Enero 19, 20196 años Simplemente debo decir que me ha encantado todo. La idea principal, la forma en que lo estás contando... Pinta que será una historia excelente Paso a desearte el mayor de los éxitos y desde ya tienes un nuevo seguidor Estaba por colocarte una frase en georgiano pero el traductor de Google al español no está muy fino. Puse "los mejores deseos para las futuras estrellas de Georgia y el mundo" pero cuando re-traduje al español el resultado (para ver si estaba todo bien) figuraba "estoy buscando sobrevivientes" jaja algo mal hice... de todas formas, ¡ojalá estos dos futuros cracks logren todo lo que se propongan! ¡Saludos!
Enero 21, 20196 años Autor @jdbecerra Que bueno verte otra vez por acá! Gracias por tu comentario crack, veo que ya te vas inclinando por uno de los hermanos. Eso si, si vas a ser su fan hay que escribir bien el nombre . AARON, sin ó, AARON. Un saludo, espero que te sigas pasando . @panda_666 Bienvenido! Que bueno tenerte por acá. Gracias por el comentario, veremos que nos traerán los hermanos Lomidze. No puedo con lo de la frase , que habrá pasado ahí, nadie lo sabrá. Google y sus momentos de locura . Aún así lo que vale es la intención. Nuevamente, gracias por tu comentario y las buenas vibras, espero verte a menudo por tierras georgianas. Eso si, recuerda no usar el Google Translate . Un gran saludo crack .
Enero 22, 20196 años Autor Popular - ¡Aaron, Romain! Es Zurab. - ¡Aaron, Romain! Bajen. Traigan sus cosas para jugar. Zurab Maisuradze. Nuestro querido amigo. Vecino del barrio, compañero de fútbol, colegio, travesuras y muchas otras cosas. De esos que se tienen solo una vez en la vida. - ¿Que mierda quiere ahora? - me dice Romain exhalando aire con un poco de estrés. Decide pararse y sacar la cabeza por la ventana. - ¿Que mierda quieres ahora? - le grita. Nunca es buena idea malograr la siesta post-almuerzo dominguero de los hermanos Lomidze. - Romain, hay una prueba. El Saburtalo. - ¿Que? Exprésate bien animal. ¿Que clase de prueba? ¿Saburtalo? - ¿Quieres ir a jugar fútbol? Mi hermano voltea hacia el cuarto y me mira. - ¿Quieres ir a jugar fútbol? - me dice. - Meh, no tenemos nada mejor que hacer. - digo encogiendo los hombros y aún tirado en mi cama. Romain vuelve a sacar la cabeza. - Espéranos abajo. Ya vamos. [...] Y ahí estamos los tres. Como toda la vida. Caminando hacia alguna cancha de fútbol en algún lugar de Tiflis. Como siempre hemos hecho y haremos por el resto de nuestras vidas. Es lo que nos hace felices. - ¿Alguien más del barrio está yendo a esa prueba? - Si. Valeri, Daviti. - ¿Alexeiy? - Pff, como crees que Alexeiy va a ir a una prueba de un equipo profesional. El juega con nosotros porque es gordo y tapa todo el arco. Yo me extraño. ¿Equipo profesional? En que nos ha metido ahora este enano. - ¿Cómo que equipo profesional? - alcanzo a preguntar. - El Saburtalo. Son pruebas para entrar a su equipo Sub-17. - Zurab, eso es mucho. ¿Sabes el nivel que hay en este tipo de pruebas? - Ay, ay, ay, los siempre humildes hermanos Lomidze. Como si ustedes no conocieran el nivel de fútbol que tienen. Además, que problema hay. Vamos a divertirnos y jugar. A enseñarles un poco como lo hacemos en el barrio. Miro a Romain, buscando una respuesta. Algo que me tranquilice como el siempre hace. - Vamos a divertirnos y a jugar. De eso se trata el fútbol. [...] Llegamos a las instalaciones del Saburtalo. Una cancha de fútbol 11 muy bonita, dos canchas algo más pequeñas y un terreno verde con conos y circuitos de diferentes tipos. Vemos un grupo de gente disperso. Dos chicos se nos acercan corriendo, son Valeri y Daviti. - Al fin llegaron. - dice burlón Daviti. - En un rato comienza, cámbiense rápido. Tienen que ir donde la señora de ahí en la mesa a recoger su uniforme de prueba. - nos advierte Valeri. Ya cambiados, un hombre toca el silbato y nos llama a todos. Arma un circulo con nosotros, el se pone en el centro con quien parece ser su ayudante. - Buenas tardes. Mi nombre es Revaz Gotsiridze. Soy el entrenador del equipo B y el equipo Sub-19 del Saburtalo. Como ustedes ya deben de saber blah blah blah blah blah blah el Saburtalo es un equipo reconocido en Georgia por su meteórico ascenso en los últimos años blah blah blah blah blah blah fundado en 1999 se concentró en el desarrollo de jóvenes blah blah blah blah blah campeones numerosas veces en las categorías menores blah blah blah blah desde 2012 participa en el fútbol profesional georgiano blah blah blah blah buscamos desarrollar a los mejores jugadores de Georgia. Esperamos que ustedes puedan demostrar estar al nivel del club. Aburrido. - Contamos ahora con 33 chicos que han venido de diferentes partes de Tiflis. Lamentablemente solo 20 entrarán al equipo Sub-17. Es por ello que empezaremos con algunos circuitos y trabajos tácticos. Por favor los arqueros blah blah blah blah blah blah los delanteros por allá por favor. Delantero. Yo. Yo soy delantero. Volteo a ver hacia donde señala la mano del señor ese y me dirijo hacia allá. Uno, dos, cuatro, seis, once, catorce. Mierda. Son demasiados. Por suerte esta Daviti ahí también. - Hey. - Aaron. - Oye, ¿son demasiados delanteros no crees? - Ni me lo digas. Todos quieren hacer goles. - ¿Y los demás? - Tu hermano se fue con los mediocampistas junto a Valeri. Zurab está con los defensas. - ¿¡Que!? - Lo mismo pienso. Aún le duele aceptar que la pubertad nunca lo alcanzará. Ambos lanzamos carcajadas, es que es para reír. 17 años y mide 1.72. No por nada es "El enano". Mientras Daviti y yo reímos, el encargado se acerca junto a su ayudante. - Señores delanteros. ¿Como estamos? Antes de empezar, por favor, voy a necesitar que cada uno entregue su identificación acá al señor... Volteo y miro a Daviti. No he traído nada de eso. - Daviti - susurro. - ¿Que pasa? - susurra de vuelta. - No traje nada de eso. - ¿Que? ¿Zurab no te dijo? - No. Ni a mi ni a mi hermano. - Señores por favor. Un poco de respeto. - nos regaña el jefe. - ¿Que está pasando? - Lo que pasa es que no traigo mi identificación señor. - ¿Cómo? Si lo dice explicitamente en el afiche. - ¿Que afiche? - Dios mío, pasa por acá por favor. El hombre me lleva hacia las instalaciones del club. Yo ya empiezo a sofocarme. He venido a jugar y divertirme, no a pasar una vergüenza en frente de catorce aspirantes a delanteros ni ha entrar a un equipo de fútbol. Llegamos a una puerta y me hace pasar. - Teimuraz - dice el encargado de la prueba. - este muchacho supongo que es el hermano del señor Romain. Veo a Romain sentado en la oficina. Se que siente lo mismo que yo y quizás un poco de odio hacia Zurab. - Que pase. - dice el hombre de la oficina. - Tu espera afuera por favor. Ahora arreglo esto. Paso y me siento al lado de mi hermano. Miro al señor, un hombre con el pelo gris, algo mayor, pero no mayor de 60. Parece inteligente y viste de manera elegante y cómoda. Parece importante. - Teimuraz Shalamberidze. Un gusto. - saluda. - ¿Ustedes? - Yo soy Romain Lomidze. El es mi hermano menor, Aaron. - Romain, ese nombre no es común en Georgia. ¿De donde viene? - Es por Román Riquelme, ex-futbolista argentino. - Si, lo conozco. ¿Y tu Aaron? ¿Tu nombre? - Es por el significado egipcio. Guerrero león. También tengo segundo nombre. Lucca. Porque nací en Italia y mis padres quisieron llevarse un recuerdo de eso. Así que decidieron ponerme un nombre italiano también. - Bastante curioso - dice Romain mientras me mira burlón. El sabe que me molesta el origen del "Lucca" que tengo que llevar. Habría preferido algo menos forzado. El hombre se ríe un poco, pone las manos sobre la mesa y se inclina un poco hacía nosotros. - Entiendo que tienen problemas para dar la prueba. - Si señor. Lo que pasa es que unos amigos nos hicieron venir y la verdad no sabíamos mucho de que se trataba. Solo queremos jugar fútbol y divertirnos. - le respondo. - Ya veo... . Es que tienen que entender que necesitamos sus datos para asegurarnos que no están haciendo algún tipo de trampa. - Señor, con todo respeto, nosotros nunca haríamos algo así. Lo único que queremos es jugar. El fútbol es lo que nos divierte. Vinimos porque nos prometieron un partidito y eso es lo único que queremos. - Bueno. Si saben que para jugar el "partidito" primero hay que pasar las pruebas previas, ¿no? Esto es una prueba para un equipo profesional. Romain y yo nos miramos. Carajo. El señor ríe. - Miren, hagamos un trato. Si ustedes pasan las pruebas previas, yo los inscribo acá en mi base de datos, confiando en sus palabras de que no me están mintiendo. Así ustedes pueden jugar su "partidito" sin problemas. Pero si no lo logran, se van para casa, se buscan otro "partidito", yo no me preocupo por si están mintiendo o no, y la próxima vez que vayan a una prueba recuerden llevar una identificación. ¿Estamos? - Si señor. - Si señor, gracias. - Venga, vayan para allá. Revaz. - llama al encargado. - Llévate a los hermanos, que hagan las pruebas. Salimos de la oficina. Seguros y con un objetivo, jugar el partidito. Nada nos iba a detener. [...] - Y por último, Romain y Aaron Lomidze. Por favor los demás retirarse. Muchas gracias por venir, no se den por vencidos nunca. Los que fueron llamados, por favor quedarse acá y re-hidratarse. Lo logramos, entramos a los últimos 22, justo para jugar. Daviti, Zurab y Valeri también lo lograron. Todos estamos juntos, pasándola bien. Tomando los Gatorades y jugando con un balón que logramos sacar de una de las bolsas. No hay nada mejor que el fútbol. Pasado el tiempo de rehidratación nos vuelven a llamar. Ahora el encargado de las pruebas no está solo, lo acompaña el señor de la oficina que nos hizo pasar. Teimuraz creo que se llama. Nos hacen formarnos en media-luna alrededor de el. Mis sospechas eran correctas, su puesto es importante. - Buenas tardes. Soy Teimuraz Shalamberidze, jefe de desarrollo de juveniles del Saburtalo. Antes que nada, felicitarlos por lo que han logrado. Son lo mejor de lo mejor de Tiflis. Han pasado una prueba que, por más fácil que pareciese, no muchos la han conseguido. Quiero que entiendan que el Saburtalo es la mejor cantera de Georgia, muchos podrán pensar "Dinamo Tiflis", pero no. ¿Quienes creen que le producía los jugadores al Dinamo? Nosotros. Estoy muy feliz de ver a 22 muchachos hoy, hace mucho tiempo no lo conseguíamos. Muy pocas veces hemos sido siquiera 15 chicos. Muchas veces, porque la gente de su edad tiene miedo al fracaso. Pero, ¿que es el fracaso sino el inicio del éxito? De los errores se aprende, dicen muchos, yo suelo pensar que de los fracasos también. Y por eso, que antes de empezar la prueba final, quiero que entiendan una cosa. Muchos de ustedes sueñan con ser futbolistas profesionales, otros solo buscaban un "partidito". Ahora mismo, cada uno de ustedes es considerado de lo mejor de Tiflis y así no entren en los últimos 10 elegidos, la posibilidad de ser futbolista profesional está totalmente abierta para ustedes. Así que no se frustren, no tengan miedo a no ser elegidos hoy. Intenten. Cada fracaso es un nuevo inicio. Luchen. Consíganlo. Mucha suerte y diviértanse con el partido. Silencio, seguido de aplausos y arengas entre nosotros. El ambiente es increíble. Zurab nos intenta motivar. Nadie esta más emocionado que el. - Bueno, los equipo se van a repartir de la siguiente manera blah blah blah blah blah blah blah Zurab Maisuradze, Equipo A blah blah blah blah blah blah Daviti Chkheidze, Equipo A blah blah blah Valeri Melkadze, Equipo A blah bla blah Romain Lomidze, Equipo A y Aaron Lomidze, Equipo B Mierda. Estoy jodido. Estoy totalmente solo. Los muchachos me miran con pena, como diciendo "Mala suerte, la próxima le tocará a Zurab tranquilo.". Por un momento lo había soñado, había pensado que podía ser futbolista, pero no se. Quiero serlo. Se que tengo la oportunidad, estoy tan cerca. No lo voy a echar a perder. Yo no hago eso. Me acerco al equipo que me tocó, veo que uno ya tomó el rol de líder y los demás lo escuchan. Voltea a verme. "Corre, ¿no ves que ya estamos organizándonos?". Idiota. - Tu debes de ser nuestro otro delantero. - Si. - Ya, entonces tu juegas por la derecha. Yo voy a ir por tu banda. 4-4-2 es la formación. - ¿Quien eres tú? No soporto a ese tipo de gente. El solo alcanza a reírse y me mira desafiante. - Tu capitán esta tarde. - me responde. - No, yo no tengo capitán. Soy delantero y eso voy a hacer. No necesito que me digas donde tengo que pararme. El resto del equipo nos mira. Algunos murmuran, otros se ríen. - Vamos a jugar, ¿quieres? - le digo, camino hacia el centro del capo y agarro la pelota. Listo. Saque para nosotros. El partido empieza y yo me tranquilizo. Es mi momento y nadie me va a parar. Menos de cuatro minutos y ya nos presionan como desgraciados. Romain y Valeri hacen lo que quieren con mi equipo. Nos están pegando un baile. En una de esas nuestro arquero saca y voy a pelearla arriba. Cabezazo. No, mejor pecho. Es mía. Abro hacia la derecha por donde va corriendo el idiota. El conduce y yo lo acompaño. Somo dos contra cuatro. Le pido la pelota al hueco y de un movimiento paso por la espalda de los dos centrales, la pelota que me puso fue perfecta, la pico. Gol. 1-0. Daviti saca para Romain. Nuevamente nos están pegando un baile. En una de esas dan un mal pase para atrás y me llevo al pelota, me apoyo por la izquierda y hacemos una pared tremenda, me voy de los defensores y tengo toda la cancha libre. Zurab viene desde mi derecha a cerrarme, fácil, como en el barrio. Caño y para casa. Defino al segundo palo. El arquero rival parado. 2-0. Ese hay que celebrarlo. - Que hijo de puta eres. - me dice Zurab. - Es con cariño, bebé. - y le mando un besito. Agarramos confianza y salimos a presionar más. Funciona. Conseguimos un tiro de esquina. La pido para el primer palo. Me lo dan, a base de goles me hice capitán. Me adelanto a uno de los centrales de ellos, cabeceo, gol. 3-0. Así de fácil. Medio tiempo. [...] - Revaz. Pon a los hermanos juntos. - No podemos cambiar el equipo así nada más. - Hazme caso. Tengo una corazonada. - Nunca he hecho eso en mi vida... - ¿Quieres ver fútbol? Hazlo. - Bueno. [...] Mientras me re-hidrato con mi equipo, se me acerca el encargado de la prueba. - Lomidze. Cambias de equipo con el señor Virsaladze. ¿Que? ¿Por que? No. O si. No se. Mi conflicto interno empieza. No es lo correcto, pero jugar con mis amigos, con mi hermano es mucho más divertido que jugar con desconocidos. Pero, no se. Ya le cogí cariño al equipo gris. Al idiota. Ya me respetan. - Lomidze. Dale tu camiseta al señor Virsaladze. - Si, si. Perdón. Y ahora juego para el A. Que irónico, cuando ya no quería hacerlo. Me acerco hacia donde están ellos. - Miren quien llegó. - dice Daviti. - Había que inclinar la balanza. - le respondo. Romain me pega en el cuello. - Bájate de tu nube niño. - me dice. - O al menos recupera la dignidad del enano. Todos se ríen. - Me agarró por sorpresa. - se defiende Zurab. - Te viene haciendo lo mismo desde que tiene cuatro años. - se burla Valeri. Todo el equipo se vuelve a reunir. Romain da algunas indicaciones. El es el único capitán que podría respetar. - Y ahora que nos robamos a la estrella del otro equipo - dice burlón - , a darle la vuelta y ganar esto. ¡Vamos! - termina. Todos se unen y gritan como equipo. Al final, esto es es fútbol. Me toca jugar con Daviti arriba, como he hecho toda mi vida. Romain justo abajo de los dos, como ha sido siempre. Valeri un poco mas pegado a la banda. Comenzamos. Toco atrás para sacar. Romain. Valeri, conduce. Romain, abre hacia la izquierda. Centran. Daviti la peina para atrás, entro y gol. 1-3. Sacan ellos, el partido se lleva con tranquilidad. Dan un mal pase y nuestro "6" tiene el balón. Abre para Valeri que corre. Llega hasta la linea de fondo y centra. Daviti y yo jalamos la marca para que Romain entre solo y defina de volea. Sublime. Minutos más tarde, pared con Daviti, le hacen foul. Romain la toma y la mete. Sin problemas. Empates. El partido sigue. Los del B me empiezan a entrarme duro. Intento tranquilizarme. Romain toma la pelota y corre, se que va a hacer, siempre lo hace y nunca falla. Le hago al cortina. Me llevo al defensa, el entra solo y define cruzado. Veo que el señor Teimuraz aplaude. 4-3. Nos atacan por la izquierda, Zurab la gana, regatea y manda un pelotazo largo para que yo corra. Voy. Tengo la pelota y en eso veo que el idiota me está yendo a reventar, caño y sigo. Me persigue, tacón, rotura de cadera, no era necesario para el partido, pero para mi si. Se la entrego a Romain, el para Daviti al hueco y gol. Yo miro al idiota y volteo rápido. Como me gustaría reventarlo contra el piso. Ahora va Romain por la izquierda. Regatea sin problemas. Dos enganches, se perfila. Ya se que va a hacer. Corro al hueco, centro perfecto, la peino y gol. 6-3. El partido es prácticamente nuestro. Valeri recupera un ataque y corre por la derecha hasta la linea de fondo. Envía el buscapié, Daviti la deja pasar voy a llegar y siento la patada por detrás. Se quien fue. Me paro al instante, lo voy a matar. Pero Romain es más rápido. - ¿¡ERES IMBECIL!? - Aaron, cálmate mierda. - ¡NO TE MATO PORQUE NO VALE LA PENA! ¡COMEMIERDA! - ¡AARON! La rabia me invade el cuerpo. Romain me agarra los brazos y se pone en frente mío. Veo como el idiota me mira. Me desafía. El árbitro se lo lleva del resto. - Aaron tranquilo. Ya lo humillaste en el campo. No vale la pena. Mi respiración es fuerte. Mi rabia es grande. Pero la razón puede sobreponerse al instinto. Todos los demás se me acercan. - Es un pobre idiota, cuando lo vea por el barrio lo matamos. - me dice Zurab. - Toma. - Daviti me da la pelota. En eso, el arbitro pita el final del partido. Mala idea. Lo busco como loco. Lo voy a matar. Valeri me abraza celebrando. - Olvídate de eso, vamos con el equipo. - ¿Terminó? - Si, si. No se por que, pero decidieron acabarlo ahora. - Lo... - No seas idiota. Nunca aprendes. Celebra. Diviértete. [...] - Muchas gracias a todos por venir. En la semana, si es que fueron seleccionados, les llegará una invitación por código postal para venir al club el día 1 de julio. De esa manera, se terminó la prueba. Los del barrio nos juntamos, arreglamos nuestras cosas, hablamos y pensamos como ir a nuestras casas. Nadie tiene dinero, así que iremos caminando, aunque sean las 8 de la noche. Mientras nos acercamos a la salida, el señor Teimuraz nos llama. - Muchachos. ¿Puedo hablar con Romain y Aaron un momento? - Vayan yendo ustedes. - le dice Romain a los demás. Los chicos se despiden y se van. Tengo miedo. ¿Se habrán molestado? No fue mi culpa, fue la del idiota. Nadie en su sano juicio entra así, encima perdiendo 3-6 y siendo humillado. - Muchachos. Ustedes son increíbles. Nunca he visto a dos chicos que se muevan de esa manera en el campo. Es como si fuera telepático. Nos quedamos en silencio. - ¿En que club han jugado antes? - pregunta. - Ninguno señor. - responde Romain. - ¿En serio? - Si. - vuelve a responder mi hermano. - Alguna clase de formación futbolística, alguna academia... - Nada de eso. Nosotros aprendimos a jugar en el barrio. Con nuestros amigos. - vuelve a decir Romain. - ¿Torneos? ¿En el colegio? - Nuestro colegio es muy pequeño. - le digo yo. - Habremos hecho algún que otro torneo amistoso con distintos barrios, pero nada oficial. El señor Teimuraz nos mira con extrañeza. - Tienen un talento natural. - Ehm, gracias. Supongo. Yo sonrío, esas respuestas solo las hace mi hermano. - Quiero que firmen por el Saburtalo. Me congelo. Romain también. - Me la juego por ustedes muchachos. Quiero que firmen un contrato por tres años. Mañana lunes los quiero acá a primera hora para firmar los papeles. Traigan a sus padres o apoderados. No hay respuesta todavía. - Lo tienen todo para ser los mejores jugadores de Georgia por mucho tiempo. Su conexión con el fútbol es única. ¿Será verdad? ¿Estamos soñando? Nunca pensé en ser futbolista. Nunca estuvo en mis planes. El fútbol solo era una manera de divertirme, lo que más me gusta hacer en mi vida, pero de ahí a ser profesional. Romain y yo nunca lo tuvimos en mente, nunca barajamos la oportunidad y así, de pura casualidad. Somos futbolistas. Somos la esperanza de Georgia. - No me defrauden. Van a ser mi fichaje personal. Los primeros que hago en mi carrera. De manera fraternal, nos da palmadas en las espaldas a los dos y nos dice que nos vayamos a nuestras casas. Y nos vamos. Atónitos. Con la vida cambiada. Los sueños encontrados. [...] Son las 9:30. Romain abre la puerta con cuidado. - ¿Donde estaban muchachitos? Mierda, mamá. - Jugando fútbol. - dice Romain. - Una prueba en el Saburtalo. - añado. Romain voltea y me mira. Sabe que si abro la bocota mamá nos va a tener hasta las 12 haciendo preguntas redundantes y ahogándonos con ideas, sobre un tema que ella desconoce. - Es es el club de fútbol de allá, ¿no? De Saburtalo. - Si mamá. - le digo. - ¿Los de rojo? ¿Que desarrollan jóvenes y todo eso? - Si mamá - vuelvo a responder. - ¿Y? ¿Que tal les fue? ¿Destacaron? ¿Los seleccionaron? - Nos fue bien mamá. Estamos cansados, ha sido un día largo. Buenas noches. Te queremos. Romain sube corriendo y me jala para arriba. Entramos a nuestro cuarto, cada uno se tira en su cama, mirando al techo. - Romain. - le digo. - Somos futbolistas. - Si. - me responde, con una sonrisa de esquina a esquina. Si tan solo mamá también supiera. Editado Enero 22, 20196 años por Messi456
Enero 24, 20196 años Gran comienzo de historia, en Fm es complicado llevar el formato que planteas pero desde luego que me interesa mucho. Un saludo y disfruta el save!
Enero 24, 20196 años Incluso sabiendo de antemano que los iban a seleccionar, estuve pendiente de que pasaría al final de las pruebas. Vaya goleador tenemos en Aaron, que barbaridad de goles. Pero la magia y llegada de Romaian es espectacular. Con estos dos hermanos y algún que otro que apoye, Georgia dominará el mundo. Con ganas de ver como les va ahora con los profesionales. Saludos.
Enero 25, 20196 años Los hermanos Derrick jaja. Haber como se comportan en el Saburtalo. Espero leer sus éxitos
Enero 25, 20196 años Lo único que diré es que, yo, como un enano de 1.67 me siento ofendido. Nah broma los chicos van bien, espero ver como se desarrollan sus amigos y si es que irán apareciendo rivales en el camino.
Enero 28, 20196 años Autor @Javi_Coso ¡Bienvenido a la historia! Gracias por el comentario. Si bien es algo complicado llevar una historia así, el FM no es más que un simulador que te da bastantes libertades a la hora de escribir historias. Claro está que las decisiones que podría llegar a tomar yo como DT no influyen directamente en la historia como en otras ocasiones en las que nos centramos en lo deportivo y el equipo y/o manager. Sin embargo, aquí estoy, con muchas ganas de llevar este proyecto pa' lante . Un saludos y espero que te sigas pasando . @jdbecerra Bienvenido nuevamente por tierras georgianas crack . Que me comentes lo que sentiste me pone muy contento, es justo la razón por la que me gusta escribir en general y tu comentario me indica que lo estoy haciendo bien . Empiezo a pensar que Aaron es tu favorito . Ese comentario sobre Romain no me convence tanto como las flores que le tiraste al menor de los hermanos. Que ya van dos veces . Veremos que nos depara de ambos en la selección, quizás algún amigo que los pueda apoyar . De todas formas, falta mucho todavía, que no tienen ni 18 años los muchachos. Ya se vendrán las aventuras de los hermanos. Estate atento. Un gustazo tenerte por acá. Espero seguir viéndote por Saburtalo. @nisetru ¿Que tal todo? ¡Espero que bien! Entendí esa referencia . Habrá que ver si en algún momento se animan con la catapulta infernal. Tendrá que ser en la final del mundial 2026 entre Georgia y Alemania . Espero verte seguido por acá, para seguir el desarrollo de estos cracks juntos . Un saludo! @Maestro ¿Que tal? Perdóname no hablo con enanos . Hay que ver que pasa con los muchachos. ¿Rivales? ¿Te refieres a rivales tipo cierto anime japonés que conquistó el mundo en su momento? Un saludos maestro, te espero de vuelta!
Enero 28, 20196 años Autor Popular Han pasado ya poco más de dos semanas desde que llegué a Georgia. Hemos trabajado con el equipo durante este pequeño parón veraniego que hacen en la liga, si bien no ha sido tanto como me gustaría, dos partidos me han servido para ver más o menos como plantear los partidos de liga. Además, la forma física fue de suma importancia, claro está. No voy a llegar a ningún lado si mis jugadores se cansan después de los noventa minutos. Dos semanas enteras de trabajo físico por las mañanas, reuniones tácticas por las tardes y partidos los domingos. Para suerte mía, el club finalmente pudo contratar a Peter Leven. Mi mano derecha. Duró más de lo que pensábamos, porque el Hibernian lo quería para suplirme en el puesto que había dejado libre, pero unos cuantos euros y Peter se enrumbó a Saburtalo. La plantilla me ha dejado algo satisfecho. El nivel es alto a comparación de los demás equipos que nos enfrentaremos, solo hay que recobrar esa confianza que perdieron mis jugadores por ir tan mal en la liga. La presión que puso media Georgia sobre ellos no fue fácil de manejar, sumado a la mala relación con el antiguo entrenador... nada podía salir bien. Por suerte hay jugadores de buen pie, muchachos con los que trabajar y usar como bases para esta nueva mitad de temporada y por que no, poniendo miras al campeonato del próximo año. [...] - Bueno Michael, el club consiguió esto. - Me estas jodiendo. - El bus del equipo esta en el taller y esto es lo que consiguió el "presi". Yo, no puedo hacer nada. - ¿Vienes tu con nosotros? - ¿Estás loco? Yo no me subo a eso ni aunque me paguen para ir. Un viaje de cuatro horas hasta Chokhatauri en esa carcocha. Mejor me quedo en mi oficina con aire acondicionado y jugando un poco de Football Manager. Teimuraz se ríe. Yo no encuentro la gracia. Para el primer partido de mi vida con el Saburtalo me me envían en un pedazo de hojalata que se esta cayendo a pedazos a un pueblo de mil habitantes en medio de la nada a jugar con un equipo semiprofesional. Tranquilamente podríamos habernos quedado en Tiflis, pero no. Este presidente, no es lo más inteligente que digamos, pero es un dictador. Teimuraz lo sabe y por eso no discute mucho con el. Creo que tendré que ser así yo también. En el camino voy conversando con Manolo Hierro, nuestro director deportivo. Hablamos del fútbol en general, de Georgia. Manolo me cuenta mucho sobre como es vivir acá, la cultura, la gente y el fútbol, el lleva ya dos años en este país. Yo por mi parte, le hablo sobre el tema de contrataciones, mi cuerpo técnico, las preocupaciones que tengo con la plantilla. - No te preocupes Michael, te puedo dar una mano. Dame un tiempo y te traigo un preparador físico de buen nivel. - Necesito un segundo entrenador. - Creo que sería mejor si tu contactases a alguien que conoces. Alguien de confianza. Es lo que necesitas. Más que nada porque estás solo en este nuevo país. En ese momento pensé en Peter. Mi gran amigo, mano derecha en todos estos años en Escocia. Ahora solo tendría que contactarlo, plantearle la oferta y discutir con el presidente. Supongo que eso sería más o menos un calentamiento de lo que serán mis próximos años en Georgia. [...] El vestuario es pequeño, es un club semiprofesional, no podíamos esperar mucho tampoco. Mientras los jugadores se preparan, yo voy escribiendo los nombres y apuntando la manera en la que vamos a salir a disputar este partido de práctica. Veo a los dos hermanos. ¿Que jueguen? ¿Si? ¿No? Lo pienso. Mucho. Ellos están tranquilos, felices de haber sido convocados con el primer equipo a pesar de su edad. Yo preocupado. Teimuraz me pidió que al menos los pruebe un poco, no estoy seguro. Dependerá de como va todo, pero de titulares hoy no van. - Bueno muchachos - aplaudo para llamar la atención de todos - saldremos con una 4-2-3-1. La idea principal va a ser manejar el partido. Vamos a salir tranquilos, esto al final es solo para probar. No les voy a pedir que tengan la pelota, ni que ataquen como bestias. Que el partido se dé como se tiene que dar. Cojo mi pizarra y empiezo a poner las fichas y nombrar a los titulares. Cuando llego al centro del campo, me interrumpen. - Mister. - en un inglés medio africanizado. - yo me siento más cómodo jugando un poco más atrasado, como de "6". Es Tera, el keniata. - De mediocampista no me va tan bien, porque no apoyo en el ataque tanto como debería. Mejor sería si... - Está bien. Muevo la fichita un poco más atrás. - ¿Alguna otra queja? - Yo juego mejor algo mas retrasado. Subo la cabeza para mirar y muevo la ficha un poco más hacía atrás, paralelo con el mediocampista. - ¿Así? El silencio en el vestuario invade a todos. Yo los miro. - Salgan, vamos a jugar. Dejen de preocuparse por las fichas y juguemos al fútbol. Diviértanse. [...] De vuelta en Saburtalo, leo mis apuntes. El partido fue tranquilo. Sin muchos sobresaltos, lo que uno espera de un partido amistoso. Ganamos 2-0 y dominamos el partido. La manera en la que los jugadores se desenvolvieron en ataque me dejó satisfecho. Un poco más de definición y no deberíamos de complicarnos mucho. Los jugadores se van despidiendo y se retiran a su casas, mañana a primera hora los necesito en el club. Mientras leo mis cosas, Teimuraz se acerca. - ¿Y? - Partido simple, no nos exigieron mucho. Preferiría jugar más teniendo el balón. - ¿Los jugadores? - Se preocupan por estupideces como las fichas de la pizarra, pero en general juegan bien. Hicieron un buen trabajo. - ¿Los hermanos? Sabía que me preguntaría por eso. - Jugaron media hora. Tranquilos. No hicieron gran cosa, pero tampoco hay que decir que fueron unos troncos. Cumplieron. Teimuraz me mira y asienta con la cabeza. - ¿Crees que puedan ir desde el inicio en el amistoso contra el Aragvi? - Ahí veremos. [...] Veo a los jugadores calentar, ante un estadio vacío. Poco más de 100 personas. Me causa una sensación de soledad, ver algo tan desgarrador como un estadio de fútbol sin gente. No hay nada peor que eso. Voy pensando en como parar al equipo. Romain ha venido trabajando bien, sería bueno darle una oportunidad y de paso tranquilizar así a Teimuraz, que no se por qué anda tan ansioso con los chicos. Llamo a los jugadores al vestuario. Una vez dentro, doy el equipo de partida. Muchos se sorprenden al ver que he nombrado a Romain, hasta el propio chico me mira con ojos de ilusión y gratitud. En el vestuario aplauden y lo felicitan. "Hay que reconocer el trabajo" digo para de paso animar a los demás jugadores. Salimos todos hacia el estadio y los once van para el campo. En cada paso que da, Romain voltea y mira hacia el banco. Una vez que el partido empieza, no voltea más. El partido está desarrollándose de manera tranquila, tenemos el balón, dominamos las ocasiones. Veo a los muchachos moverse bien en el campo, mejor que en el partido pasado. El juego se desarrolla por el lado izquierdo del campo. Giorgi Kokhreidze lleva el "tempo" del partido. Poco antes de la media hora, lo impensable pasa. Un tiro de esquina para el Agravi. La situación parece controlada por el centro tan flojo que hizo el jugador rival, pero un error en la defensa da todo el espacio a su delantero que anota. Estamos perdiendo. Perdiendo. El Agravi tiene ahora una ventaja y un colchón para evitar la derrota. El entrenador los obliga a replegarse y jugar de una manera aún más defensiva. Nosotros atacamos, pero no encontramos espacio. Termina el primer tiempo. Poco o nada digo en el entretiempo. Poco o nada tenía que decir. Los jugadores salen igual, pero la moral esta destruida. No hay ganas, no hay ideas. Veo a quienes debían de manejar mi equipo con muchas dudas y a Romain confundido. Su esfuerzo no se ve recompensado en el partido, corre de un lado a otro, recibe la pelota e intenta jugar, pero es complicado. Cinco minutos tuvieron que pasar para que haga los cambios necesarios. Cuatro jugadores salen, cuatro entran, entre ellos el otro hermano Aaron. El equipo cambia de cara. Más ataque, más movimiento. Aaron se mueve en el área de gran manera y los cambios en el mediocampo también permiten más libertad a Giorgi y Romain. En eso, una jugada de Giorgi por la izquierda genera peligro. El muchacho corre, elude a un defensor y manda el centro. De entre los dos defensores aparece Aaron, que mete la cabeza y define abajo al lado derecho del portero que ni se inmuta. Lo celebra con gran entusiasmo. Empatamos. A medida que pasa el tiempo, nuestra superioridad se hace más evidente. Movimientos rápidos, transiciones peligrosas. El equipo se mueve como me gustaría. En eso, Romain recibe una dura falta en la puerta del área y se agarra el tobillo acompañado de una cara de dolor. No me la voy a jugar. - Diasamidze, entra. ¡Romain, ven! El muchacho me mira. - ¡Que salgas! Romain se para y camina hacia el banco. Se hace el cambio y yo lo agarro del brazo. Me mira. - Bien jugado. Hiciste lo que tenias que hacer. El muchacho se muestra conforme y callado se va a sentar. La pelota sigue rodando, el fútbol continua, el empate persiste. Atacamos mucho, pero de poco sirve. Su defensa es impecable. El tiempo pasa, los jugadores se desesperan de más. El tiempo añadido se muestra. Dos minutos. Pido calma, al fin y al cabo es un amistoso. Por otro lado, quiero ganar. Todos los partidos hay que ganarlos. Veo mi reloj, tiempo cumplido, pero el arbitro continua. En eso, tiro de esquina para nosotros. Giorgi va a tomar la pelota. Envía el centro al punto penal, y como si de una jugada preparada se tratase, nuestro defensa central "Bidzi" aparece corriendo desde fuera del área y de un cabezazo casi rompe la red de la portería. Golazo. El arbitro pita el final. Ganamos 2-1. Nos complicamos más de lo esperado, pero al final el resultado fue favorable. El rendimiento fue bueno. Giorgi me gustó mucho. Aaron también. Estoy en el estacionamiento, metiendo mis cosas en el carro. Los jugadores ya se han ido, toca ahora concertarse para la liga. Debuto ante los punteros. Cuando cierro mi maletera, pasa lo que estaba esperando. - Hay que mejorar. - escucho por mi espalda. Es Teimuraz - Si sé, pero la base está. - ¿Romain? - Lo patearon, no me la iba a jugar. Había que sacarlo. - Pudiste darle más tiempo. No destacó mucho. - Yo soy el entrenador, Teimuraz. Yo decido quien juega y quien no. - Solo digo que no jugó como yo habría esperado. - ¿Crees que me importa? El es un jugador más. Conozco su nivel. Si no jugó como esperabas será por algo. A mi me gustó, hizo su trabajo. Teimuraz me da una palmada en el hombro y se despide. Mientras camina hacia el club me dice: - Espero que Aaron siga anotando en liga. No respondo, simplemente entro a mi carro y arranco. [...] Dos semanas han pasado. Mi cuerpo técnico se va reforzando, el equipo adaptando. Estoy tranquilo, se viene un mes complicado en el que hay que levantar cabeza y sacar resultados positivos si o si, para salir de esta situación de mierda. Por mi parte, tengo esperanzas.
Enero 28, 20196 años Romain lo está haciendo bien, pero Aaron lo hace mejor, mira que poco tiempo necesitó para marcar y ser uno de los mejores del equipo. Aunque las carreras son largas, muchas veces inicios prometedores se quedan por el camino y otros maduran lento pero llegan muy lejos. Así que espero que Romain de pronto un paso adelante y luche con su hermano por el cariño de la afición. Sería posible ver los atributos de los hermanos? solo por curiosidad
Enero 29, 20196 años No te voy a mentir. En un primer momento, cuando publicaste el primer capítulo, comencé a leer y cuando vi que era una competición de la que no tenía ni la mas remota idea, nl terminé el post porque pensé que no me atraería mucho. Pero ayer volví a pasarme por la historia y he de reconocer que la construcción del marco argumental me ha parecido soberbia, con una narración muy cuidada y detallada y una presentación de nuestros hermanos protagonidtas muy lograda y creible. Me uno a tu historia, los dos leones me han encandilado. Esperemos que su carrera se desarrolle y lleguen a brillar en el fútbol europeo. Un saludo!
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