@karma23

Pues como bien dices, salir de la I Divizionu es prácticamente imposible para un equipo que ni sea el recién descendido desde la Premier al haber únicamente una plaza disponible. Por mucho que en duelos directos se pueda competir contra esos equipos, a la larga en una competición donde lo que importa es la regularidad es tremendamente complicado ya que al final la diferencia de plantilla se acaba notando.

Ojalá alguno de mis jugadores sobrepasara los 20.000€ al año... pero me temo que eso es prácticamente un cuarto de nuestro presupuesto. Ahora no tengo el juego abierto pero de memoria te puedo decir que el que más cobra rondará los 8-9.000€/año pero la mayoría cobran una media de 3.000€ aproximadamente (los juveniles cobran 900€ y el salario mínimo profesional es del doble, 1.800€ anuales).

El problema es que al haber tanta diferencia entre 1ª y 2ª división, los clubes de Premier apenas se fijan en jugador de nuestra categoría por lo que arreglar la economía con un único traspaso es harto complicado.

Sobre lo de las ligas bajas turcas... a priori lo dudo. Como digo en la introducción para salir del país primero habrá que conseguir méritos en Azerbaiyán (que está por ver que se consigan) por lo que dudo que después de haber logrado algo así nuestro protagonista decida irse a ligas menores de otro país, por mucho que sea una mayor potencia futbolística. Aunque todo esto es especular...

Muchas gracias por tu atención!

La mayoría de los jugadores y miembros del staff aceptan renovar su contrato a la baja librándonos de una importante masa salarial, lo cual me deja gratamente sorprendido. Quizá mi gesto de congelar mi salario en beneficio del club haya servido para algo. Podría (como hacen muchos otros equipos de la categoría) sobre pagar a los jugadores despreocupándome de la economía del club, pero sinceramente no creo que sea una buena idea. A fin de cuentas, solo hay una plaza de ascenso y es tremendamente complicado competir con el equipo que desciende desde la Premier Ligasi por lo que prefiero mirar por el beneficio del club, aunque quizá no sea lo mejor para mí.

 

De nuevo, verano tranquilo en cuanto a movimientos de la plantilla. Salieron 3 jugadores, incluida mi primera venta: el OIK, equipo recién ascendido, nos pagaba 15.000€ por uno de nuestros centrales. Sí, un equipo que acababa de ascender se permitía esos lujos y mientras tanto nosotros pasando hambre. Por su parte llegaron 3 jugadores de los cuales eran 2 juveniles. En parte, por la política ya comentada y por otro lado porque seguíamos teniendo bastantes dificultades a la hora de atraer jugadores de nivel.

 

Plantilla de 19 jugadores (4 de ellos tienen 18 o menos años), segundo menor presupuesto de salarios de la categoría y en la previa de la temporada la prensa nos coloca en el mismo puesto en el que terminamos la pasada temporada: 6º. Visto lo visto, firmaría terminar ahí. Una vez más partiremos con 4-4-2 que hemos venido utilizando desde mi llegada ya que creo que es el sistema que mejor se adapta a estos jugadores.

 

La irregularidad se apoderó nuevamente de nosotros en el inicio de la temporada: 5 puntos de los 12 primeros posibles y por si fuera poco nuestro portero titular se lesiona para varios meses tras romperse los ligamentos de la rodilla. Y tras ese contratiempo, 3 victorias consecutivas sin encajar un gol. Porque así somos nosotros, cuando menos se espera encadenamos una buena racha de resultados y nos metemos de nuevo en la pomada. Confirmamos además ese gran momento superando la 1ª ronda de la Copa.

 

En total encadenamos 8 encuentros sin conocer la derrota en todas las competiciones (6 victorias y 2 empates) hasta que el Agsu, que estaba haciendo una gran temporada, nos cortó la racha en la 12ª jornada. A pesar de ese tropiezo conseguimos cerrar la "primera vuelta" (en realidad el parón de invierno comienza en la 15ª jornada) con 2 victorias y un empate que dejaban la clasificación así.

 

Pero antes del parón, teníamos partido de Copa. Como comenté más arriba, superamos la 1ª ronda y el sorteo nos deparó una eliminatoria muy bonita ante el Neftçi, el equipo más laureado del país. Además jugábamos en su estadio, probablemente el mejor y más moderno del país (sin contar el Estadio Nacional). Ni que decir tiene que las apuestas estaban totalmente a su favor y es que su presupuesto es 33 veces mayor que el nuestro. Planté un 5-4-1 muy estructurado, regalándoles totalmente la pelota y cerrándonos en nuestro area con la intención de desesperarlos. Creo que nunca antes un técnico había salido tan satisfecho después de perder por 4-1, pero es que habíamos aguantado hasta el minuto 60 con 1-1. Obviamente al final su superioridad se hizo manifiesta, pero sin duda fue una experiencia muy bonita y que sirvió como escaparate para dar publicidad a lo que estamos haciendo aquí en Yevlakh. Incluso su técnico (que ha entrenado en Rusia y fue seleccionador nacional) tuvo palabras agradables hacia mi trabajo tras el encuentro.

 

 

Llegaba por tanto la pausa de invierno que tan mal nos había sentado el pasado curso. Sin duda estábamos dando un rendimiento bastante superior a lo que yo esperaba a principio de temporada teniendo en cuenta que llevamos 2 años sin apenas reforzar la plantilla y con un plan de ahorro en marcha que iba a continuar en este mercado de invierno pues no llegaría nadie. La clasificación estaba tremendamente igualada por arriba en parte debido a que el Sumqayit no se estaba mostrando tan intratable como si lo hizo hace 2 cursos tras su anterior descenso (de hecho en este punto ya habían perdido y empatado más partidos que en toda aquella temporada).

 

La nueva camada de juveniles fue fructífera esta temporada y firmamos a 3 jugadores, entre ellos un centrocampista al que subí directamente al primer equipo.

 

Viejos fantasmas volvieron a aparecer cuando a la reanudación de la competición perdimos nuestros 3 primeros encuentros. Por suerte para nosotros la competición estaba siendo una cosa loca y en esos momentos la tabla quedaba así. Una diferencia de 2 puntos entre el 1º y el 8º... una locura. Nueva reunión con los jugadores para intentar subirles la moral que parece que en esta ocasión si fue efectiva pues sacamos 5 de los siguientes 9 puntos en juego.

 

Me gustaría decir que se logró la machada, pero no hubo forma. El Sumqayit, que había sido tremendamente irregular, se puso las pilas en sus últimos partidos y cerró su nuevo ascenso.

 

Clasificación final de la I Divizionu 2018/19

 

___________________________________________________________________________________________________

 

Un rendimiento en el que sin duda han destacado 3 de nuestros futbolistas, que casualmente (o no) son los que lo han jugado todo: nuestro lateral derecho, el interior de la misma banda y uno de nuestros delanteros. Las lesiones nos han respetado y eso ha sido clave para volver a rendir a un nivel superior al que tenemos.

 

En cuanto a la economía, nuestra política de reducción de gastos ha servido para que por primera vez desde que estoy aquí terminemos una temporada con (ligeros) beneficios, pero los números rojos siguen ahí y yo sinceramente ya no sé qué más hacer. No gastamos un euro en fichajes, somos el presupuesto más bajo de la categoría y los márgenes cada vez se nos estrechan más.

 

La directiva ha intentado renovarme desde el mes de enero, pero he ido retrasando todas sus ofertas hasta final de temporada ya que quería centrarme en el tramo final de la temporada y porque, no voy a engañar, tenía dudas a la hora de renovar.

 

El Neftçala, que volvía a ser uno de los grandes aspirantes para estar arriba, firmó una mala temporada, lo que le costó el puesto a su técnico. De nuevo (ya pasó al final de la 2017/18) mi nombre aparecía como máximo favorito para ocupar el banquillo, algo que inmediatamente me encargué de desmentir.

 

Finalmente y después de algunas semanas de reflexión, decido aceptar la oferta del presidente y firmo por un año más a razón de 25.000€, una ligera subida que me coloca como el 5º entrenador mejor pagado de la categoría (aunque 3 técnicos cobramos lo mismo).

Muy buenas!

Llevo un par de días leyendo tu historia y me he animado a registrarme para comentar. El destino que has elegido me parece bastante atractivo por lo exótico ya que no es muy habitual ver partidas por esas tierras.

Por lo que se puede ver esta I Divizionu es un pozo, con una igualdad tremenda salvo por el equipo que desciende desde la máxima división y que tiene un presupuesto muy superior al resto. Y con una única plaza de ascenso va a ser complicado salir de ahí a no ser que coincida una genial temporada de uno de los equipos con una mala temporada del equipo descendido.

Comentas que has tenido dudas a la hora de renovar el contrato... ¿habrá arrepentimiento? ¿será esta la última temporada de Kerimov en el Karvan?

Por cierto, muy buen papel en Copa ante todo un histórico del país como el Neftçi.

¡Un saludo!

 

 

 

 

@Shunsuke

Lo primero de todo bienvenido... llegas en el momento indicado pues justamente me has pillado maquetando la próxima actualización.

En general me gusta salirme de las ligas "mainstream" a hora de empezar una partida de estas características y como comenté en uno de los primeros posts, tenía claro que quería irme a alguna de las repúblicas ex-soviéticas... y aquí estamos.

Como bien dices, la I Divizionu es una liga bastante dura ya que el nivel medio es muy muy igualado y competir con el equipo descendido desde la Premyer Liqasi es una tarea tremendamente complicada: se les puede plantar cara en enfrentamientos directos pero a la larga y en el cómputo global de la temporada la diferencia de plantilla acaba por marcar la diferencia a su favor.

Pues sí, hubo dudas... y no desvelo mucho más que si no pierde la gracia.

Un saludo!

Otra temporada más los jugadores ayudaron al renovar su contrato sin pedir un aumento de sueldo, lo que nos valió para cuadrar las cuentas y seguir siendo el equipo con el presupuesto más bajo de la categoría.

 

Desde mi llegada, el bloque apenas ha cambiado y las pocas incorporaciones que llegan son jugadores muy jóvenes, ya sea fichados o subidos desde la cantera. La pasada temporada usamos regularmente hasta 7 jugadores en edad juvenil. Un año más, nuestra participación en el mercado de fichajes se resume muy fácilmente: acaba contrato nuestro lateral derecho suplente y llega otro (que además puede jugar en más posiciones) para sustituirlo. Intentamos fichar a otro jugador, pero nos lo volvió a levantar el Neftçala.

 

La directiva me pide terminar en la mitad alta de la tabla, que coincide con las previsiones de la prensa que creen que vamos a terminar en 5ª posición, aunque sinceramente no me fío mucho de esas previsiones ya que dicen que hay una brecha enorme entre 8 equipos y el resto, algo que no se corresponde con la realidad. Por cierto, como se puede ver, de nuevo el equipo que ascendió hace 2 temporadas (Qaradag) no consiguió la permanencia. Una nueva prueba de lo complicado que es salir de esta división y mantenerse en la Premyer.

 

El inicio de Liga fue prácticamente calcado al que vivimos en la 2017/18: en aquel momento habíamos sumado 4 de los primeros 9 puntos y en la 4ª jornada recibíamos al Qaradag (favoritos al ascenso) a los que ganamos. En esta ocasión habíamos sumado 3 de los primeros 9 puntos y en la 4ª jornada recibíamos... al Qaradag. Pero no ganamos, ya que nos empataron en los minutos finales. En total, después de ganar el primer partido, acumulábamos 5 jornadas consecutivas sin conocer la victoria y ocupábamos uno de los últimos puestos de la tabla. Incluso se me pasó por la cabeza el dimitir, pero decidí no hacerlo porque teníamos por delante un calendario "asequible".

 

Por si no fuera suficiente, el lateral recién llegado, al que había firmado como jugador de rotación, se queja de que está teniendo pocas oportunidades y me forma un motín en el vestuario con varios jugadores poniéndose de su parte porque creen que es un jugador de nivel que se merece más minutos. Total, que justo en el momento en el que podemos levantar la cabeza, tengo a medio equipo con la moral por los suelos a lo que hay que añadir que las lesiones no nos están respetando como en temporadas anteriores, lo que obviamente se ve plasmado en nuestras actuaciones: no encadenamos 2 victorias seguidas y caemos en 1ª ronda de la Copa.

 

 

La idea de la dimisión sigue rondando mi mente, pero no querría que esto acabe así, por lo que busco excusas para no hacerlo: me doy de plazo hasta la pausa de invierno.

 

Afortunadamente, la competición está siguiendo la tónica de las últimas temporadas e impera la igualadad, lo que hace que gracias a una buena serie de resultados no lleguemos demasiado descolgados al parón. La clasificación era la siguiente.

 

Aprovecho estos dos meses de pausa (ningún equipo juega amistosos durante el invierno) para pasar un par de semanas en Bakú y desconectar un poco. Las aguas se han calmado bastante y los jugadores se han relajado, terminando así con el mal ambiente que había en el vestuario. Lo principal ahora es hacer un buen trabajo en el tramo final de temporada y no repetir los errores del pasado, cuando nuestro rendimiento después del invierno ha sido lamentable. Confío en que este curso la tónica sea la contraria y vayamos de menos a más. Sobra decir que, una vez más, no incorporamos a nadie en este mercado invernal más allá de 2 juveniles que formaban parte de la hornada anual.

 

La reanudación de la competición nos tenía preparado un durísimo calendario en el que en los 4 primeros partidos íbamos a enfrentarnos a los 3 equipos que habían llegado al parón en la 3 primeras posiciones de la tabla. Una oportunidad de oro que supimos aprovechar ya que logramos 9 de esos 12 puntos y sin darnos cuenta estábamos de nuevo en la pomada, algo que parecía imposible meses atrás.

 

Con el ambiente más relajado y la moral alta después de nuestros buenos resultados, firmamos una buena "segunda vuelta" en la que a pesar de disputarse 4 encuentros menos, sumamos más puntos que antes del parón: 22 por los 19 que habíamos firmado. Como se puede ver en la clasificación, el Qaradag volvió a proclamarse campeón y mi ex-equipo, el Sahdag, descendió. Me alegro por el presidente: ni olvido ni perdono.

 

Clasificación final de la I Divizionu 2019/20

___________________________________________________________________________________________________

 

Si a comienzo de temporada me hubiesen dicho que íbamos a terminar en esta posición lo hubiese firmado con los ojos cerrados, no quiero decir si tuviera que haberlo hecho a mitad de temporada, cuando la situación parecía abocada al fracaso más estrepitoso.

 

Nuestro rendimiento ha ido sin duda de menos a más y como es habitual nuestra columna vertebral ha estado formada por nuestros 2 jugadores de banda y nuestros 2 delanteros, que han firmado los números más notables del equipo. Eso sí, en defensa hemos estado horribles, recibiendo la mayor cantidad de goles desde que soy entrenador del equipo, algo que me disgusta pues la solidez defensiva es uno de los ítems clave en mi filosofía.

 

Tras el último encuentro el presidente me ofreció la renovación por una temporada más, pero tenía decidido que esta iba a ser mi última temporada en el Karvan, por lo que rechazo su oferta.

 

Yevlakh - Junio de 2020

 

Parece que fue ayer cuando decidí abandonar el puesto de preparador físico en el Qarabag para empezar mi carrera como entrenador. Pero han pasado ya 5 años desde aquel verano de 2015 y me vuelvo a encontrar como entonces: sin equipo. Tras 4 temporadas he decidido dimitir de mi puesto en el FK Karvan, equipo al que siempre estaré agradecido por confiar en mí y darme la oportunidad de reparar mi nombre tras el descenso sufrido en mi primera temporada como técnico en solitario en el Sahdag.

 

Creo que el trabajo realizado en estos 4 años ha sido muy satisfactorio pues llegué a un equipo recién ascendido a la I Divizionu y en estos 4 cursos no hemos bajado de la 6ª posición, por lo que se puede decir que el club está ya totalmente asentado en la categoría a pesar de que a partir de mi segundo año hemos estado compitiendo con uno de los presupuestos más bajos de la división en un intento de arreglar la malograda economía, con unas cuentas en números rojos.

 

Pero el ciclo se ha acabado. El pasado verano ya tuve dudas a la hora de renovar mi contrato a pesar de que finalmente accedí a volver a ocupar el banquillo del Karvan. Pero durante esta temporada he sufrido un agotamiento que durante el parón de invierno, en esas semanas en las que volví a casa, me llevó a tomar esta decisión. Sí, durante media campaña ya tenía claro que no renovaría: en Karvan ya no había posibilidad de crecer o al menos así lo veía yo.

 

Dejo el Karvan como el tercer manager que más tiempo llevaba en un club de la I Divizionu (por detrás de los de Zaqatala y Geyazan) por lo que, al igual que el equipo, yo también estoy totalmente asentado en la división gracias al trabajo que he venido realizando con pocos recursos y usando a muchos jugadores jóvenes, lo que ha provocado que durante los últimos años mi nombre se haya relacionado con varios equipos.

 

A los pocos días después de mi marcha, me enteré de una noticia que me abrió los ojos: el entrenador del Sumqayit dejaba su puesto tras no haber conseguido (una vez más) mantenerse en la Premyer Liqasi después del ascenso. No estaba seguro de haber conseguido méritos suficientes para conseguir el puesto, pero tenía que intentarlo, así que envié mi CV a las oficinas del club.

 

Quizá en el Sumqayit aún recuerden el 5-0 que les metimos en mi primera temporada al mando del Karvan o como hace 2 campañas llegamos líderes al parón de invierno a pesar de que ellos terminaron logrando el ascenso (casualmente mis mejores temporadas en el Karvan han sido cuando el Sumqayit estaba en la I Divizionu) ya que decidieron concederme una entrevista. En dicha reunión dejan claro que el principal objetivo será el ascenso, como no podía ser de otra manera.

 

Tras unos días de larga espera, el presidente me comunica que soy el elegido para el puesto y me ofrece un año de contrato a razón de 50.000€ anuales, 2º entrenador mejor pagado de la división junto al del Neftçala y por detrás del técnico del OIK.

 

 

El Sumqayit FK es un club joven fundado en el año 2010 situado en la ciudad homónima. La ciudad de Sumqayit se encuentra en la Península de Absheron (a 30km de Bakú) y es la tercera más grande del país, siendo también el centro industrial más grande de Azerbaiyán solo por detrás de Bakú.

 

En la temporada 2010/11 el club participó en la I Divizionu consiguiendo el ascenso en ese primer año. Pasaron 5 cursos consecutivos en la Premyer Liqasi (siempre rondando la zona baja) hasta que en la 2015/16 descendieron y desde entonces se han convertido en un club ascensor que logra subir cada vez que desciende pero es incapaz de mantenerse en la élite (mismo caso que el Qaradag).

 

Construido en 2013, el Sumqayit juega como local en el Kapital Bank Arena, un estadio con capacidad para 2500 espectadores y con un moderno césped sintético, algo habitual por estas zonas para aguantar las inclemencias del clima invernal.

 

Como se puede apreciar, el club cuenta con una importante masa social para la I Divizionu con un total de 1751 abonados.

 

Qué complicada que es esta segunda división de Azerbaiyán. La igualdad es total, máxima; y al ser el campeonato tan breve hay poco tiempo para marcar las diferencias. En nuestras últimas dos temporadas los recién descendidos no tuvieron sus mejores años, pero aún así lograron ascender dejando en evidencia el inmenso salto de categoría entre la primera y segunda división.

Además, la infraestructura del Karvan no nos hacía pensar en un crecimiento sostenido que nos permita reducir estas distancias. Apenas había posibilidad de fichar nuevos jugadores que no fueran juveniles y era imposible borrar los números rojos de las cuentas del club. Imposible pensar en un reto mayor que lograr un hipotético ascenso con este club: las 4ª plazas logradas estas temporadas parecían el techo máximo del club.

En este sentido, estoy de acuerdo con la dimisión: no hay sentido en continuar un proyecto que no nos lleva a ningún sitio.

La oferta del Sumqayit me pareció magnífica para nosotros. Es innegable pensar que Kerimov se ha convertido en uno de los mejores entrenadores jóvenes de la 2ª de Azerbaiyán gracias a sus actuaciones estos últimos años con un recién ascendido, así que tiene sentido que este gran club a la deriva haya confiado en nosotros. La verdad es que espero que haya aquí mucho más material con el que trabajar: sobre todo porque me parece un club que debería estar en la primera división por historia. Ojalá que ahora no te roben los fichajes y puedas hacerte con varias promesas importantes. 

Te deseo mucha suerte para lo que viene: hay que ascender, desde luego, pero también empezaría a planificar desde ya nuestro futuro en la 1ª división  

@karma23

Cuánta razón tienes... sin duda alguna esta I Divizionu es una de las divisiones más duras de las que yo haya podido probar en el FM. Obviamente no por nivel, sino por la igualdad de la misma y el hecho de que solo el campeón escape de la misma, con la diferencia de nivel que hay entre recién descendidos y el resto.

Así es, en el Karvan era muy difícil seguir creciendo actuando de la manera que lo estábamos haciendo, esto es, poniendo al club por encima de las propias ambiciones personales. Perfectamente podría haberme despreocupado de cuadrar el presupuesto de salarios y de la economía en general, pero la idea de este Kerimov es siempre la de pensar como hombre de club.

Por eso la oportunidad del Sumqayit es maravillosa, porque las posibilidades de crecimiento tanto profesional como del club parecen bastante más amplias, empezando por el objetivo de disputar la máxima categoría.

Una vez más te agradezco que te decidas a comentar!

 

 

Llego a mi primer día con las ilusiones renovadas ante el nuevo reto que se me presenta. El presidente me ha firmado por un año con el claro objetivo del ascenso y es que no lograrlo sería para mí un fracaso sin paliativos ya que todo equipo que ha descendido ha conseguido el ascenso a la campaña siguiente desde que entreno en esta división.

 

Pero había bastante trabajo por hacer. El staff es bastante completo y solo incorporamos un par de ojeadores y un entrenador para el juvenil que respondieron positivamente a nuestros anuncios. Pero el caso de la plantilla ya es otro tema: me encuentro una ONU con hasta 11 nacionalidades distintas (entre ellas un armenio), algo sin duda provocado por no haber restricción en la Premier. Acostumbrado como estoy a entrenar a jugadores nacionales (no he tenido a ningún extranjero a mi mando) es algo que me choca. Pero aún hay más ya que varios de ellos están descontentos por el descenso y quieren dejar el club. Mi sorpresa es aún mayor cuando compruebo que el club tiene cerca de otros 30 jugadores en su plantilla reserva, lo cual me parece absurdo teniendo en cuenta que el Reserva solo jugará partidos amistosos debido a que la Liga de Reservas solo la juegan los equipos de la Premier.

 

Tenemos cerca de 1,3M€ en caja y un presupuesto para salarios de 1,5M€ de los cuales 1,2 están actualmente comprometidos. Con el beneplácito de la directiva inicio una reestructuración importante con el objetivo de reducir el número de jugadores y por consiguiente la carga económica que ello supone. Dejaron el equipo 19 jugadores (el primero de ellos el armenio, aunque sinceramente era un buen jugador) que dejaron más de 600k€ de rédito y a cambio llegaron 7, todos ellos azerís y también todos llegaron a coste 0 incluidas 2 cesiones por las que nos reservamos un derecho de compra.

 

De esta manera la plantilla quedó formada por 21 jugadores, una plantilla a la que le devolvimos el carácter nacional pues únicamente quedaron 4 extranjeros. Además, los gastos en salario se redujeron en más de la mitad.

 

 

Sobra decir que las apuestas nos colocaban como el máximo favorito al ascenso ya que a pesar de haber reducido en gran parte nuestro presupuesto salarial, aún éramos el equipo de la competición que más gastaba en sueldos. Pero las cosas no comenzaron como esperábamos, pues empatamos nuestros 2 primeros encuentros, que fueron idénticos: dominamos claramente pero el rival empató en su única oportunidad y no fuimos capaces de volvernos a adelantar. Tras esos 2 tropiezos conseguimos 6 victorias y 1 empate en nuestros 7 siguientes partidos, incluida la 1ª ronda de Copa que superamos fácilmente.

 

Llegamos al parón como invictos, aunque concediendo más empates de los que a mí me hubiese gustado. La clasificación quedaba así.

 

Antes de la pausa tocaba la 2ª ronda de Copa y visitábamos al Xazar Lankaran (equipo de la parte alta de la Premier y vigentes campeones de la Copa) en su estadio. Caímos por 3-2 en un partido en el que competimos de tú a tú con uno de los clubes con más presupuestos de la máxima categoría y ante casi 7000 personas que presenciaron el encuentro en su estadio, por lo que salí bastante orgulloso.

 

Nuestra primera derrota en Liga llegó en la 17ª jornada ante el Neftçala... y no hubo más. Ganamos nuestros 9 últimos encuentros de la temporada, en los que solo encajamos 2 goles que además fueron en el mismo partido. Una racha brutal que hizo que confirmásemos el ascenso 4 jornadas antes de que terminase la temporada.

 

Clasificación final de la I Divizionu 2020/21

___________________________________________________________________________________________________

 

La actuación de todos los jugadores ha sido sensacional, con todos ellos prácticamente rondando un notable. Especialmente han destacado nuestros 2 laterales, vitales a la hora de crear peligro y proveer asistencias a nuestros delanteros desde la banda. Hemos sido el equipo más goleador (2 goles de media por partido), el menos goleado, los que más posesión media hemos tenido (59,2%)... en definitiva, hemos arrasado.

 

En cuanto a al economía, hemos cerrado el año con buenos beneficios que principalmente se deben a los 2 principales patrocinadores con los que cuenta el club, tanto el de la camiseta como el del estadio, siendo este último especialmente jugoso. La asistencia media durante la temporada ha sido de 1561 espectadores, lo que supone un 62% del total de nuestro estadio, nada mal para estar en la segunda categoría del país.

 

Durante el intervalo invernal la directiva, que estaba muy contenta con mi trabajo, me ofreció la renovación de mi contrato por una temporada más, cobrando el mismo salario aunque con un aumento del 20% en caso de lograr el ascenso, por lo que la próxima temporada pasaré a cobrar 60.000€, lo que me coloca como el 2º técnico peor pagado de la Premyer. Una Premyer en la que todos los actuales entrenadores cuentan con una Licencia Continental mientras yo aún sigo con la Nacional, algo que intentaré cambiar el próximo curso.

 

Tras 6 temporadas entrenando en la I Divizionu y a mis 40 años, probaré por primera vez en mi carrera como entrenador las mieles de la Premyer Liqasi. ¿Durará el sueño?

Interesante historia. Suerte en la primera división.

@AupaLega

Gracias.