muchísimo trabajo. El club está olvidado, al borde del amateurismo, al borde de la desafiliación. Pero que motivación me da que todo, o casi todo, sea una mierda. Lo más lindo que tenemos, es lo de siempre: nos queda el escudo y la camiseta; lo que vamos a defender a morir en cada partido en los embarrados campos bajos de Escocia.
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Muy bonito este reto en la inmortal Escocia y siguiendo los pasos de Sir Alex Ferguson, te sigo!

  • 2 semanas más tarde...

Gran reto el que te depara en este equipo de los bajofondos niveles escoceses, compañero académico :mrgr: . Aunque la historia la verdad que no ayuda (creo recordar que en Falkirk, William Walace perdió la batalla contra el rey inglés pero se desquitó levantándose la falda y mostrando sus posaderas junto con sus camaradas :mrgr: )

Si bien el plantel parece equilibrado, en cuanto a las posiciones cubiertas, al parecer no es así en cuanto al nivel. Tampoco hay dinero para incorporar (algo obvio en estas divisiones) y la economía a futuro no augura nada bueno. Asimismo, tal parece que no hay buenos juveniles. Toca ajustarse el cinturón e impartir una dura disciplina con respecto a los salarios, como bien dijiste.

Saludos y toda la suerte del mundo para vos. La vas a necesitar :mrgr:

Compartimos la admiración por Escocia y por el Aberdeen, un equipo con el que prácticamente me inicié hace mucho tiempo en esto de las historias. Igualar o superar el palmarés de sir Alex en Aberdeen...bonito desafío, aunque la vida puede dar muchas vueltas y quién sabe, si quizá no sólo lo iguales en el Pittodrie Stadium sino también llegues algún día al Manchester United....

De momento los paralelismos son totales. Te inicias en el East Stirlingshire FC como Ferguson y en una situación harto precaria. Veremos qué pasa.

A priori, ya te digo que, sin conocerle, a muerte con el chaval de 20 años Jack Nicholson. Con ese nombre ya me cae bien de inicio. xD

Vamos a ver como te sale emular la carrera de Sir Alex Ferguson, o al menos sus primeros pasos. Al parecer hay una profundidad de plantilla interesante como para reflejar la alineación que quieras en el equipo y no tener que acomodarte de acuerdo a lo que se tiene.

Te sigo y suerte en la primera temporada con este club escocés.

Te sigo. En primer lugar me encanta ese efecto que tienen las imágenes, si quieres compartir tu saber con un ignoto y revelarme este conocimiento te lo agradecería. Respecto a la historia ya sabemos que es lo que se trae entre manos esta aventura y esperemos que se logre tal ansiado objetivo. Mucha suerte en Escocia y esperemos que las andanzas sean mejores que las que tuvo Sir Alex.

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