Jump to content

Respuestas destacadas

  • Autor

kBKydL8.png

Semis-Copa.png

Alineaciones. Calificaciones. Estadísticas

3 de mayo, 19:45, Copa de Ucrania Semifinales,
Metallist, Kharkiv, 40.003 espectadores. 

Tendrá que ser otro año. Por tercera temporada consecutiva el Dinamo alcanza la final de la Copa Ucraniana, camino de revalidar el título. Rebrov y sus pupilos no dejan ni las migajas para el resto de clubes de Ucrania, contando por victorias su participación en todas las competiciones nacionales desde que el antiguo delantero tomó las riendas del banquillo blanquiazul.

Y eso que el Metalist estuvo cerca de dar la campanada. Muy cerca. Las Comadrejas jugaron un gran partido, sumado a uno de los peores encuentro de la temporada del Dinamo, que convierte el resultado ciertamente en un triunfo un tanto injusto del líder.

Suerte de campeón, que se suele decir en estos casos. O que quien perdona, lo acaba pagando.

Clichés, sin duda, pero que pueden explicar lo vivido en el césped del estadio Metallist. Cansancio por la acumulación de partidos, la cercanía de la vuelta de las semifinales de la Europa League, el manido exceso de confianza... Hay muchos motivos que pueden explicar el bajo rendimiento del Dinamo, aunque en ningún caso puede ser aceptable. Muy atrás, escondidos en su campo y arrinconados cerca del área de Koval.

Defensivamente el Dinamo dio su rendimiento habitual pese a que se notó que el centro de la zaga era de circunstancias, construida a toda prisa entre bajas, rotaciones y descansos. Sobrio trabajo de Selin y de Savchenko en las bandas, tapando cualquier subida peligrosa de los extremos del Metalist. Ahí empezó a construirse el tapón que las Comadreja no fueron capaces de superar. Sosa estuvo muy activo generando peligro en punta, pero ni Cleiton Xavier ni Blanco fueron capaces de acompañarle una sola vez en ataque.

Tampoco es que el Dinamo estuviese mucho mejor en materia ofensiva. Deambulaban más tiempo en su propio campo, compartiendo la posesión del esférico con el Metalist, y de cuando en cuando lanzaban algún contragolpe, alguna jugada peligrosa con la que pisaban área local. En una de esas acabaría llegando el único tanto del partido.

Kokorin estaba siendo el más peligroso en las filas blanquiazules, demasiado esporádico para ser una amenaza constante pero siempre generaba inquietud en la zaga de los locales cuando se asomaba al pico del área grande. Le tocó a Azatskyi pagar los platos rotos. Totalmente sobrepasado, el central derribó con el cuerpo al extremo ruso en un empujón tan absurdo como evitable. Moseychuk señaló la pena máxima sin dudar, y Junior Moraes no perdonó desde los once metros.

Quedaba mucho por jugarse pero ahí se acabó el partido para los dos. Al Metalist le faltaban ideas en los metros finales, y el Dinamo andaba con la lengua fuera a medida que transcurrían los minutos. El pitido final supuso un alivio para el Dinamo, que se cita en siete días con el Sebastopol para jugarse la final.

 

  • Autor

2wKyJSR.jpg

sevilla-chelsea-U31477711471-Ij-V-940x52

 Fazio 33' – Junior Moraes 90'+2'

Alineaciones. Calificaciones. Estadísticas.

7 de mayo, 19:45, UEFA Europa League Semifinales Vuelta,
Ramón Sánchez–Pizjuán, Sevilla, 45.500 espectadores. 

París ya espera al Dinamo Kiev. En el último suspiro del partido, con la afición local celebrando el pase de los suyos a una nueva final europea, Junior Moraes apareció para anotar en el único tiro a puerta de los ucranianos y sellar la clasificación de los blanquiazules, que dos años después vuelve a aspirar a alzar un título continental.

Suerte, mucha suerte casi un milagro visto el partido. Uno más para los de Kiev desde que Rebrov está en el banquillo. Quizá el más grande de todos porque el Sevilla hizo méritos para ganar, para golear a un Dinamo que completó su peor partido de la temporada. Posiblemente de los tres últimos años. Avasallados por un conjunto andaluz que hizo valer su condición de equipo local y de ser uno de los favoritos de esta competición.

El Sevilla tardó poco en volcar todo su caudal ofensivo en banda izquierda, en un Fetfatzidis que nunca perdió la cara al partido, y el hombre más peligroso de los sevillistas. Las tres primeras ocasiones de gol del partido fueran suyas, en tres carreras en las que Savchenko demostró que aún le queda camino por recorrer y mucho que aprender. Suerte del apoyo de Pylyavskyi, demostrando que es uno de los mejores jugadores que tiene Rebrov en su plantilla.

Fetfatzidis no marcó pero si se encargó de fabricar el que a la postre sería el único tanto de los suyos. Recorte de lujo para sentar a Savchenko, un centró milimétrico para que Fazio llegase a rematar de cabeza.

A diferencia de lo visto en Ucrania, los sevillistas no pisaron el freno. Buscaron un segundo gol que asegurase su pase. El 1–0 era suficiente pero también un resultado corto. Al Dinamo le duraba muy poco el balón, su centro del campo se dedicaba a robar, presionar y ayudar en defensa. Taschy y Sydorchuk se desfogaron hasta el último aliento. Arriba, la nada. Ni Junior Moraes ni los extremos lograban entrar en juego. Apenas tocó dos veces el balón el 9 brasileño en la primera parte, y una de ellas fue en el saque de centro.

Llegaba el Sevilla, se asomaban al balcón del área de Koval, remataban con cierta facilidad pero no acababan de materializar su superioridad, de convertir su dominio en mejores ocasiones. ¿Con Negredo el resultado hubiese sido distinto? Eso ya entra en el campo del fútbol ficción, aunque no puede negarse que el desempeño de Valdez en punta fue bastante desastroso. Con el ritmo endiablado que imprimieron los andaluces desde el comienzo, el delantero paraguayo no tardó en ser la nota discordante. Lento, desubicado, situado más veces en fuera de juego que en la posición correcta, más un estorbo que una ayuda.

En la segunda parte se repetía el esquema de la primera. Seguía el ataque del Sevilla sin que llegase el gol. Behrami de falta, Ezquiel Muñoz en un córner, otra vez Fetfatzidis... Ocasiones había, y el dominio local era absoluto, abrumador. Ni estaba ni se esperaba al Dinamo. Rebrov movió el banquillo, mejorando los reservas lo que había en el campo, y muy al final incluso cambió el esquema para sumar un segundo delantero en busca del empate, del gol que asegurase su pase.

Y llegó el premio al final, en el segundo minuto de un descuento de tres. Kokorin se lanzó al ataque a la desesperdad, a trompicones. Un pase del ruso que la defensa sevillista atajó pero no controló. Zhychykov peleó para recuperarlo, abriendo a un Junior Moraes que le pegó con todo para marcar, enmudeciendo a los cuarenta y cinco mil espectadores que veían como se escapa la final cuando ya la tocaban con la punta de los dedo

JUNIOR MORAES HÉROE, MITO, LEYENDA, GOL GOL GOL GOL GOL GOOOOOOOOL.

Spoiler

FGIDt2HWYAAkwDi.jpg

¡Josep! ¡No veo al Shakhtar!

 

Editado por Breogán

  • Autor

pxIDHq3.jpg

ласкаво просимо!@Breogán

A diferencia de lo que le pasa a @mrgnecocuando hay un delantero en condiciones suele ocurrir esto, que en un partido de mierda llega Junior Moraes y te mete en una final europea. Habrá que jugar mucho mejor en la final, pero que nos quiten lo bailao. 

Gracias por pasar y comentar.

  • Autor

2wKyJSR.jpg

Copa-EURO-Vista-general-Fases.png

Grandiosa ronda de semifinales que deja a Liverpool y Dinamo Kiev como los dos equipos que lucharán por alzar la Europa League dentro de trece días en París. Toda una finalísima que enfrentará a dos campeones continentales por partida triple, ya que tanto ingleses como ucranianos han levantado la Champions League, la Supercopa Europea y la Europa League cuando se conocía como Copa de la UEFA. Un doble palmarés que sirve para dignificar la competición.

Con un favoritismo que ha ido bailando de una ronda a otra, el Liverpool de Ancelotti llegará a tierras francesas medio escalón por delante en las apuestas tanto por plantilla como juego desplegado en su semifinal ganando sin muchos problemas al Borussía Dortmund por un global de 1–4. Por contra, los ucranianos del Dinamo Kiev sufrieron lo indecible para eliminar 3–2 al Sevilla, logrando acceder a la final en el último suspiro de partido.

Los Reds empezaron a gestar su presencia en la final de Paris en su visita al Signal Iduna Park, doblegando en la ida 0–2 al Borussía, mal el conjunto germano que nunca llegó a entrar en ritmo de partido. Yarmolenko y Luis Suárez, uruguayo y ucranio, jugaron a placer con la defensa germana marcando un gol cada uno antes de que se cumpliese el primer cuarto de hora. Tarea que repitieron en Anfield una semana más tarde, acabando con la resistencia de un Dortmund que solo lograría marcar en la recta final del partido de vuelta.

Mucho más disputada fue la semifinal entre Dinamo y Sevilla, en la que los ucranianos lograron sellar su clasificación en el descuento de la segunda parte en el partido de vuelta. Más emoción imposible. El 2–1 de la ida dejaba la eliminatoria muy abierta, y en el encuentro de vuelta disputado en el Sánchez–Pizjuán el conjunto andaluz fue un rodillo ofensivo que acabó chocando con el muro defensivo ucraniano hasta que Junior Moraes hizo el tanto que mandaba al Dinamo directo a la final.

 

  • Autor

kBKydL8.png

Final-Copa.png

Alineaciones. Calificaciones. Estadísticas

10 de mayo, 19:0, Copa de Ucrania Final,
Estadio de la República, Kiev, 69.004 espectadores.

Dos de dos para el Dinamo. Rebrov y sus pupilos no perdonaron, no dejaron escapar la ocasión de revalidar la Copa Ucraniana por tercera temporada consecutiva. Con la Premier en el bolsillo, bien guardada junto al acceso a final la Europa League, a los blanquiazules les quedaba disfrutar de la final copera, confirmar su condición de favorito y llevarse otro trofeo a sus vitrinas.

Tal y como demostró Junior Moraes hace tres días, la vida es mucho más fácil con un killer en la plantilla, y cuando el Dinamo puso la pasada temporada los 15 kilos que pedía el Metallurg por Junior Moraes estaban comprando gol. Y a un precio asequible. Muy asequible. El 9 brasileño ha sido fundamental en las dos últimas ligas conquistadas por los blanquiazules, y tampoco hay que retroceder demasiado en busca de ejemplos. En apenas siete días, esta misma semana ha sido determinante para que el Dinamo alcanzase dos finales, y para que ganasen la primera de ellas.

Sin sacar su once de gala, los blanquiazules si mostraron sus mejores caras en la alineación a medida que iban recuperando efectivos recién salidos de la enfermería. Plastun y Kalitvintsev volvían a ser titulares, y más allá de un par de rotaciones eran los mejores disponibles.

Y se notó. El Sebastopol no estaba dispuesto a ser un invitado en la fiesta del Dinamo, pero no llegaron a plantar cara en ningún momento. El Dinamo era amo y señor tanto en la posesión como en las aproximaciones al área de Makhnovskyi. No era un asedio como el que vivieron los blanquiazules en Sevilla, sí controlaban el partido.

Aunque el gol se hacía de rogar. Era mejor el Dinamo sin acabar de materializar esa superioridad. Hubo que esperar al filo del descanso para que se rompiese la igualada. Un 0–1 con el sello del balón parado marca de la casa. Marca de los visitantes en esta ocasión. Falta en un lateral del área que Kalitvintsev mandó al punto de penalty, Plastun cabeceó bajando el balón a la posición de Junior Moraes que no perdonó.

La mínima ventaja sirvió para tranquilizar aún más el encuentro. Ya en la segunda mitad el Dinamo mantenía la posesión sin ser tan agobiantes, pese a pisar constantemente el campo del Sebastopol los blancos no vivían tan agobiados como en la primera mitad. Quiso la desgracia que recibiesen un segundo golpe antes de que pudiesen pensar en una posible remontada.

Markovic se ha convertido en el mejor socio para Junior Moraes esta temporada. El extremo serbio ha dado un convincente paso adelante esta temporada, aunque queda claro que aún tiene mucho margen de mejora, lo que es una estupenda noticia para la hinchada blanquiazule, que disfrutará de su 10 hasta que algún grande se encapriche de él. Una de sus galopadas por banda derecha acabó con el segundo gol de Junior Moraes, una imagen, una jugada ya habitual este año en el Estadio de la República.

De ahí al final, el partido cayó en espiral. La afición blanquiazul celebraba ya el tercer título de la temporada tras Premier y Supercopa, y el Sebastopol inquietaba poco. Su gol del honor llegaría al final, en un tiro libre bien ejecutado por Shugladze que al menos impidió que se fuesen de vacío. Poco consuelo mientras los jugadores del Dinamo levantaban la copa al cielo de Kiev.

0e1d59118263016a051c70d4c0a72e68.jpg

 

  • Autor

RBnRQhc.png

Jornada-27.png

Alineaciones. Calificaciones. Estadísticas. Clasificación.

13 de mayo, 20:00, Aplazado Jornada 27,
Estadio de la República, Kiev, 43.023 espectadores. 

Descafeinado Derby de Kiev. Sin nada que jugarse en los dos equipos, el Dinamo ya era campeón de liga y el Arsenal estaba demasiado lejos de los puestos europeos, el partido acabó por ser soporífero, con un juego ramplón, de escasas llegadas por parte de ambos conjuntos y una intensidad propia de un duelo de pretemporada.

Los blanquiazules ya habían tenido bastantes emociones en esta última semana, optando por introducir rotaciones y dar descansos. Lo poco que se pudiese. Posiblemente la mayor novedad estaba en portería, con el regreso bajo palos del capitán y veterano Shovkovskyi que ya ha anunciado su retirada y esta disputando sus últimos partidos como profesional.

Entre poco y nada que destacar en ninguno de los dos equipos. En líneas generales quizá el Arsenal fue mejor en su conjunto, pero evidenciaron una falta de pólvora arriba que impidió que se llevasen una victoria que no habría sido inmerecida. Por parte del Dinamo, nada que destacar, ni en lo bueno ni en lo malo.

Empate 0–0 justo, reparto de puntos y la única nota negativa la puso la lesión de Junior Moraes, que se tuvo que retirar en el minuto 76', y los primeros pronósticos no auguraban nada bueno.

2opVoAn.png

Dos partidos del Juvenil en este inicio de mes, empezando marzo con una victoria 1–3 al Volyn, con un gol de Munteanu y un doblete de Ikonnikov, uno de los recién llegados que mejor nivel ha dado. Contra el Goverla tropezón en forma de empate 1–1, pagando muy caro nuestra falta de acierto cara a puerta.

Iz9EBtE.png

Confirmados nuestros temores, Junior Moraes se despide de la temporada con su esguince leve de tobillo.

Clasificación agónica para la final de Europa League, un nuevo título con la Copa y la liga ya en el bolsillo. Los partidos de liga que quedan supongo que serán para los menos habituales para no perder más titulares de cara a esa final frente al Liverpool. 

Que planes tiene Rebrov de cara a la próxima temporada? Hay algún banquillo que nos llame la atención? 

  • Autor

pxIDHq3.jpg

ласкаво просимо!  @ansodi

Sufriendo y sufriendo con ganas. La alegría fue mucho mayor, yo estaba que ni me lo creía, y grite como un loco con el gol de Junior Moraes. La liha ya pinta poco, y sí que tengo la intención de ir dando minutos a los menos habituales pero es que tampoco tengo mucho margen para rotar con las lesiones de este año nos han jodido para bien. 

Respecto al año que viene pues Dios dirá. Las noticias de rumores del juego hablan del banquillo del Madrid cuando se retire Adiaanse, que sería un bombazo, y de lo demás pues bastante poco. El Sevilla está libre ahora mismo, y pueden quedar libres Genoa y Werder Bremen y ninguno de los tres me llama demasiado. La posibilidad de seguir otro año en Kiev va ganando fuerza. Me está tocando un poco las narices esto, porque tampoco puedo hacer mi planificación habitual, y tengo muchas dudas. Veremos que pasa,

Gracias por pasar y comentar. Un abrazo. 

  • Autor

RBnRQhc.png

Jornada-29.png

Alineaciones. Calificaciones. Estadísticas. Clasificación.

16 de mayo, 15:00, Jornada 29,
Estadio de la República, Kiev, 68.347 espectadores. 

Con la final de la Europa League a la vuelta de la esquina, el partido contra el Chernomorets era menos que un trámite, se había convertido en una molestia necesaria, un duelo en el que cumplir con el expediente y poder centrase de verdad en el último título que le queda por disputarse al Dinamo esta temporada.

Rebrov volvió a introducir cambios en su once inicial, dando la alternativa como titular a Pushkutsa, uno de los chavales más prometedores de la cantera, y dejando en el banquillo a Boychuk, el goleador del Sub–21. También volvía a ser titular Shovkovskyi, despidiéndose de su afición en su último partido en el Estadio de la República. Homenaje a un portero que es más que un símbolo para los blanquiazules.

Fue mejor partido que el Derby ante el Arsenal. Quizá para dar una alegría a la afición, el Dinamo jugó mucho mejor, aunque los jugadores estaban pensando demasiado en la próxima final europea. Muy buena imagen la dejada por Pushkutsa, todo un perro de presa en el centro del campo, y también muy destacable partido de Churko, el mejor en nuestro ataque.

Sería el ex jugador de los mineros quien abriese el marcador. Churko aprovechó un pase largo de Radchenko para hacer el 1–0, completando uno de sus partidos más completos con la elástica del Dinamo.

Con esa diferencia mínima se iniciaría la segunda parte. El Chernomorets lograría remontar, aprovechando los despistes y la falta de implicación del Dinamo. Balashov que llevaba apenas cinco minutos sobre el campo empató en una jugada a balón parado.

Pasada la hora de juego, Didenko remontaría tras una asistencia justamente de Balashov. Eran los mejores minutos de juego de los visitantes, un arreón que duró poco antes que el Dinamo volviese a hacerse amo y señor del encuentro. Y ya muy al final Diego Suárez puso el 2–2 definitivo de falta directa.

Y0TdQQ1.jpg

Penúltima jornada de liga en Ucrania que deja más o menos resuelta todas las luchas en la clasificación. Queda por decidirse el descenso, del que logra escapar el Volyn después de ganar 2–1 al Vorskla, agarrándose con uñas y dientes a la permanencia. Ocupa su lugar un Goverla que perdió 0–1 en casa con el Kryvbas, cayendo a un pozo del que difícilmente saldrá. Mantiene el farolillo rojo el Zorya Lugansk que empató 1–1 con un Krymteplytsya que matemáticamente no se ha salvado pero que sigue luchando con todo. En la parte alta ganó 0–3 el Shakthar al Sebastopol y 2–1 el Metalist al Karpaty, y ambos conjuntos se jugarán la segunda plaza en la última jornada. Y ronda de empates a gafas, doble 0–0 en el Dnipro–Arsenal y en el Metallurg–Illichivets,

2opVoAn.png

Siguen abiertas las competiciones en categorías inferiores. El Sub–21 podía haber ganado esta semana su liga, pero la derrota 1–2 ante el Chernomorets deja sin decidirse una competición que está siendo más reñida y disputada que otros años. Sin aprobar, el Juvenil empató 2–2 con el Sebastopol, en un partido muy flojo en el que nos pusimos por delante, nos remontaron, y pudimos empatar. También habrá que esperar a la última semana para saber si saldremos campeones.

  • Autor

2wKyJSR.jpg

previa-Europa-League-ruben88fisio.png

París, 20 de mayo, Parque de los Príncipes.

El hogar del PSG acogerá la final de la presente edición de la Europa League, una competición que ha ido perdiendo lustre desde que aumentaron el número de plazas de acceso a la Liga de Campeones. Muy atrás quedan los tiempos en los que sus eliminatorias podían ser igual de emocionantes que las de la Copa de Europa, o incluso más reñidas.

A día de hoy ya no tiene tanta importancia, pero un título continental sigue siendo un título continental y ni Liverpool ni Dinamo Kiev van a renunciar a añadir un nuevo trofeo a sus vitrinas. Porque las finales se juegan para ganarlas, y no existe un solo jugador que renuncie a ganar un título cuando el balón empieza a rodar después del pitido inicial  

Será la primera vez en sus historia que ambos equipos se enfrenten en una final europea, a pesar de que tanto ingleses como ucranianos ya saben lo que es ser campeones a nivel internacional. Dos equipos clásicos, del abolengo más antiguo dentro del panorama europeo por decirlo de alguna manera, con un desempeño actual con suerte más bien dispar.

Aunque suela repetirse la mentira de que en una final no hay favoritos, no se puede negar que el Liverpool está medio escalón por encima en las casas de apuestas. Los Reds completaron una fase de grupos perfecta, ganando todos sus partidos y encajando un solo gol. Su desempeño en las eliminatorias fue más dispar, ganando 8–5 en el global al Evian en dieciseisavos, sufriendo 3–2 con el Benfica en octavos y resolviendo por sendos 4–1 sus eliminatorias de cuartos y semifinales con Espanyol y Borussía Dortmund respectivamente. Por su parte, el Dinamo llegó a la Europa League, tercero en su grupo de Liga de Campeones tras PSG y City, los de Kiev han dejado en el camino a Anderlecht, global de 6–2, a Everton, 1–1, Olympique Lyon, 5–1, y Sevilla, 3–2.

wp4230826-fc-dynamo-kyiv-wallpapers.jpg

Empezando con el Dinamo Kiev que ejercerá el papel de local en París. Toda una institución en el fútbol de Europa del Este y soviético, los blanquiazules ostentan el logro de ser el equipo que más veces conquistó la liga de la extinta URSS además de levantar dos Recopas de Europa en el 75 y en el 86, además de una Supercopa de Europa. Logros que en plena Guerra Fría parecían casi imposibles.

Un pasado que los de Kiev están reviviendo desde que Serhiy Rebrov se sienta en el banquillo del Estadio de la República. Lo que parecía casi imposible hace tres temporadas a día de hoy es la realidad del Dinamo, que ha logrado cambiar la dinámica en Ucrania desbancando a un Shakthar Donetsk que dominaba la Premier como si fuese su campo de juegos particular. El exdelantero blanquiazul, que precisamente empezó su carrera profesional en el Shakthar, ha revertido la situación, conquistando la liga ucraniana durante tres temporadas consecutivas, extendiendo además su dominio a todas las competiciones nacionales. Sin olvidar claro está la histórica Champions League de hace dos temporadas, ganada en una final de infarto y siendo el primer campeón de la Europa oriental desde el Estrella Roja en la máxima competición continental.

Din.png

Con el once inicial del Dinamo confirmado, lo más llamativo es el cambio en el esquema habitual de juego de Rebrov, que renuncia a jugar con un hombre detrás del punta optando por reforzar el centro del campo dando entrada a un pivote defensivo en previsión a la posible superioridad del Liverpool en esa franja de terreno de juego. Aunque el Dinamo disfruta jugando al contragolpe, Rebrov es consciente de que regalar al balón al conjunto Red puede ser suicida ante la calidad de los centrocampistas ingleses. La segunda nota llamativa es la ausencia por lesión de Junior Moraes, el jugador más en forma de cara a gol en los ucranianos, y cuya baja será muy difícil de cubrir. Se había especulado mucho con la posibilidad de que Rebrov desplazase a Kokorin de banda izquierda a punta del ataque, pero finalmente Zhychykov ha sido el elegido para ser el delantero titular.

Conquistadas ya la Premier ucraniana y la Copa nacional, la Europa League supondría un broche de oro para otra campaña de sobresaliente en la historia más reciente del Dinamo. La segunda final europea en tres años, conservando cinco jugadores de aquella primera Champions y que hoy serán titulares, el conjunto blanquiazul vive su mejor etapa y cosechar una Europa League sería un paso más en una plantilla joven que aspira a todo en el futuro.

unique-liverpool-fc-wallpapers-screensav

En las décadas de los '70 y los '80, el Liverpool era sinónimo de miedo y de dominio. Veinte años en los que el Liverpool conquistó once ligas, veintitrés competiciones coperas inglesas entre FA Cup, Capital One y Community Shield, además de cuatro Copas de Europa, dos Copas de la UEFA y una Supercopa. Un palmarés que le catapulta a ser uno de los clubes más exitosos de Inglaterra y de Europa, al mismo tiempo que le sitúa como un equipo con mejor pasado que presente. La UEFA de 2001 y, especialmente, la Champions de 2005 son islotes en mitad de una nada para una afición que empuja a los suyos pase lo que pase.

Acabadas las etapas de Rodgers y de Javier Aguirre, once meses horribles del mexicano que llevaron al Liverpool a coquetear con el descenso el pasado mes de noviembre, la llegada de Ancelotti al banquillo de Anfield quiere otorgar tranquilidad a una institución volcánica desde hace mucho tiempo. El italiano lleva apenas seis meses entrenando a los Reds, tiempo escaso que no obstante ha servido para que el Liverpool se asome a competir de nuevo por los títulos, llegando a rondas finales de las copas domésticas y a esta final de Europa League. Puede saber a poco, pero ganar un trofeo es importante en un club que lo máximo que ha podido celebrar en tiempos recientes es una Capital One. Paso a paso, el Liverpool tiene que reconstruirse antes de aspirar a conquistar cotas más altas.

Liverpool.png

Once de gala para Ancelotti. El entrenador italiano cuenta con sus mejores piezas para disputar la final a excepción del lesionado Álvaro Domínguez, que con esguince de ligamento lateral en una rodilla aún estará varios meses lejos de los terrenos de juego. Los que si estarán disponibles serán Yarmolenko y Luis Suárez, las armas más letales de toda la plantilla Red. El ucraniano, que se enfrentará a su antiguo equipo, y el delantero uruguayo están completando una magnífica temporada a nivel individual, anotando entre los dos veintiséis goles en la Premier Inglesa, a los que hay que sumar los doce goles que lleva Luis Suárez en la Europa League y que le convierten en el máximo realizador de la competición. El centro del campo es el coto de caza de Lucas Leiva, uno de los jugadores más sacrificados y destables cada año en la plantilla Red. En el banquillo esperará Gerrard, capitán y símbolo de la afición del Liverpool, que ya ha anunciada su retirada y que este sería su último partido como jugador Red.

Campaña liguera para el olvido la del Liverpool, que con esta suma quince temporadas sin conquistar la Premier, que se dice pronto. Esta temporada los Reds han terminado la liga en séptima plaza, tan solo a cuatro puntos de los puestos Champions, pero a veinticinco del campeón, una distancia abismal para un equipo tan laureado a nivel nacional y europeo. Eliminados en cuartos de final por un 4–2 en la FA Cup por el Machester United, y por 3–2 en Capital One a manos del Newcastle en semifinales, la Europa League se ha convertido en la última bala del Liverpool, la única para salvar una temporada mediocre. Europa como balsa de salvación, como ya hiciera en el 2001 o en el 2005.

Únete a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte después. Si ya tienes una cuenta, accede ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a este tema...

viendo esta sección 0

  • Ningún usuario registrado viendo esta página.